El nuevo Embajador estadounidense en México tomará la plaza que está vacante desde la renuncia en mayo de 2018 de Roberta Jacobson, Embajadora en este país designada por el presidente Barack Obama (2009-2017).
“Mi mensaje es muy sencillo: Llego con la mano extendida”, aseveró Christopher Landau.
México, 16 de agosto (EFE).- El nuevo Embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, llegó este viernes a México, donde expresó su interés por fortalecer las relaciones entre las dos naciones pese a reconocer “retos”.
“Estados Unidos gana cuando hay un México próspero y estable, y México gana cuando hay un Estados Unidos próspero y estable”, apuntó el nuevo Embajador desde el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).
Landau, que fue avalado como Embajador para México por el Senado de Estados Unidos el pasado 1 de agosto, explicó en su breve mensaje a medios que “obviamente hay retos” en la relación bilateral.
“Pero son los retos que se esperan de cualquier relación tan cercana. Realmente no podemos perder cuenta del enorme sincretismo que existe entre nuestra naciones”, apuntó.
El abogado constitucionalista destacó que esta fuerte relación es “a todo nivel, económico, cultural y a nivel familiar”.
“Y en mi país no se puede pasar ni siquiera dos cuadras (calles) en la ciudad sin encontrar un restaurante mexicano. (…) Y en México es igual con los negocios estadounidenses”, aseveró.
El diplomático dijo que llegó a México para “conocer cada rincón del país”, de norte a sur, y conocer a los mexicanos de todos los grupos sociales y tendencias políticas.
Su fin, dijo, es “conocer más a fondo la cultura e historia de este magnifico país”.
Finalmente, se dirigió a la prensa congregada en el aeropuerto y bromeó: “Lo único que les pido ahora es que escuchen bien mi acento, porque les prometo que va a cambiar”.
“Mi gran ambición es que el día que yo me vaya (…) digan ‘Este sí que aprendió a hablar a los nuestros'”, añadió.
Indicó que si bien no ofrecía rueda de prensa, a futuro espera entablar una estrecha relación con los medios de comunicación e incluso abrió la puerta a celebrar una conferencia una vez haya presentado sus cartas credenciales al Gobierno de México.
Con 55 años, Landau es socio de la firma de abogados Quinn Emanuel Urquhart & Sullivan LLP, con sede en Los Ángeles y con unas 25 oficinas por todo el mundo.
En 2017 fue nombrado por el presidente del Tribunal Supremo miembro de la Conferencia Judicial de Asesores sobre Reglas de Apelación para un plazo de tres años, señaló en marzo la Casa Blanca al anunciar esta nominación.
Asimismo, Landau se desempeñó durante su carrera como asistente legal de los jueces del Tribunal Supremo Antonin Scalia, ya fallecido, y Clarence Thomas, ambos conservadores.
Landau es hijo de George Landau, quien fue Embajador en Chile, Paraguay y Venezuela.
El nuevo Embajador estadounidense en México tomará la plaza que está vacante desde la renuncia en mayo de 2018 de Roberta Jacobson, Embajadora en este país designada por el presidente Barack Obama (2009-2017).
El nuevo Embajador llega en un momento ríspido entre México y Estados Unidos tras el arribo a la Casa Blanca de Donald Trump en 2017 y por la crisis migratoria que ha marcado el último año.