Mazamitla, Tapalpa y Atemajac de Brizuela comparten similitudes notables, entre ellas la belleza de sus atracciones, pero ¿qué hacer en cada uno de ellos? Aquí te compartimos lo que no puedes perderte.
Ciudad de México, 17 de marzo (SinEmbargo).- Jalisco cuenta con hermosos lugares que destacan por su magnífica comida y hospitalidad. Entre ellos se encuentran Mazamitla, Tapalpa y Atemajac de Brizuela, tres municipios que comparten belleza con hermosos paisajes, calidez de la gente que recibe a los visitantes con los brazos abiertos y comida deliciosa, aquí damos algunos imperdibles de cada destino para pasar unos días de descanso extraordinarios.
Mazamitla
Mazamitla, un encantador pueblo situado en el estado de Jalisco, es reconocido por su impresionante entorno montañoso y su clima fresco y agradable. En este lugar, contemplar la lluvia desde la ventana se convierte en una experiencia única de conexión con la naturaleza y tranquilidad. Organizar un itinerario en este destino puede ser una elección excelente, y más aún si se decide pernoctar en el municipio.
Para quienes buscan unos días de relax y conexión con la naturaleza, Bosque Escondido es la opción. Desde su terraza se pueden apreciar los mejores atardeceres, mientras que junto a la chimenea se disfruta del sonido reconfortante de la lluvia. Con opciones como compartir el jacuzzi con la pareja o participar en actividades al aire libre, este lugar ofrece una experiencia enriquecedora y rejuvenecedora. Por otro lado, Hotel Monteverde sobresale como una opción excelente para descansar en medio del bosque, ofreciendo servicios completos y altos estándares de seguridad. Además de sus confortables habitaciones, el hotel proporciona paquetes tanto románticos como familiares, así como una variedad de actividades deportivas y recreativas tanto dentro como fuera del bosque, asegurando una estadía memorable para todos sus huéspedes.
En Mazamitla, además de Bosque Escondido y Hotel Monteverde, se destaca la Villa Cipreses, un espacio de belleza natural y serenidad, y el Hotel Huerta Real, situado cerca de la plaza principal, rodeado de huertos de frutas. Además, la región ofrece actividades al aire libre como senderismo, pintura paisajística, ciclismo, equitación, observación de aves y la oportunidad de interactuar con animales salvajes en la reserva de Camino Real del Tigre. Cabe señalar que todos estos sitios pertenecen a la Asociación de Haciendas y Casonas de Jalisco.
En este bello Pueblo Mágico hay que probar sí o sí los chongos; las conservas de frutas de membrillo, tejocote, durazno y chilacayote. También se puede endulzar el paladar con rompope, cajeta, rollos de fruta y dulces regionales. Otros imperdibles para consentir el estómago son el caldo de bote, queso adobera, el camote tatemado, el menguiche, los tacos sudados, los frijoles puercos y el mole de olla. Para beber, está el famoso “pajarete”, bebida preparada de leche fresca con un toque de aguardiente de caña, azúcar y chocolate. O tal vez un ponche de zarzamora, capulín o ciruela; atole de aguamiel, un buen pulque o un mezcal.
Tapalpa
Tapalpa, reconocido como Pueblo Mágico y famoso por sus impresionantes piedrotas, es otro destino ideal para pasar unos días de descanso y diversión. Durante la época de Semana Santa el Templo de Nuestra Señora de Guadalupe se convierte en un punto de visita imperdible, gracias a su impresionante arquitectura construida enteramente con ladrillos, prescindiendo de vigas o enjarres. Además, este destino es hogar de bellos bosques y aguas cristalinas, como las cascadas El Coamil de las Naranjas y El Rincón de Ixcatán, y las lagunas de Juanacatlán y Yerbabuena. Algunas de las actividades deportivas más comunes son el canotaje, ciclismo de montaña, senderismo, camping y la pesca deportiva.
Para los aficionados al vino, La Vid del Bosque emerge como una opción única de hospedaje, con su concepto enológico y cabañas ubicadas en medio del bosque. Su cava restaurante ofrece un menú Ítalo-Argentino y una exclusiva mixología de autor, acompañados de música en vivo y una extensa selección de más de 100 etiquetas de vinos para degustar.
Por otro lado, la Casona de Manzano brinda una experiencia de descanso excepcional, fusionando un hotel boutique con galería, proporcionando alojamiento en cómodas habitaciones y una gastronomía inigualable. Además, el exclusivo Hotel Monterra, con sus cabañas cercanas al Centro Histórico de Tapalpa, dan la vista panorámica más espectacular de este Pueblo Mágico, con la majestuosa caída de agua conocida como “El Saltito”. Y finalmente, el Hotel Remanso es el destino perfecto para escapar del estrés urbano, ofreciendo paisajes impresionantes hacia la Presa del Nogal desde la mayoría de sus habitaciones, y ofreciendo actividades como senderismo, ciclismo de montaña, pesca deportiva, paseos en kayak y relajación en su alberca al aire libre.
Como en todo Jalisco, Tapalpa se distingue por su gastronomía. Aquí destacan las conservas de frutas elaboradas artesanalmente, además de los dulces en almíbar o a base de leche como la cajeta, los jamoncillos y el llamado pegoste. Sus platillos y bebidas más tradicionales son el borrego al pastor, los tamales de acelga, el pulque, el rompope y el ponche de frutas.
Atemajac de Brizuela
Atemajac de Brizuela es una cálida localidad de calles empedradas rodeada de paisajes boscosos de pino, encino y cedro. Las recomendaciones para conocerlo es hacer una parada en El Templo de San Bartolomé, un sitio con terminados de piedra y estilo romano; visitar sus icónicos espacios de estilo colonial como las capillas del Señor del Ocotito y de Santo Santiago; admirar o comprar artesanías típicas de talavera, sarapes y trabajos en madera; así como realizar actividades como: senderismo, cabalgatas en la Piedra Redonda o gozar de atardeceres de Las Presitas.
Para la hora de la comida es imperdible probar: la birria, el pozole, pipián, mole, o el borrego al pastor, tortitas de chinchayote y camarón, calabaza con miel, ý queso panela; así como disfrutar de su tradición en dulces que incluye: cajetas de membrillo y tejocote, dulces de leche, borrachitos, jalea y conservas de durazno, manzana y capulín. Y lo mejor será acompañarlo con bebidas típicas de la región como el rompope, pulque y ponches de sabores.
Cabe señalar que, como parte de los programas para brindar experiencias únicas, la Asociación Haciendas y Casonas de Jalisco, ofrece maravillosas alternativas de hospedaje para descansar en Atemajac de Brizuela algunas de ellas son: Quinta Tere Hotel & Gallery que es un alojamiento en medio de la naturaleza, y se puede elegir entre cabañas o habitaciones, la decoración del lugar sin duda es espléndida; por su parte el Hotel Boutique Montecruz fusiona a la perfección el lujo, lo campestre y lo contemporáneo; y para quienes busquen algo más original, Koanze Luxury Hotel & Spa ofrece todo un oasis con preciosos detalles orientales, lagos estilo japonés y laberintos.