El impopular proyecto de ley elevaría la edad de jubilación de 62 a 64 años, lo que provocó que este el pasado miércoles protestaran en las calles de París más de medio millón de personas.
Por Sylvie Corbet
PARÍS, 16 de marzo (AP).— El Gobierno francés invocó el jueves un poder constitucional especial para aprobar una controversial reforma de pensiones sin necesidad de aprobación parlamentaria, una medida riesgosa para el Presidente Emmanuel Macron.
El impopular proyecto de ley elevaría la edad de jubilación de 62 a 64 años. Se prevé que la decisión desencadene una moción de censura al Gobierno de Macron.
La decisión se tomó sólo unos minutos antes de la fecha prevista para la votación, porque el Gobierno no tenía garantías de que el proyecto obtuviera una mayoría en la Asamblea Nacional, la Cámara baja.
La reforma al sistema jubilatorio es la legislación insignia del segundo mandato de Macron, pero ha provocado enormes huelgas y protestas en todo el país desde enero.
Mientras los legisladores se reunían en la Asamblea Nacional el jueves para votar por el proyecto de ley, los parlamentarios de izquierda irrumpieron cantando la Marsellesa, el himno nacional, impidiendo que hablara la Primera Ministra Elisabeth Borne y provocando que el jefe de la Cámara suspendiera la sesión.
Afuera del Parlamento, el ambiente era tenso mientras guardias fuertemente armados y policías antidisturbios rodeaban los pintorescos barrios alrededor de la Asamblea Nacional.
“Hoy existe incertidumbre” sobre si una mayoría hubiera votado a favor del proyecto de ley “por unos pocos votos”, explicó Borne. “No podemos arriesgarnos a ver colapsar 175 horas de debate parlamentario… No podemos apostar por el futuro de pensiones, esa reforma es necesaria”, dijo la Primera Ministra.
Agregó que “en unos días, no tengo dudas… habrá una o varias mociones de censura. Efectivamente habrá una votación propia y por lo tanto la democracia parlamentaria tendrá la última palabra”.
Los legisladores de izquierda y extrema derecha confirmaron rápidamente sus próximos movimientos.
La legisladora de extrema derecha Marine Le Pen dijo que su partido Agrupación Nacional presentaría una moción de censura, y el legislador comunista Fabien Roussel dijo que la izquierda está “lista”.
“La movilización continuará”, dijo Roussel. “Esta reforma debe ser suspendida”.
Hace una semana, el Senado aprobó el proyecto de ley en una votación de 193-114.
La alianza de Macron perdió su mayoría parlamentaria el año pasado, lo que obligó al Gobierno a contar con legisladores conservadores para aprobar el proyecto de ley. Los legisladores de izquierda y de extrema derecha se oponen fuertemente y los conservadores están divididos, lo que hizo que el resultado fuera impredecible.
El líder francés quiere aumentar la edad de jubilación para que los trabajadores pongan más dinero en el sistema, que según el Gobierno está en camino de tener un déficit.
Casi 500 mil personas protestaron contra el proyecto en todo el país el miércoles.
Los desafíos económicos han provocado disturbios generalizados en toda Europa occidental. El miércoles, en Gran Bretaña, los maestros, los médicos jóvenes y el personal del transporte público hicieron huelga en demanda de salarios más altos. En España, el Gobierno de izquierda se unió a los sindicatos para anunciar un acuerdo “histórico” para salvar el sistema de pensiones aumentando los costos de la seguridad social para los salarios más altos.