Unicef, OPS y la OMS concluyeron que México debe cambiar su sistema de etiquetado porque está suscrito al Convención sobre los Derechos del Niño y para atender la epidemia de obesidad y diabetes en el país.
Ciudad de México, 17 de septiembre (SinEmbargo).– El etiquetado en alimentos procesados en México deber ser informativo y de fácil comprensión para proteger los derechos de las niñas, niños y adolescentes, además, deberían prohibirse estrategias de marketing dirigido a dicho grupo poblacional, así como la venta de estos productos en las escuelas, planteó el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los organismos publicaron una tarjeta informativa donde criticaron que el etiquetado mexicano vigente desde 2014 se implementó sin ser discutido por un grupo de trabajo especializado o por personas expertas, como lo recomienda la OMS, además de ser difícil de comprender incluso para estudiantes de nutrición.
“Para que un etiquetado sea adecuado debe proporcionar información clara, directa, sencilla, visible, en forma rápida y fácil de entender tanto para adultos como niños. Además, debe utilizar perfiles nutrimentales validados por expertos en la materia que defiendan intereses de salud pública y una alimentación saludable. Cuando un etiquetado no cumple con estas características, tal como es el caso del etiquetado actual mexicano, la medida puede no tener resultados o incluso puede resultar contraproducente”, indicaron.
El sistema vigente en México es el de Guías Diarias de Alimentación (GDA), que consiste en mostrar los porcentajes de azúcares totales, grasa saturada, otras grasas, sodio y calorías de una porción del producto respecto a las cantidades recomendadas en una dieta de 2 mil kilocalorías.
Unicef, OPS y la OMS concluyeron que México debe cambiar su sistema de etiquetado porque está suscrito al Convención sobre los Derechos del Niño y para atender la epidemia de obesidad y diabetes en el país, pues, en el caso de las niñas, niños y adolescentes, alrededor de un tercio de ellos viven con exceso de peso.
“Es de suma importancia que los niños y niñas puedan contar con las herramientas para distinguir productos alimenticios que no son saludables. La evidencia disponible muestra que este grupo tiene dificultades realizando decisiones saludables al momento de elegir entre alimentos empacados ya que, además de considerar la información nutrimental confusa, basa sus criterios en diferentes elementos del empaque como son los personajes, dibujos de frutas o leyendas nutricionales como ‘contiene 15 vitaminas y minerales’”, expusieron las organizaciones.
EL MODELO PARA MÉXICO
En la nota técnica “Un etiquetado nutrimental frontal claro y de fácil comprensión protege a niñas, niños y adolescentes en México”, los organismos internacionales llamaron a a las autoridades del país a considerar la perspectiva de niñas, niños y adolescentes para que puedan tomar decisiones informadas y consideraron que el mejor sistema de etiquetado que podría aplicarse es el chileno.
“Existe evidencia de que un etiquetado como el chileno es entendible por este grupo poblacional, incluyendo aquellos en menor nivel socioeconómico”, indicaron.
El modelo de etiquetado de Chile indica si un producto alimenticio es alto en los grupos identificados como críticos para la salud: azúcares, grasas saturadas, sodio y calorías, para ello se ayuda de octágonos negros.
“Durante el diseño del etiquetado chileno se llevaron a cabo grupos focales con niños y niñas de entre 10 y 12 años y adolescentes de 15 a 18 años, entre quienes se comprobó que los octágonos negros tienen altos niveles de comprensión. En el caso de México, la evidencia reciente indica de igual forma que niñas y niños en edad escolar con un bajo nivel socioeconómico entienden el etiquetado octagonal similar al de Chile”, resaltaron.
Actualmente, hay una discusión legislativa sobre la modificación de la Ley General de Salud que contempla el etiquetado.
Tan solo el pasado 14 septiembre el Consejo Nacional de Salud (Conasa) acordó que emitirá un pronunciamiento a favor de la aprobar del nuevo etiquetado en el Congreso con la consigna de que se claro, preciso y promueva elecciones saludables de alimentos.