Emilio Lozoya Austin, quien era director de Petróleos Mexicanos (Pemex), intentó obtener la medida cautelar para continuar en libertad provisional su único proceso pendiente por el caso Odebrecht.
Ciudad de México, 16 de diciembre (SinEmbargo).- Un Juez determinó negar el cambio de medida cautelar que solicitó Emilio Lozoya Austin, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), lo que significa que deberá continuar preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México.
En la audiencia de casi 12 horas celebrada ayer, la Fiscalía General de la República (FGR) señaló que el exfuncionario de Pemex ha empleado argucias legales para retrasar su proceso penal, y que el Caso Odebrecht es el asunto más “escandaloso de corrupción de la pasada administración”.
Emilio Lozoya Austin pretendía obtener el día de ayer una medida cautelar que le permitiera continuar en libertad provisional su único proceso pendiente por el caso Odebrecht.
La defensa del exfuncionario declaró ante medios de comunicación que solicitaría al Juez de control el cambio de medida cautelar para su cliente durante la audiencia programada para el mediodía de ayer, tras cumplir el plazo máximo establecido en la Constitución, que no puede prolongarse por más de dos años.
“Como lo sostiene el modelo democrático del derecho pragmático de la Constitución, son ya más de dos años que Emilio Lozoya Austin, de manera injustificada, ha estado privado de la libertad”, mencionó su abogado Miguel Ontiveros.
Desde el Reclusorio Norte, el abogado de Lozoya, confiaba en que el exfuncionario quedara en libertad provisional al terminar el día.
“Creemos firmemente que Emilio Lozoya nunca debió haber ingresado a prisión, es absolutamente ilegítima esa medida cautelar que se le impuso. Sin embargo, tenemos plena confianza en el Poder Judicial de la Federación, creemos que el día de hoy Emilio Lozoya estará en libertad, como debió haber sido desde un principio desde que él llegó a México”, dijo Ontiveros.
“Vamos a solicitarlo directamente al Juez de la causa, tenemos plena confianza en el juez de la causa, tenemos plena confianza en el PJF”, agregó.
Su defensa también explicó que la nueva medida cautelar para el exdirector de Pemex podría ser portar un brazalete electrónico. No obstante, sería un Juez quien determinara sí le permitiría seguir su proceso penal bajo arresto domiciliario.
El pasado miercoles, Lozoya Austin desistió de la suspensión definitiva que le fue otorgada por un Tribunal federal en el caso Odebrecht, donde impugnó la medida de prisión preventiva justificada.
Según un acuerdo del viernes 8 de diciembre y publicado tres días después, la defensa de Lozoya presentó esta petición ante el Segundo Tribunal Colegiado de Apelación en Materia Penal de la Ciudad de México para que un Juez de control se pronuncie sobre el otorgamiento de este beneficio.
Un día antes, Gustavo Aquiles Villaseñor, Juez de control del Centro de Justicia Penal Federal en el Reclusorio Norte, llevó a cabo una audiencia donde el exfuncionario pidió el cambio de medida cautelar para que le sustituyan la prisión preventiva justificada del caso Odebrecht, por las mismas disposiciones a las que estaba sujeto antes de ser recluido: el uso de brazalete electrónico, la prohibición de salir del país y su presentación periódica ante la Unidad de Medidas Cautelares (UMECA).
Su abogado declaró además que, en caso de que el Juez Aquiles Villaseñor le otorgue la libertad provisional, la hora de salida de Lozoya Austin dependerá del trámite de notificación que realice el Juez a la UMECA, para que enseguida contraten un brazalete electrónico.
“No depende de nosotros, tiene dos años, depende de la UMECA, saben que para usar un brazalete no es simplemente una llamada por parte de la abogacía sino que se requiere que la UMECA, en armonía con el juzgado, emita la resolución por escrito para que la UMECA la reciba y solamente así, con una resolución por escrito las empresas proceden a vincularse con la UMECA para conceder el mecanismo”, comentó.
“Depende de cuánto dure la audiencia, no lo sabemos, si la audiencia es rápida, puede ser. Si no, habrá que esperar”, contestó al ser cuestionado sobre si quedaría en libertad durante las próximas horas.
La solicitud de cambio de medida cautelar por parte de Lozoya se basa en el criterio de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que obliga a revisar la prisión preventiva después dos años de reclusión sin condena.
Lozoya ingresó al Reclusorio Norte el pasado 3 de noviembre de 2021, por lo que lleva más de dos años internado, sin embargo, sólo está sujeto a la prisión preventiva justificada por el caso Odebrecht, donde se le acusa por los delitos de asociación delictuosa, lavado de dinero y cohecho.