Aún la reparación más sencilla puede salir mal. Es por ello que te presentamos 5 de los errores más comunes que comete un principiante al reparar o darle mantenimiento a su bicicleta.
Este listado es efectivamente sobre los errores, pues el recuerdo de lo que nos salió mal es el que más se queda grabado.
1. No te cuelgues solo
EL ERROR: Cuando los cambios de la bicicleta de un estudiante se pusieron erráticos pensó que ajustar el chicote del cambio de velocidades y apretar los tornillos sería suficiente. Pero durante un paseo, la cadena se salió del plato y golpeó los rayos, rompiendo seis de ellos. Después el desviador delantero se rompió, giró y se deshizo al golpear contra el marco.
EL ARREGLO: Aparte de extender el chicote o cable de cambios, lo que ocurre naturalmente (especialmente cuando el chicote es nuevo), es un anclaje doblado del desviador trasero la causa de la mayoría de los problemas de cambio de velocidad. Para diagnosticarlo, cambia al piñón o plato central del casete, bájate de tu bici y agáchate detrás de ella, sujetándola derecho por la llanta trasera. Observa la jaula del desviador trasero (la parte que alberga a los dos poleas) y compárala con los platos. Deberán estar alineados verticalmente; jaula y platos. Si la jaula se ve doblada hacia adentro o incluso ligeramente inclinada hacia el rin, el anclaje del desviador necesita ser enderezado o ser reemplazado. Para prevenir la catástrofe que mencionamos al zafarse la cadena, mantén la velocidad en el piñón o plato más grande (la velocidad más fácil) del casette hasta que puedas llevar tu bici a un taller.
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2. Quiere a tu cadena
EL ERROR: Muchos estudiantes llegan a la primera clase con cadenas tan secas que chirrían como pajarillos. También estaba el chico cuyo rin trasero, cuadro e incluso las zapatas de los frenos estaban salpicadas de lubricante. Él había limpiado y lubricado perfectamente conforme al calendario pero nunca limpió su cadena después de hacerlo, lo que causó que el lubricante salpicara toda la bicicleta.
EL ARREGLO: Una cadena pobremente lubricada tendrá un menor tiempo de vida y reducirá el desempeño de la bicicleta, de modo que debes aceitarla cada 150 km o cada vez que se moje. Por cada minuto que pasas engrasándola, pasa dos sujetando un trapo ligeramente contra ambos lados de los eslabones mientras haces girar la cadena en reversa. El exceso de aceite atrae el polvo, y con el tiempo ese polvo penetra las partes móviles interiores, ocasionándote un problema de roce tan arenoso que causará casi tanto daño como si no hubieras lubricado en lo absoluto. Con el cuidado apropiado tu cadena deberá de durar, por lo menos, de 2,500 a 3,000 km.
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3. Conoce la terminología
EL ERROR: La complejidad de los cables y fundas puede confundir a mis estudiantes. Dentro de la funda se ubica una pequeña hoja plástica que ayuda a que el cable se mueva suavemente – pero con el tiempo esa hoja se cubre con partículas de polvo, las que ocasionan fricción e interfieren con el movimiento del cable. ¿Entendiste eso? Esta es la cosa: No puedes reemplazar la funda sin reemplazar los cables, porque es básicamente imposible pasar un cable usado por una nueva funda. De modo que en lugar de tratar de explicar todo eso, los talleres usualmente te dicen que necesitas nuevos cables. Lo cual es, más o menos, cierto, porque necesitas nuevas fundas (*suspiro).
EL ARREGLO: Reemplaza al mismo tiempo tus cables y las fundas una vez al año, especialmente si haces viajes por terracería. Y cada vez que un cable se deshilache, cámbialo tan rápido como puedas.
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4. Retíralo todo
EL ERROR: Un estudiante pensó que había dominado el cambió de llantas –podía hacerlo incluso dejando un balero en el rin. Después poncho cinco llantas seguidas durante un recorrido. Finalmente, antes de poner una sexta cámara, quito la llanta del rin, inspeccionó cuidadosamente el rin y la llanta, y encontró un pequeño alambre de metal saliendo de ella.
EL ARREGLO: Retira la llanta completamente y pasa tu mano a lo largo y por dentro de la banda de rodamiento, en ambos sentidos. De otra manera, podría resultar como cuando tu papá iba manejando en las vacaciones y decía “! Oigan, conozco un gran atajo !”
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5. Una bici limpia es una bici rápida
EL ERROR: Un estudiante que había estado lavando su bici con una manguera de presión aprendió una dura lección cuando desarmamos los baleros. Se habían oxidado casi al punto de dejar de girar por completo. “Ah”, dijo mientras los retirábamos “Por eso se había vuelto tan difícil pedalear”.
EL ARREGLO: Aplicar agua a presión mete la tierra a las partes ocultas y sensibles de la bicicleta, o quita la grasa y lubricante que evitan que se ensucie y se oxide. Usa una manguera con el agua corriendo muy despacio. O una cubeta con agua ligeramente jabonosa, una esponja y varias brochas – incluso las esponjas usadas de los platos o los cepillos de dientes.
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