El fallecido fue identificado como Jomar Aguayo Collazo, de 23 años, quien murió abatido a tiros durante una balacera en un negocio local.
Ciudad de México, 20 de octubre (SinEmbargo/The Huffington Post).– Nadie puede discutir o dudar de la creatividad con la que se puede preparar el último adiós a muchos seres queridos en Puerto Rico.
¿Cómo olvidar a la abuelita sentada en su mecedora con su vestido de boda, al muerto "parao", que hasta el último instante quería demostrar que nadie lo derrotaba o hasta el boxeador cuyo velorio fue dentro de un ring de boxeo?
Estos velorios han paralizado a la bella isla boricua y se han convertido en titulares a nivel mundial.
El último y más peculiar funeral fue en la localidad de Río Piedras.
El cadáver fue sentado en la mesa de dominó que frecuentaba en el bar, propiedad de su madre. El fallecido fue identificado como Jomar Aguayo Collazo, de 23 años, quien murió abatido a tiros durante una balacera en un negocio local.
"Algunas personas se sientan a simular que están jugando con él... mientras, otros juegan billar, beben, bailan o escuchan música, como lo harían en cualquier bar", dijoElsie Marín, propietaria de la funeraria, a Univision Puerto Rico.
"Quedó exageradamente brutal. Este ha sido el mejor en términos de detalles. Es una cosa exagerada de lo bien que quedó".
En Puerto Rico, hay varias funerarias que se dedican a preparar este tipo de velorios extravagantes como la Marín, especializada en ceremonias temáticas y fuera de lo común.