Fue después de las 18:00 horas que algunas mujeres realizaron pintas en las inmediaciones de la Glorieta y rompieron vidrios de la estación del Metrobús Insurgentes. Posteriormente incendiaron la estación de Policía Florencia, ubicada a unos metros. Algunas asistentes escribieron consignas de denuncia, rompieron mobiliario y prendieron fuego al interior de la estación.

“Nuestras protestas surgen porque es el mismo Gobierno, a través de las fuerzas armadas, quien comete los delitos de abuso sexual, protege a los victimarios, silencia y desprestigia a las víctimas. Nuestro temor y nuestro hartazgo no es nuevo, pues todas las ciudadanas vivimos en constante inseguridad y la Policía Federal y las fuerzas militares nos infundan el mismo terror que la delincuencia organizada”, apuntaron las manifestantes a través de un comunicado.

Ciudad de México, 16 de agosto (SinEmbargo).- Cientos de mujeres marcharon este viernes desde la Glorieta de Insurgentes para para protestar en contra de los abusos sexuales cometidos por policías y para repudiar la violencia en su contra.

Las manifestantes avanzaron por las calles de la capital con pancartas, brillantina rosa y morada, pañuelos verdes y mantas. El contingente partió desde la Glorieta de Insurgentes hacía Paseo de la Reforma. La marcha circuló por la calle Génova y las manifestantes se dirigieron a la Secretaría de Seguridad Ciudadana.

Fue después de las 18:00 horas que la protesta cambió de tono: algunas mujeres realizaron pintas y destrozos en las inmediaciones de la Glorieta de los Insurgentes que dejó daños la estación del Metrobús Insurgentes. Posteriormente incendiaron la estación de Policía Florencia, ubicada a unos metros.

Algunas asistentes escribieron consignas de denuncia y luego rompieron los cristales y mobiliario. En algunos momentos incluso se prendió fuego al interior de la estación que no pasó a mayores.
Al inicio de la manifestación, mujeres reclamaron, en su pancartas, el actuar de las autoridades capitalinas:

“Exigir justicia no es provocación”, se lee en una de ellas que hace referencia a las palabras de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, que calificó la movilización del pasado 12 de agosto que dejó algunos destrozos en la Procuraduría capitalina como una provocación contra su Gobierno.

Y muchas otras llevaban la consigna: “No me cuidan me violan”. La expresión fue apropiada esta semana por las mujeres de la Ciudad de México donde se han documentado al menos tres casos de mujeres atacadas sexualmente por policías.

Durante la manifestación, también se reportaron algunas agresiones a reporteros. En un video que circula en redes sociales se observa cómo un hombre se acerca al reportero Juan Manuel Jiménez de ADN 40 y lo golpea.

La Policía de Claudia Sheinbaum envío a mujeres policías para resguardar un convoy de agentes varones que ingresaron a la estación Florencia. “¡No las usen!” Y “¡A ti también te violan!” Gritaron las activistas.

La manifestación en contra de la violencia hacia las mujeres y los abusos sexuales por parte de policías comenzó minutos después de las 18:00 horas y hasta la zona arribaron cientos de mujeres para sumarse a la convocatoria.

A través de un comunicado, las manifestantes exigieron que el Gobierno federal cumpla con los siguientes puntos: 

1. Decretar la Alerta de Violencia de Género para la Ciudad de México y toda la República Mexicana de manera inmediata.

2. Sanción a los actos de filtración de información, que se refuerce el debido proceso y que se garantice la protección de las víctimas y de sus familias.

3. Soluciones inmediatas y efectivas por parte de las autoridades para enjuiciar a los culpables de los delitos antes mencionados. Asimismo, solicitamos que los culpables sean destituidos de sus cargos, de manera que no puedan volver a formar parte de ninguna fuerza policial, militar o civil.

4. Acciones de reparación para las víctimas y de no repetición por parte del Estado.

5. Retractación y eliminación inmediata de todos los procesos de criminalización de la protesta social contra nuestras compañeras y garantizarse el pleno ejercicio del derecho a defender derechos para las mujeres de nuestra ciudad.

6. Garantías de seguridad y protocolos efectivos para que todas las mujeres en la Ciudad de México y la República Mexicana puedan transitar de manera libre y segura.

7.Un protocolo estricto en el reclutamiento de cuerpos policiales, es decir, tanto exámenes psicométricos como capacitación constante y sensibilización en temas de género y atención psicológica para descartar futuros abusos por parte de las autoridades.

8. Investigación de abusos sexuales previos por parte del cuerpo policiaco, así como destitución y sanción de quienes resulten culpables.

9. Que fuerzas militares no se encuentren a cargo de la seguridad pública, ya que sus tareas no están enfocadas a al protección civil y vulnera la seguridad social y los derechos humanos de las mujeres.

10. Solicitamos acceso ciudadano a las cámaras de 360o colocadas en las patrullas, para transparentar y someter a revisión el trabajo del cuerpo judicial.

11. Si bien el Gobierno de la Ciudad de México ha iniciado mesas de trabajo para la “cero impunidad y justicia absoluta para las mujeres y niñas víctimas de violencia” no vemos acciones claras, ni que integren nuestras demandas. Además del acceso a la justicia, exigimos que se ejecuten programas para prevenir la violencia de género en todas las instituciones gubernamentales y educativas de la Ciudad de México, en coordinación y a la par de la Alerta de Violencia de Género para la Ciudad de México, con la misma urgencia.

12. Acciones y políticas públicas de gobierno que sean firmes, coherentes, sostenibles y basadas en los Derechos Humanos. Exigimos rotundamente que haya participación social y política de las mujeres en el desarrollo e implementación de las estrategias que permitan que vivamos una vida libre de violencia, como lo establecen nuestras leyes y los estándares internacionales.

13. Exigimos una disculpa histórica por parte del Gobierno de la Ciudad de México por los agravios cometidos en contra de los derechos humanos de las mujeres desde su fundación.