Migrantes y defensores protestaron el martes contra el desalojo de sus moradas en un campamento en el norte de Francia; algunos subieron a los techos de los cobertizos para frenar brevemente las demoliciones, otros causaron un incendio durante la noche en el lugar y algunos otros se cosieron los labios.
CALAIS, Francia (AP) — Diversas organizaciones humanitarias acusaron el martes a las autoridades de desalojar con brutalidad a migrantes de sus precarias moradas en un gigantesco campamento en el norte de Francia, mientras continuaban las intensas protestas contra las demoliciones en el lugar.
Miles de migrantes que huyen de la guerra y la miseria en sus países utilizan la ciudad portuaria de Calais como trampolín en su intento de llegar a Gran Bretaña, al otro lado del canal de la Mancha.
Sin embargo, las autoridades procedieron a frustrar ese sueño con el cierre de una amplia franja del campamento, que tiene la fisonomía de un asentamiento precario en Calais.
Las organizaciones humanitarias señalaron que las autoridades no habían respetado su compromiso de proceder de manera humana y progresiva para persuadir a los migrantes a que se marcharan de sus moradas, a decir carpas y cobertizos de lona.
"Los refugiados, bajo amenazas y desinformación, recibieron plazo de una hora a 10 minutos para que dejaran sus moradas", afirmaron las organizaciones en un comunicado. La policía sacó por la fuerza a algunos migrantes que se rehusaban retirarse e hicieron algunos arrestos, mientras a otros no se les permitió recoger sus pertenencias ni sus documentos de identidad, se dijo en el comunicado.
Migrantes y sus defensores protestaron el martes contra el desalojo; algunos subieron a los techos de los cobertizos para frenar brevemente las demoliciones, mientras otros causaron un incendio durante la noche en el lugar.
En medio de la desesperación, dos hombres se han cosido los labios el día de hoy para denunciar la situación de los migrantes, como se aprecia en las dos fotografías publicadas en Twitter por un corresponsal de AAssociated Press.
Las carpas y cobertizos cubiertos con lonas también fueron incendiados el lunes y a primeras horas del martes.
Según las organizaciones, policías supuestamente dispararon bengalas contra los manifestantes que se encontraban en los techos, los golpearon con porras y arrestaron a algunos.
De acuerdo con el comunicado, la policía utilizó con exceso gas lacrimógeno, cañones de agua y otras tácticas.
Las organizaciones, respetadas por sus labores humanitarias con los migrantes, como Auberge des Migrants (Albergue para Migrantes), GISTI y Secours Catholique, figuraron entre las 15 que firmaron la lista de acusaciones.
El desalojo de gran escala efectuado en el sector sur del campamento fue anunciado el 12 de febrero con el compromiso del ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, de que no habría brutalidad.
Sin embargo, el lunes dieron inicio sorpresivamente a las operaciones de desalojo y demolición en el lugar.