Según la investigación publicada en Scientific Reports, distintas obras se han atribuido a Leonardo da Vinci, pero con el paso del tiempo los historiadores han intentado corroborar la información. En esta ocasión, bajo nuevos análisis químicos, se resolvió que autenticidad del busto de Flora.
Madrid, 17 de abril (EuropaPress).- La controversia de más de un siglo sobre la autoría del busto de Flora expuesto en el Museo Bode de Berlín ha quedado resuelta con la conclusión final de que no fue obra de Leonardo Da Vinci.
"Es una maquinación, es un engaño", dijo el director general de los Museos Reales de Berlín en su defensa cuando fue criticado por comprar una falsificación. Wilhelm Bode no se movió ni un centímetro: la escultura que adquirió en 1909 era una producción aún desconocida del gran maestro del Renacimiento Leonardo da Vinci.
Después de cien años y numerosas controversias, un grupo de científicos dirigido por un investigador del CNRS (centro nacional de investigación francés) acaba de demostrar de una vez por todas que el erudito alemán estaba equivocado.
El denominado busto de cera Flora ha sido sometido recientemente a una datación por radiocarbono (s. XIV), que proporciona una fecha precisa y un resultado incontrovertible: se realizó en el siglo XIX, casi 300 años después de la muerte de Da Vinci, informa el CNRS en un comunicado.
Como la escultura estaba hecha principalmente de espermaceti, una especie de cera extraída de las ballenas, los investigadores tuvieron que desarrollar un nuevo método de calibración para fechar con precisión la obra de arte.
Sus resultados, que se publican en Scientific Reports, muestran cómo la datación por carbono 14 se puede aplicar a materiales inusuales.