Jardín Botánico X’much Haltún alberga en Campeche más de 98 especies

17/01/2015 - 7:50 am

Por Nicolás Guzmán Vázquez. Corresponsal.

Campeche, 17 Ene (Notimex).- Más de 98 especies medicinales, comestibles y de ornato se encuentran en el Jardín Botánico X’much Haltún (agua que brota de la tierra), donde se puede apreciar los árboles, el sagrado de los mayas, la ceiba, y el palo de tinte, casi extinto.

El recinto se encuentra en el Baluarte de Santiago, el último de ocho en construirse, cuyo nombramiento es en honor a Santiago de Compostela o Santiago Matamoros, patrono de las conquistas de los españoles, el que se terminó de edificar en 1704.

Sin embargo, a principios del Siglo XX fue demolido y después, en los años 50, fue reconstruido, según datos recabados.

La estructura conserva sólo la puerta de acceso original, ya que el resto del recinto es producto de remodelaciones, en la actualidad es sitio de referencia de los turistas nacionales y extranjeros con el objeto de que tengan una idea de la naturaleza del estado.

El encargado del Jardín Botánico, Miguel Ángel Borges Hernández, dijo que se recibe un promedio de 500 visitantes en temporada de vacaciones, y refirió que normalmente el promedio de visitas es de 100 a 150 turistas nacionales, en su mayoría.

El jardín cuenta con una muestra de la flora de la entidad, que incluye una gran variedad de plantas de las más comunes a las más raras, las cuales sólo se desarrollan en apartadas latitudes de la geografía estatal.

Tiene 98 especies, de ellas algunas son plantas medicinales como el maguey rojo, otras son comestibles y unas más de ornato.

Entre las plantas que más llaman la atención de los visitantes está el palo de tinte o “palo de Campeche”, que a decir del delegado de la Comisión Nacional Forestal, Jorge Issac Brown Filigrana, “este árbol representó una de las mayores riquezas en la región en el siglo XVIII”. En su medio natural, ese árbol alcanza una altura de seis metros y era utilizado como colorante.

Ahora observar algunas de estas especies es casi un milagro, se encuentran en las partes inundables, donde hay selvas secas con árboles, por lo que es una gran oportunidad para los campechanos conocerlas en el Jardín Botánico.

Con el producto del palo de tinte, las industrias textiles de la Nueva España y Europa obtenían colorante para la lana en colores azul y negro, en tanto para la seda y el algodón el color era negro y cuando se unía con otros químicos se lograban el amarillo rojizo, el amarillo vivo, el violeta y el rojo oscuro o morado.

Su utilidad era tal que los ingleses establecieron una colonia para el corte del vegetal en la Laguna de Términos, zona que acabó siendo refugio y escala para los piratas y contrabandistas.

El llamado “palo de Campeche”, “palo tinte” o “palo de Brasil” finalmente llegó a su sobreexplotación, al grado que es casi extinto.

Otro de los árboles que llamada la atención de los visitantes por las leyendas locales, es la ceiba, pues se hizo creer a los mayas que sus ramas soportaban a los cielos, mientras que sus profundas raíces eran los medios de comunicación entre el mundo de los vivos y el inframundo.

En el jardín botánico también se han recolectado los primeros frutos del árbol de jícara que utilizan los artesanos y además se encuentra el árbol de amapola, el chicozapote, la cica y la “Ravenala madagascariensis”, una palmera mejor conocida como árbol del viajero.

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