La farmacéutica estadounidense Moderna Inc. reportó buenos datos preliminares de efectividad en su vacuna contra la COVID-19, enfermedad que se habría originado en la ciudad de Wuhan, China.
Ciudad de México, 16 de noviembre (SinEmbargo).– La farmacéutica Moderna anunció este lunes que su vacuna contra el coronavirus tiene una efectividad del 94.5 por ciento, según una revisión temprana a los resultados de su más amplio estudio continuo.
Los investigadores dijeron que los resultados fueron mejores de lo que se habían imaginado. Pero la vacuna no estará ampliamente disponible en meses. Probablemente hasta la primavera.
Moderna es la tercera empresa que informa datos preliminares sobre una vacuna aparentemente exitosa, que ofrece esperanza en una pandemia creciente que ha infectado a más de 53 millones de personas en todo el mundo y ha matado a más de 1.2 millones. Pfizer, en colaboración con BioNTech, fue el primero en informar hace una semana que su vacuna tenía una efectividad superior al 90 por ciento. Le siguió Rusia, con su “Sputnik V”, que tiene, dice, 93 por ciento de efectividad.
We just announced that mRNA-1273, our COVID-19 vaccine candidate, has met its primary efficacy endpoint in the first interim analysis of the Phase 3 COVE study.
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Pfizer y Moderna fueron los primeros en anunciar los primeros datos sobre grandes estudios, pero otras 10 empresas también están llevando a cabo grandes ensayos de Fase 3 en una carrera global para producir una vacuna, incluidos los esfuerzos en Australia, Gran Bretaña, China, India y Rusia. Más de 50 candidatos más se encuentran en las primeras etapas de prueba.
Los investigadores prueban las vacunas inoculando a voluntarios y dando a otros placebos, y luego observando los dos grupos para ver cuántas personas se enferman. En el estudio de Moderna, 95 personas contrajeron el coronavirus: cinco que fueron vacunadas y 90 que recibieron inyecciones de placebo de agua salada. Estadísticamente, la diferencia entre los dos grupos fue muy significativa. Y de los 95 casos, 11 fueron graves, todos en el grupo de placebo.
Los resultados fueron analizados por una junta de monitoreo de seguridad de datos independiente, designada por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.
Moderna, con sede en Cambridge, Massachusetts, desarrolló su vacuna en colaboración con investigadores del Centro de Investigación de Vacunas, que forma parte del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de aquél país.
Anthony Fauci, director del instituto, dijo en una entrevista con The New York Times: “Había dicho que estaría satisfecho con una vacuna 75 por ciento efectiva. Aspiracionalmente, le gustaría ver el 90, 95 por ciento, pero no lo esperaba. Pensé que estaríamos bien, pero el 94.5 por ciento es muy impresionante”.
El doctor Stephen Hoge, presidente de Moderna, celebró el “muy importante hito”, aunque dijo que lo más tranquilizador era que hubiera resultados similares de dos firmas distintas.
“Eso debería darnos a todos esperanza de que de verdad una vacuna podrá detener esta pandemia y esperemos que devolvernos a nuestras vidas”, dijo Hoge a The Associated Press.
“No será sólo Moderna la que resuelva este problema”, señaló, indicando que cubrir la demanda global “requerirá muchas vacunas”.
Los casos del virus en Estados Unidos alcanzaron los 11 millones este fin de semana, un millón de ellos registrados apenas en la última semana. La pandemia ha matado a más de 1.3 millones de personas en todo el mundo, más de 245 mil de ellas en Estados Unidos.
Moderna, dijo, espera tener unos 20 millones de dosis destinadas a Estados Unidos, para cuando termine 2020. Pfizer y su socia alemana BioNTech esperan tener unos 50 millones de dosis en todo el mundo para final de año.
LA TEMPERATURA DE LA VACUNA
Por otra parte, la compañía ha anunciado que su vacuna permanece estable a una temperatura de 2° a 8°C, la temperatura de un hogar estándar o de un refrigerador, durante 30 días. Además, aseguran que permanece estable a -20ºC hasta seis meses para su almacenaje y a temperatura ambiente hasta 12 horas. De la misma forma, han señalado que la vacuna no requerirá dilución en el sitio o manipulación especial, lo que “facilita la vacunación en una serie de entornos, incluyendo farmacias y consultorios médicos”. Esto supone un avance respecto a la vacuna de Pfizer, que necesita de un temperatura de -70 grados para transportar y almacenar.
“Creemos que nuestras inversiones en la tecnología de entrega de ARNm y el desarrollo del proceso de fabricación nos permitirán almacenar y enviar nuestro candidato a la vacuna COVID-19 a temperaturas que se encuentran comúnmente en congeladores y refrigeradores farmacéuticos fácilmente disponibles. La capacidad de almacenar nuestra vacuna hasta seis meses a -20° C, incluyendo hasta 30 días en condiciones normales después de la descongelación es un desarrollo importante y permitiría una distribución más sencilla y más flexibilidad para facilitar la vacunación a mayor escala en Estados Unidos y otras partes del mundo”, ha comentado el jefe de Operaciones Técnicas y Oficial de Calidad de Moderna, el español Juan Andrés.
La compañía sostiene que seguirá reuniendo información adicional sobre la estabilidad en los próximos meses para evaluar si el ARNm-1273 puede enviarse y almacenarse en condiciones “cada vez más flexibles”, que se describirán en detalle después de la aprobación reglamentaria.
En este estudio, conocido como “COVE”, participaron más de 30 mil personas en Estados Unidos y se está llevando a cabo en colaboración con el Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas (NIAID), que forma parte de los NIH, y la Autoridad de Investigación y Desarrollo Biomédico Avanzado (BARDA), que forma parte de la Oficina del Secretario Adjunto de Preparación y Respuesta del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos.
-Con información de Europa Press