Casi mil 500 migrantes mexicanos han fallecido en la frontera con Estados Unidos en los últimos tres años, de los cuales alrededor de una quinta parte eran menores de edad.
Madrid, 16 de abril (EUROPA PRESS).– De los mil 478 mexicanos muertos en la frontera con Estados Unidos en los tres primeros años del Gobierno del Presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), 308 tenían menos de 18 años, según el registro de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
En 2019, murieron 337 mexicanos intentando cruzar la frontera. En 2020 sumaron 422 y en 2021 esta cifra se disparó hasta los 719, la más alta en los registros oficiales, que datan de 2004. En el caso de los niños muertos, los registros son similares y en aumento: 55, 109 y 144, respectivamente.
Las cifras oficiales muestran que 252 fallecidos tenían de 18 a 25 años, 242 de 26 a 35 años, 182 de 36 a 45 años, 82 de 46 a 55 años, 30 de 56 a 65 años, nueve de 66 a 75 y uno de más de 76 años. Se desconoce la edad de 372 víctimas.
Las principales causas de muerte de los mexicanos en general que buscan cruzar a Estados Unidos son deshidratación, ahogamiento y accidentes, pero también hay otros motivos como hipotermia, complicaciones de salud y hasta se registró un homicidio.
Expertos y activistas atribuyen este fenómeno al aumento en la pobreza en el país derivado de la pandemia de COVID-19, pero también a la violencia creciente generada por el crimen organizado en algunos estados del país y al control que tienen estas mismas bandas de las rutas migratorias.
“El crimen organizado y su control territorial, las políticas migratorias que han establecido los Estados Unidos y México y esta narrativas sustentadas en los intereses norteamericanos y no de la población y los derechos humanos, se traducen en muertes inevitablemente”, ha declarado el secretario ejecutivo de Tejiendo Redes Infancia en América Latina y el Caribe, Juan Martín Pérez, en declaraciones al diario Milenio.
“En el caso de niños y personas jóvenes, sabemos que los motivos por los que huyen son por violencia del crimen organizado, por condiciones de pobreza severa y también otro elemento muy fuerte para niños, niñas y adolescentes: la reunificación familiar, es decir, su padre o madre están en Estados Unidos y están buscando reunificarse”, ha apuntado Martín.