La petición que los habitantes plantearon al Gobierno es retirar toda la presencia de grupos armados de cualquier organización, en la sierra, desde Casa Verde hasta Corralitos y de ahí a Polixtepec.
El director del Centro de Derecho Humanos José María Morelos y Pavón, Manuel Olivares, recordó que en Guerrero hay más de 3 mil desplazados por la violencia. En un principio se relacionó con el control de territorio, pero ahora ocurre por concesiones mineras.
Por Anarsis Pacheco
Chilpancingo y Huitzuco, Guerrero, 17 de febrero (ElSur/SinEmbargo).- Desplazados por la violencia de la sierra de Leonardo Bravo y el municipio de Zitlala se dirigen este domingo en caravana hacia la Ciudad de México para protestar en el Zócalo y exigir una mesa de trabajo con el Presidente Andrés Manuel López Obrador, ante la desatención del Gobierno de Guerrero.
A las 11:35 de la mañana en dos autobuses y cuatro camionetas con colchonetas y lonas los habitantes de la sierra refugiados en Chichihualco salieron de la gasolinería de Tierras Prietas, en Chilpancingo, rumbo a la caseta de Paso Morelos de la Autopista del Sol donde se incorporaron las familias de Tlaltempanapa, Zitlala.
Antes de las 2 de la tarde los habitantes de Tlaltempanapa, que desde el 5 de noviembre están refugiados en Copalillo, tomaron las cuatro casetas de cobro de Paso Morelos para recolectar dinero que necesitan para su viaje.
La acción es respalda por los desplazados de Leonardo Bravo, mientras que policías estatales y federales observan la protesta.
En declaraciones en la capital, Crescencio Pacheco González, señaló que a casi cuatro meses de permanecer hacinados en el auditorio de Chichihualco no ven ninguna mejora en su caso, a pesar de la promesa del Gobierno del Estado.
“Ya vamos para el cuarto mes y la atención no ha sido favorable, y el señor Gobernador no nos ha atendido personalmente”, expresó.
La petición planteada al Gobierno federal es que se logre retirar toda la presencia de grupos armados en la sierra, desde Casa Verde hasta Corralitos y de ahí a Polixtepec, porque los habitantes no quieren grupos armados de ninguna organización.
“Queremos regresar tranquilos, queremos nuestras casas y nuestros animales que ellos ya tienen”, agregó.
Por su parte, el director del Centro de Derecho Humanos José María Morelos y Pavón (Centro Morelos), Manuel Olivares, recordó que en Guerrero hay más de 3 mil desplazados por la violencia, que en principio se daba por el control de territorio, pero ahora ocurre por concesiones mineras.
