Los fiscales de Sonora dijeron que un equipo de búsqueda conformado por voluntarios encontró el sitio donde se ubican las fosas clandestinas en la localidad de Cajeme, que fue excavado por la policía y los expertos posteriormente.
Por Félix Márquez
Veracruz, 18 de febrero (AP) — Por lo menos media docena de cadáveres han sido encontrados enterrados en fosas poco profundas en el estado de Sonora, en el norte de México, mientras que en el estado de Veracruz, situado en la costa del Golfo de México, expertos y policías descubrieron al menos tres fosas comunes en una isla con manglares, informaron el jueves las autoridades.
Los fiscales de Sonora dijeron que un equipo de búsqueda conformado por voluntarios encontró el sitio donde se ubican las fosas clandestinas en la localidad de Cajeme, que fue excavado por la policía y los expertos posteriormente. Dos cadáveres y cuatro conjuntos de restos óseos fueron recuperados de las fosas, que estaban cerca de un cementerio.
En Veracruz, los investigadores de la Comisión Nacional de Búsqueda encontraron tres fosas que contenían restos humanos y bolsas de plástico. De momento no se ha determinado el número de cuerpos que fueron hallados.
Veracruz ha sido el sitio donde se han encontrado algunas de las fosas clandestinas más grandes en los últimos años. Los sitios a menudo son utilizados por bandas de narcotraficantes para deshacerse de los cadáveres de sus adversarios o de víctimas de secuestro.
Los grupos de búsqueda de voluntarios, los cuales generalmente están conformados por familiares de personas desaparecidas, han desempeñado un papel importante en el hallazgo de fosas clandestinas en México.
Lucía Díaz, una activista cuyo grupo Colectivo Solecito ha guiado en ocasiones anteriores a la policía a otras fosas clandestinas en Veracruz, dijo que estaba sorprendida de que los criminales se hubieran tomado la molestia de utilizar el manglar para deshacerse de los cadáveres.
“Es un estado donde tenemos fosas realmente por todos lados”, comentó Díaz. “Lo que sí nos sorprende es que hayan tenido este alcance de hacer estas inhumaciones en lugares tan complicados, que tanto complican la búsqueda como también causan un mayor deterioro a los cuerpos”, añadió.
Díaz dijo que debido a que el lugar es tan acuoso y alcalino, puede ser complicado obtener muestras de ADN para identificar los cuerpos.
En noviembre, las autoridades del estado occidental de Jalisco recuperaron 113 cadáveres y otros restos humanos de una fosa clandestina en la localidad de El Salto, ubicada en las afueras de Guadalajara. Un total de 189 cuerpos fueron encontrados en el municipio durante 2020.
Más de 80 mil personas han sido reportadas como desaparecidas desde que empezó la guerra contra el narcotráfico de México en 2006.
