Denuncias de acoso sexual y cultura tóxica en el lugar de trabajo desde 2006 hasta 2019 fueron planteadas por quince mujeres. Los implicados en la situación de los Redskins ya no están en el equipo, incluidos los exejecutivos de negocios Dennis Greene y Mitch Gershman.
Washington, 17 de julio (EFE).- Los Redskins de Washington presentaron este viernes su nuevo plan para desterrar de su disciplina comportamientos que lleven a denuncias como las recientes de acoso sexual y ambiente "tóxico", o presunciones de racismo.
Las acusaciones se producen tras el anuncio del equipo, el pasado lunes, que había iniciado el proceso de retirada de su nombre y logotipo, considerados racistas, tras completar una revisión exhaustiva que comenzó el 3 de julio.
El dueño de los Redskins, Dan Snyder, se comprometió a mejorar la cultura dentro del equipo, mientras que la Liga Nacional de Futbol Americano (NFL) dijo que esperará la revisión de una firma de abogados independiente antes de tomar medidas.
Denuncias de acoso sexual y cultura tóxica en el lugar de trabajo desde 2006 hasta 2019 fueron planteadas por quince mujeres.
Catorce de ellas hablaron con el periódico The Washington Post bajo condición de anonimato, y algunas firmaron acuerdos de confidencialidad con el equipo.
"El comportamiento descrito en el artículo de ayer del Washington Post no tiene cabida en nuestra franquicia o sociedad", reconoció Snyder en un comunicado ofrecido este viernes por el equipo.
Snyder contrató a la firma de abogados Wilkinson Walsh del Distrito de Columbia para llevar a cabo una revisión independiente de las políticas del equipo, la cultura y las denuncias de mala conducta en el lugar de trabajo.
La NFL dijo en un comunicado que se reunirá con abogados después de que se complete la investigación y actuará en función de los hallazgos en una franquicia que tiene 87 años de historia y tres títulos de Super Bowl en sus vitrinas.
"Según los informes, estos asuntos son graves, inquietantes y contrarios a los valores de la NFL", admitió la liga. "Todos en la NFL tienen derecho a trabajar en un entorno libre de cualquier forma de acoso".
La NFL insistió que tenía la confianza de que tanto el equipo como todos los empleados cooperen, pero que aún no está realizando su propia revisión.
Snyder también se comprometió a realizar cambios organizativos y de ahí la contratación de la abogada Beth Wilkinson y su firma para que establezcan un informe imparcial con las recomendaciones que establezca la hoja de ruta a cumplir.
"Al finalizar su trabajo, instituiremos nuevas políticas y procedimientos y fortaleceremos nuestra infraestructura de recursos humanos para no solo evitar estos problemas en el futuro, y lo más importante, crear una cultura de equipo que sea respetuosa e inclusiva para todos", subrayó Snyder. "La llegada de Ron Rivera como entrenador en jefe fue el primer paso en esa dirección".
Rivera, de padre puertorriqueño y madre de ascendencia mexicana, además de ser el nuevo entrenador en jefe también tendrá todo el control de las operaciones del fútbol, y ya ha manifestado su compromiso por que el cambio dentro de los Redskins sea real.
El director de personal de jugadores Alex Santos, el asistente Richard Mann II y el locutor de largo tiempo y vicepresidente senior Larry Michael ya no están con el equipo. Michael anunció el miércoles que se retiraría después de 16 años.
Santos, quien fue despedido esta semana, es acusado por seis exempleadas y dos reporteras que cubrieron al equipo de comentar sobre sus cuerpos y hacer propuestas inoportunas, según el Post.
Los demás implicados en el presunto acoso sexual que se daba en el ambiente de trabajo de los Redskins ya no están en el equipo, incluidos los exejecutivos de negocios Dennis Greene y Mitch Gershman.
Emily Applegate, la única exempleada de los Reskins nombrada en el informe del Post, denunció que Gershman abusó verbalmente de ella por problemas menores en el lugar de trabajo y también elogió su cuerpo.