Hace algunos años tuve un accidente y estuve internada en el hospital. A la hora de pedir la comida sabía que podría ser complejo armar un menú que se adaptara a mis necesidades. Por lo regular analizo el menú, veo que ingredientes se pueden retirar (carnes, huevo, quesos, etc..) y adapto los platillos ya establecidos en lugar de pedir uno nuevo. Nos dimos cuenta que a muchos alimentos simples les añadían lácteos que fácilmente podrían ser omitidos, pero no existía una opción vegetariana o vegana por default. Me parece impresionante que sabiendo el impacto que nuestros hábitos de consumo pueden tener en nuestra salud, los hospitales siguen sin actualizarse.
Cada vez hay más estudios que demuestran que adoptar una alimentación basada en plantas puede prevenir e incluso revertir enfermedades. Este tipo de alimentación no es una fórmula mágica, ya que hay otros factores a considerar que pueden impactar a cada persona tales como los factores ambientales, genéticos y nuestra actividad física.
Se ha documentado que las personas veganas tienen en promedio:
➤ ¾ –½ tasas más bajas de padecer presión arterial alta
➤ ⅔ menos riesgo de padecer diabetes tipo 2
➤ 15 – 20 por ciento menos riesgo de padecer distintos tipos de cáncer
➤ Niveles de colesterol significativamente más bajos
Los 11 hospitales de la ciudad de Nueva York ahora servirán platillos a base de plantas gracias a la fundación The Better Food Foundation. Las y los pacientes seguirán teniendo opciones que incluyan carne si así lo desean, pero los resultados han sido esperanzadores ya que alrededor del 60 por ciento han elegido los platos basados en plantas, siendo solo el 1 por ciento representado por personas que ya se identificaban como veganas o vegetarianas. Con esta iniciativa se busca mejorar la salud, reducir las emisiones de carbono y los costos de los alimentos.
“Al adoptar opciones basadas en plantas y eliminar los productos alimenticios que causan cáncer, los hospitales no solo brindan un servicio vital a sus pacientes, el personal y los visitantes. También cumplen una función educativa clave, modelando hábitos saludables. La hospitalización puede ser un momento de enseñanza”, Colegio Americano de Cardiología, 2017.
Además de que la producción de carne, lácteos y huevos condena a los animales a una vida llena de sufrimiento y dolor, es también responsable de la muerte de miles de millones de animales cada año y la principal causa de deterioro ambiental. Esta iniciativa podría amortiguar y reducir las enfermedades humanas y servir de apoyo extra para quienes están recuperándose en los hospitales. La carne es una de las principales causas de enfermedades, productos derivados de la carne de cerdos tales como el jamón, tocino y el salami están clasificados como cancerígenos dentro del grupo uno por la OMS, mientras que la carne de vacas se asocia con mayor riesgo de enfermedades de corazón y los lácteos con alergias y mayor riesgo de enfermedades como el cáncer de próstata