El Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que ha confirmado que hay un español entre los heridos, ha conversado por teléfono con el presidente francés, François Hollande, para mostrarle su total apoyo tras los atentados terroristas y garantizarle que van a luchar "juntos contra el terrorismo".

También está Rajoy en contacto permanente con el Rey, que sigue durante toda la mañana desde su despacho del Palacio de la Zarzuela los últimos datos y actuaciones en relación a los atentados, tras telefonear anoche a Hollande.

Rajoy ha hablado además con el primer ministro galo, Manuel Valls, y con los dirigentes de los principales partidos nacionales, y ha comparecido ante los medios de comunicación para dejar claro que España colaborará en todo lo que haga falta con las autoridades francesas para detener a los autores de los ataques y a sus cómplices: "Hoy todos somos Francia", ha recalcado.

El jefe del Ejecutivo español ha asegurado que, si es necesario, se incrementarán en España las medidas de seguridad, aunque ha precisado que las fuerzas de seguridad españolas mantienen ya un elevado nivel de alerta -el 4 de una escala de 5-.

Después de su comparecencia, Rajoy ha asistido a una reunión del Consejo de Seguridad Nacional, a la que también han acudido la vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, y los ministros de Justicia, Defensa, Hacienda, Interior, Industria y Economía, entre otros.

Por su parte, el responsable de Interior, Jorge Fernández Díaz, ha convocado el pacto antiyihadista para analizar con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE, el principal de la oposición) los acontecimientos.

En su declaración institucional ante los medios de comunicación, Rajoy ha considerado que no hay causa que justifique las "atrocidades" de ayer en París "ni hay creencia que las pueda amparar". "No estamos ante una guerra de religiones sino ante una lucha entre civilización y barbarie".

"Nos pueden hacer daño, pero no nos van a vencer", ha proclamado, y ha apostillado: "Todos los seres humanos que defendemos la vida, la libertad y las sociedades abiertas nos sentimos golpeados y amenazados por quienes quieren acabar ese modo de vida que hemos construido a lo largo de siglos de progreso y civilizaciones".

En una jornada en la que se han convocado un minuto de silencio ante las puertas de los ayuntamientos españoles en señal de repulsa por los atentados y de solidaridad con las víctimas, el PSOE ha suspendido la conferencia política en la que durante hoy y mañana tenía previsto aprobar su programa electoral para el 20D.

Su secretario general, Pedro Sánchez, que ha vuelto a hablar por teléfono con Rajoy tras hacerlo también anoche, ha aseverado que los terroristas podrán "causar dolor", pero no lograrán "doblegar a un pueblo libre y unido" como el de Francia.

Durante un discurso pronunciado antes de suspenderse la conferencia política, Sánchez ha reclamado la "unidad de todos los países y todos los demócratas" contra el terrorismo yihadista y se ha mostrado convencido de que esa misma unidad que permitió derrotar a ETA también llevará a acabar con el terrorismo yihadista.

Sánchez se ha reunido hoy con los cuatro secretarios generales que le precedieron: Alfredo Pérez Rubalcaba, José Luis Rodríguez Zapatero, Joaquín Almunia y Felipe González, para analizar la situación.

Desde Barcelona, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha anunciado que va a pedir al PP y al PSOE que su partido se sume al pacto contra el terrorismo yihadista, y ha expresado su apoyo al Gobierno en todas las decisiones que se tomen tras los atentados de París.

También ha propuesto que los partidos convoquen una movilización cívica con la que "se visualice la unidad de todos los españoles" contra la barbarie y pueda mostrarse en la calle.

En cambio, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha subrayado que tras los atentados de París no toca hablar de venganza, sino de valores democráticos, y ha dicho que su partido no se identifica con los valores del pacto antiyihadista.

Iglesias, en una breve rueda de prensa en la sede de su partido, se ha desmarcado de ese pacto con el argumento de que en los últimos 15 años ha habido intervenciones militares patrocinadas por gobiernos como el español que no han servido para reforzar la seguridad de los ciudadanos.

Los gobiernos autonómicos, como el catalán o el andaluza, han trasladado también sus condolencias por estos atentados. "La sangre que ha corrido en París es la nuestra", ha dicho el presidente de la Generalitat, Artur Mas.

Mientras tanto, decenas de ciudadanos anónimos han comenzado a dejar ante la puerta de la Embajada de Francia en España, en el centro de Madrid, flores y velas en memoria de las víctimas de los atentados de París.

"Je suis la France, je suis triste" ("Yo soy Francia, yo estoy triste"), se puede leer en uno de los mensajes colocados en la verja de la embajada en apoyo a las víctimas de los atentados.