Los tres rehenes, todos de unos 20 años, fueron asesinados el viernes en el área de Shijaiyah, en la ciudad de Gaza, donde los militares luchan contra Hamás.
Por Wafaa Shurafa y Samy Magdy
Deir Al-Balah, Franja de Gaza, 17 de diciembre (AP) — Israel enfrentaba protestas locales y llamados a un cese del fuego por parte de algunos de sus aliados europeos y también en casa el domingo después de una serie de tiroteos, incluido el de tres rehenes, tras 10 semanas de guerra en Gaza.
Los manifestantes están pidiendo al Gobierno que renueve las negociaciones sobre rehenes con el grupo armado palestino Hamás, que ha prometido destruir. Israel también podría enfrentar presiones para reducir las operaciones de combate cuando el Secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, visite esta semana. Washington ha expresado creciente inquietud por las víctimas civiles, aunque sigue brindando apoyo militar y diplomático vital.
La guerra aérea y terrestre ha arrasado gran parte del norte de Gaza, matado a miles de civiles; muchísimos están hacinados en refugios abarrotados y tiendas de campaña, sobreviviendo gracias a un goteo de ayuda humanitaria. Unos 1.9 millones de palestinos —casi el 85 por ciento de la población de Gaza— han huido de sus hogares.
El Primer Ministro Benjamín Netanyahu dijo que Israel “seguirá luchando hasta el final”, con el objetivo de eliminar a Hamás, que desencadenó la guerra con su ataque del 7 de octubre al sur de Israel. Los milicianos mataron a unas mil 200 personas ese día, en su mayoría civiles, y capturaron a decenas de rehenes.
Netanyahu prometió traer de vuelta a los 129 rehenes que se estima aún están en cautiverio. Los medios israelíes informaron que David Barnea, jefe de la agencia de espionaje israelí Mossad, se reunió el fin de semana con el Primer Ministro de Qatar, el jeque Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, quien ha mediado con Hamás, para discutir la reanudación de las conversaciones.
Mientras tanto, en Gaza, las telecomunicaciones gradualmente se restablecían tras un apagón que duró cuatro días, el más largo de varios apagones durante la guerra. Los grupos de ayuda dicen que los apagones complican los esfuerzos de rescate.
En señal de desesperación, decenas de palestinos rodearon camiones de ayuda después de que atravesaron el cruce de Rafah con Egipto, para llevarse el cargamento.
Sobreviven gracias a un goteo de ayuda humanitaria. Israel dijo que a partir del domingo, los camiones de ayuda de la ONU podrían entrar a Gaza desde un segundo lugar, Kerem Shalom.
Por otra parte, oficiales militares dijeron el sábado que los tres rehenes asesinados a tiros por error por tropas israelíes trataron de dar señales de que no representaban ningún peligro. Fue el primer reconocimiento de este tipo por parte de Israel de haber dañado a rehenes en una guerra que, según dice, tiene como objetivo en gran medida rescatarlos.
Los tres rehenes, todos de unos 20 años, fueron asesinados el viernes en el área de Shijaiyah, en la ciudad de Gaza, donde los militares luchan contra Hamás.
Israel dice que hace todos los esfuerzos posibles para evitar dañar a los civiles y acusa a Hamás de utilizarlos como escudos humanos. Pero los palestinos y los grupos de derechos humanos han acusado repetidamente a las fuerzas israelíes de poner en peligro imprudentemente a los civiles y disparar contra quienes no los amenazan.
En Gaza, los palestinos han dicho en varias ocasiones que los soldados israelíes abren fuego contra los civiles que huyen. Hamás ha afirmado que otros rehenes murieron por fuego o ataques aéreos israelíes, sin presentar pruebas.
La ofensiva ha matado a más de 18 mil 700 palestinos y miles de víctimas más están enterradas bajo los escombros, dijo el jueves el Ministerio de Salud en Gaza. Desde entonces no ha podido actualizar el número de víctimas debido al corte de comunicaciones.
El Ministerio no diferencia entre muertes de civiles y combatientes, pero durante toda la guerra ha dicho que la mayoría son mujeres y niños.
El ejército de Israel dice que 121 soldados han fallecido en la ofensiva de Gaza.
En tanto, decenas de manifestantes instalaron tiendas de campaña frente al Ministerio de Defensa en Tel Aviv el sábado, diciendo que se quedarán hasta que el Gobierno reanude las negociaciones sobre rehenes con Hamás. “Los rehenes están viviendo un infierno y corren peligro de muerte”, dijo Raz Ben-Ami, un rehén liberado en el último intercambio. “Israel debe ofrecer otro acuerdo de liberación de rehenes”.
Hamás ha dicho que no liberará más rehenes hasta que termine la guerra y que a cambio exigirá la liberación de un gran número de prisioneros palestinos, incluidos milicianos de alto perfil. Ya dejó ir a más de 100 de los más de 240 rehenes capturados el 7 de octubre a cambio de la liberación de decenas de prisioneros palestinos durante una breve tregua en noviembre. Casi todos los liberados en ambos lados fueron mujeres y menores. Israel ha rescatado a un rehén.
Por otra parte, la Ministra de Asuntos Exteriores de Francia, Catherine Colonna, pidió el domingo una “tregua inmediata” destinada a liberar más rehenes, conseguir mayores cantidades de ayuda para Gaza y avanzar hacia “el comienzo de una solución política”.
Mientras tanto, los cancilleres de Reino Unido y Alemania pidieron un alto el fuego “sostenible” y dijeron que “han muerto demasiados civiles”.
“Israel no ganará esta guerra si sus operaciones destruyen la perspectiva de una coexistencia pacífica con los palestinos”, escribieron el ministro británico del Exterior, David Cameron, y su colega alemana, Annalena Baerbock, en el Sunday Times del Reino Unido.