Las corrientes mayoritarias del PRD están pasando por alto la forma tradicional en la que se reparten las candidaturas al Congreso de la Unión al interior del partido: de manera proporcional al número de consejeros que cada “tribu” o corriente tiene al interior del Consejo Ejecutivo Nacional conformando por 400 miembros, acusan líderes de la fuerza política, a un día de que se reúna el Consejo Nacional electivo.
“Los Chuchos”, los manceristas y ADN, acusaron, instalaron una mesa de negociación, sin ellos.
Si se empeñan, dicen, el costo será electoral para la alianza “Por México al Frente” en una elección presidencial que “se puede definir por una diferencia mínima” y advierten que la militancia del partido “tiene su corazón a la izquierda”, en referencia a un éxodo perredista.
Ciudad de México, 17 de febrero (SinEmbargo).– Las corrientes que dominan el Partido de la Revolución Democrática (PRD) negocian las candidaturas al Congreso de la Unión, sin tomar en cuenta a la “tribus” más pequeñas que representan una cuarta parte de los consejeros nacionales, lo que pone en riesgo la elección del 1 de julio, advirtieron líderes de ese instituto político.
A unas horasde que inicie el Consejo Nacional en donde deberán repartirse 105 candidaturas a la Cámara de Diputados y unas 30 al Senado de la República, un grupo de liderazgos perredistas reclamaron que no han sido tomados en cuenta por los “Los Chuchos”, los manceristas y Alternativa Democrática Nacional (ADN), quienes negocian entre ellos las candidaturas.
La alianza electoral “Por México al Frente” –integrada por los partidos Acción Nacional (PAN), Movimiento Ciudadano (MC) y PRD– acordó el reparto de candidaturas entre los tres partidos. El PRD consiguió que el PAN no se quedara con el 50 por ciento de las postulaciones que pedían distintos actores panistas y la distribución quedó con 48 por ciento para el blanquiazul, 36 por ciento para el Sol Azteca y un 16 por ciento para MC.
En la repartición de las candidaturas al interior de la coalición, muchos panistas a nivel local se quejaron de que el PRD tenía más espacios de los que le correspondía, como en Baja California y Sinaloa, debido a que el Sol Azteca apenas tiene un 8 por ciento de la intención del voto a nivel nacional.
“Sería absurdo y suicida. Estamos en un escenario de competitividad nacional, donde la elección presidencial se puede definir por una diferencia mínima, incluso veo una elección cerrada y se necesitarán de todos los equipos políticos. Nadie en su sabio juicio debería pretender excluir a una cuarta parte, o a cualquier equipo aunque sea el 1 por ciento, todos los liderazgos deben ser incluidos”, dijo en entrevista Vladimir Aguilar García, ex líder de la corriente Foro Nuevo Sol y secretario de Operación Política del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del partido.
Las “tribus” que denunciaron ser ignoradas señalaron que representan a 100 consejeros en un Consejo Nacional de 400, es decir, una cuarta parte.
“Si no hay un proceso amplio de inclusión y reconocimiento de los territorios que son bastiones, de los perfiles; parecería que no están pensando en ganar. Yo creo que es una visión muy cortoplacista, esperemos que no se imponga y no sea la intención de llevar a cabo”, precisó Vladimir Aguilar.
El martes trascendió que Guadalupe Acosta Naranjo, líder de la corriente Galileos, se reunió con Marcelo Ebrard Casaubón, ex Jefe de Gobierno capitalino y hoy colaborador de Andrés Manuel López Obrador, precandidato a la Presidencia de la República de la coalición “Juntos Haremos Historia”.
Acosta Naranjo negó en entrevista con medios de comunicación que vaya a renunciar al PRD para sumarse al partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
“Es un rumor, es un rumor. Ustedes saben que yo he sido impulsor de un frente amplio, no he pensando, no tengo la menor idea. Tengo muchos amigos en Morena por una razón: eran del PRD y que estemos en partidos distingos, no implica que por eso pierdas tú la amistad, como con muchos compañeros del PT [Partido del Trabajo]”, contestó a la prensa ante las versiones de su posible salida del PRD, que fueron difundidas en distintos medios de comunicación nacional.
Pero el mismo martes varios secretarios del PRD ofrecieron una conferencia de prensa para emplazar a Manuel Granados Covarrubias, dirigente nacional del Sol Azteca, a incluir a sus corrientes en el reparto de las candidaturas. Ahí estuvieron tres representantes de Galileos.
Los Galileos dejaron claro que hay una preocupación por la incertidumbre que priva en diversos estados por el reparto de las candidaturas y aclararon que “no podemos aprobar sobre las rodillas las candidaturas”.
En entrevista para este diario digital, Vladimir Aguilar abundó que si la dirigencia del partido y los líderes que tienen la mayoría de consejeros en el Consejo Nacional se empeñan en excluirlos, tendrán un “plan B, C o N”.
“Hasta el día de no nos han convocado. Nosotros creemos que debe haber un ejercicio transparente de inclusión en la elaboración de las candidaturas competitivas para el partido, las de mayoría; y en el caso de las plurinominales un respeto a lo proporcional. No estamos pidiendo nada de más, pero no vamos aceptar nada de menos. Somos una cuarta parte del Consejo”, dijo Aguilar.
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DIVISIÓN Y ÉXODO
La falta de convocatoria a los liderazgos que representan a las corrientes más pequeñas al interior del partido no significa que las “tribus” mayoritarias no estén negociando por su cuenta, reconoció Alejandro Sánchez Camacho, de la corriente Izquierda Democrática Nacional (IDN) y secretario de Acción Política Estratégica del CEN perredista.
“No hay un conocimiento, pero en experiencias anteriores sí lo hicieron. Sería ingenuo pensar que a dos días del Consejo, no haya una mesa para tratar el tema”, dijo.
Sánchez Camacho agregó que los liderazgos en diversas entidades del país también fueron excluidos de la negociación de las candidaturas, “por eso hubo ya una toma de las instalaciones de los comités estatal en Guerrero”.
El perredista indicó que el peligro real para el partido no es una desbandada de líderes, ni las renuncias, “el tema central es que la militancia de nuestro partido tiene su corazón a la izquierda. Para el buen entendedor, pocas palabras”.
Los líderes de las corrientes más pequeñas, afirmó, desconocen hasta el momento el método a través del cual se repartirán las candidaturas al Congreso de la Unión.
“Esto debe tratarse en términos institucionales en la Comisión de Candidaturas, tampoco ha sido convocada. Ese método ha dado garantía de gobernabilidad, es el que genera menos inconformidades, pero desconocemos todo; no hay mesa, una mesa institucional de diálogo”, explicó.
Sánchez Camacho recordó que para aprobar las listas de las candidaturas en el pleno del Consejo Nacional se requieren de dos tercios de los consejeros.
“Hay que ver si los tienen. Lo que ocasionará esto es que el Consejo que no tiene acuerdos ni consensos, se vuelve en debates interminables, recesos extremadamente prolongados. Pero eso es lo menos relevante. Lo que importa es el efecto político trascendental que tendrá el excluir a una parte importante del partido en los espacios de las candidaturas: se agravará más el distanciamiento de la dirección del PRD con su militancia, y se reflejará en las campañas y en la votación del 1 de julio. El dejar fuera sólo afianzará más el corazón de la militancia del PRD hacia la izquierda y no a la derecha”, indicó.
Ambos secretarios coincidieron que el diálogo y las decisiones se den hasta este sábado, día al que está convocado el Consejo Nacional.
