El chofer del autobús dijo que siente pena de que los jóvenes afecten a personas externas a su movimiento y reprobó la actitud de los policías estatales.
Ciudad de México, 12 de noviembre (SinEmbargo).– Sergio Navarrete Galván, chofer del autobús Estrella de Oro que fue tomado en la Autopista del Sol el día de ayer por estudiantes de la Escuela Normal Ruaral “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero, relató que durante los disturbios fue agredido por los jóvenes y por policías estatales.
En un video que circula a través de redes sociales el chofer de la unidad señaló que el camión había salido de la ciudad de Taxco y tenía como destino el puerto de Acapulco, cuando la unidad fue interceptada por los normalistas.
“Estos chavos se me subieron por donde está el hospital, se me subieron y bajaron a la gente y se quedaron y la verdad me secuestraron, me traían en forma de secuestrado”, declaró el chofer.
Navarrete Galván dijo que tras tomar el camión los jóvenes lo tenían amenazado y mencionó que trataban de tomar el control del volante.
"Me venían amenazando, ellos me movían el volante, ‘hazte para allá, hazte para acá’, ellos manejaba yo sabía que iba a haber problema porque los policías estaban atrás de mi y nos dieron alcance, yo traté de orillarme para dejar que ellos pasaran porque yo no tengo nada que ver en este asunto pero nos alcanzaron y muchos [normalistas] corrieron, buscaron la forma de escaparse”.
El conductor relató que luego de que los uniformados les dieron alcance él decidió quedarse en la unidad para evitar cualquier tipo de problema, sin embargo, fue agredido por un policía que subió a revisar el camión.
“Yo me quedé al último, yo levanté las manos, entonces se sube un policía y me agrede, me golpea y le digo no es mi culpa, y me dice ‘cómo no hijo de tu puta madre’”.
Por último el afectado dijo que siente pena de que los jóvenes afecten a personas externas a su movimiento y reprobó la actitud de los policías estatales.
“Considero que está mal lo que hacen los jóvenes, pero yo qué culpa tengo, y también tiene culpa el policía porque estoy uniformado y estoy mostrándole que nada tengo que ver en este rollo y me da pena por nuestros policías y me da pena y vergüenza por los jóvenes que supuestamente son el futuro”.
De acuerdo con un comunicado del gobierno de Guerrero, los jóvenes de la Escuela Normal de Ayotzinapa se apoderaron de una pipa de doble remolque que transportaba 30 mil litros de combustible y atravesaron la caja de un camión sobre la Autopista del Sol para evitar ser detenidos, pero elementos de la Policía Estatal impidieron que se consumara el robo de la unidad.
Los estudiantes arrojaron piedras y una granada desde los autobuses, e inclusive con dos vehículos intentaron prensar las patrullas, pero finalmente los elementos policiales lograron detener los últimos dos autobuses que protegían la huida de los estudiantes.
Los jóvenes tomaron 10 autobuses que circulaban por la autopista y trataron de recuperar el camión, lo que dio origen a un enfrentamiento en el que las fuerzas estatales usaron toletes y gases lacrimógenos y los jóvenes arrojaron piedras y otros objetos contra los agentes.
Tras el enfrentamiento al menos 13 estudiante fueron detenidos y entregados a la Comisión Estatal de la Defensa de los Derechos Humanos (Codehum) que confirmó que estaban en buen estado.