La cifra de casos activos de SARS-COV-2, frente a la nueva normalidad que ya se impulsa con millones de mexicanos en la calle, es un dato relevante: en la primera quincena de junio la cantidad de contagios no cedió y hay incluso brincos drásticos en la estadística.
Ciudad de México, 16 de junio (SinEmbargo).- La cifra de casos activos de COVID-19 continúa a la alza, con un total de 24 mil 424 casos activos al corte del 14 de junio, es decir que en el último mes el número de las personas de más reciente contagio registró un crecimiento de 122 por ciento.
Sólo en la primera quincena de junio, la cantidad de casos se ha mantenido constante, ya que aunque la cifra dada a conocer por la Secretaría de Salud (SSA) muestra cuatro días de disminución (el 1, 3, 8 y 13 de junio), en 10 días fue en aumento.
Esta es la semana en que la mitad de los estados del país decidieron avanzar en su semáforo de reactivación económica y millones de mexicanos han comenzado a salir a las calles para retomar labores. La apertura llega en el momento en que se tienen contabilizados 146 mil 837 casos acumulados de COVID-19, 17 mil 141 defunciones y una tasa de letalidad de 11.7 por ciento.
De acuerdo con el consolidado de cifras que realiza la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), los casos activos, que son los casos confirmados de COVID-19 en pacientes que aún no se recuperan o no fallecieron, se concentran en la Ciudad de México, que al 14 de junio tiene 5 mil 004 casos activos; le sigue el Estado de México, con 3 mil 070; Jalisco, con mil 379; Puebla, con mil 264, y Tabasco con mil 203.
Al final de esa lista están Zacatecas con 177 casos activos, Chihuahua con 102 y Colima con 94.
De acuerdo con diversas publicaciones científicas, observar la gráfica de los casos activos muestra la manera en cómo puede seguir incrementando el contagio y así, no aplanar la curva. Aunado a esto, en total hay 56 mil 926 casos sospechosos por coronavirus.
El que la cifra de casos activos aún no muestre una tendencia a la baja, incrementa las posibilidades de que en la reapertura de espacios públicos y de centros de trabajo se puedan registrar contagios y aumenta el riesgo de la saturación hospitalaria.
Un artículo publicado en el diario The Washington Post expuso sobre este punto que los casos activos deben tomarse en cuenta para decidir qué actividades son las que se abren, siempre con el objetivo de prevenir más contagios.
Sin embargo, en el caso de México, la política de realizar sólo las pruebas estrictamente necesarias no ayuda a dar la cifra correcta de los casos activos, ya que desde el inicio de la pandemia una de las recomendaciones de las autoridades de salud es que si alguien presenta síntomas de coronavirus, pero “resiste”, debe quedarse en casa. En algunos de esos casos ni siquiera se han aplicado las pruebas de laboratorio.
México es uno de los países que menos pruebas de COVID-19 han aplicado en esta pandemia. Datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ponen al país en el último lugar entre los 36 países miembros.
México aplica 0.4 pruebas por cada mil habitantes y la media de los países OCDE está en 22 por cada mil.
A nivel municipal, de acuerdo con los datos de la UNAM, el mayor número de casos activos están en Puebla, con 891; en la alcaldía Gustavo A. Madero, con 736; en Iztapalapa hay 696; en León, 527 y en Centro (Tabasco), 497.
“A la epidemia todavía le faltan varias semanas, como hemos comentado, tendrá las variaciones en las distintas regiones del país y en la medida en que vayamos incorporando nuevas prácticas […] vamos a tener una adaptación como sociedad más apropiada al curso de la epidemia. Pero no podemos quedarnos congelados como sociedad perpetuamente, ni siquiera por tres años, eso sería incompatible con la pervivencia de la sociedad. Lo que sí podemos es incorporar cambios de conducta que nos permitan, en la medida en que regresemos a las distintas actividades, las acabo de comentar respecto al semáforo, que tengamos estas actividades en la forma más segura posible”, comentó Hugo López-Gatell Ramírez, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, en la conferencia de prensa del 14 de junio.
México comenzó la semana del 15 al 21 de junio con la mitad de los estados (16) en color naranja y el resto en color rojo, por lo que algunas entidades podrán reactivar algunas actividades.
Aguascalientes, Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Coahuila, Durango, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Nuevo León, Quintana Roo, San Luis Potosí, Tabasco, Tamaulipas, Yucatán y Zacatecas son las entidades que permanecerán en color naranja desde el lunes 15 de junio. En rojo se quedan Baja California, Chiapas, Ciudad de México, Colima, Estado de México, Guerrero, Hidalgo, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala, Veracruz.
Sobre esto, la revista The Economist publicó que México, como la India, parece haber asumido que no pudo con el coronavirus y ha decidido abrirse de todas maneras. La política del Gobierno mexicano parece ser: “si no puedes controlar el virus, elimina la cuarentena”, agrega.
La revista añade que hoy México tiene casi cuatro veces más casos activos que cuando las reglas de cuarentena más estrictas entraron en vigencia, el 1 de mayo. “Pero la Ciudad de México, por ejemplo, que aún no logra despejar el nuevo semáforo del Gobierno, se está acelerando de todos modos”.