El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Reid Ra’ad Al Hussein, dijo hoy que las autoridades mexicanas han reaccionado con “intolerancia ante la crítica pública”. “En lugar de matar al mensajero, enfoquémonos en el mensaje”, recomendó.
Ciudad de México, 7 de octubre (SinEmbargo).- El Alto Comisionado de Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos, Reid Ra’ad Al Hussein, sostuvo hoy que hay un amplió consenso internacional sobre la gravedad de la crisis de derechos que hay en México y alertó que las autoridades del país han reaccionado con “intolerancia ante la crítica pública” y ante informes de diversas instancias internacionales.
Hoy mismo, Amnistía Internacional (AI) dijo que para que las recomendaciones emitidas por organismos internacionales tengan un impacto real en los derechos humanos, es necesario que el Gobierno mexicano reconozca la magnitud de las violaciones.
“Hay una fuerte convergencia de miradas sobre los alcances de los problemas de los derechos humanos en México entre la ONU, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y académicos del país”, dijo Ra’ad Al Hussein.
“Desde hace tiempo México ha sido muy generoso en sus invitaciones; por tanto, ha sido una sorpresa para nosotros cuando el Relator Especial sobre la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Juan Méndez, fue sujeto de virulentos ataques personales por parte de algunos actores políticos […]. Esta intolerancia ante la crítica pública también se ha manifestado en acciones sobre otros informes presentados recientemente”, puntualizó.
Sugirió: “En lugar de matar al mensajero, enfoquémonos en el mensaje” y agregó que "si hay un punto de vista diferente, sentémonos y hablemos de la esencia”.
“Todos estamos de su lado. Todos queremos ayudar a México. Ignorar lo que está sucediendo en el país no es una opción para nosotros y no debe ser una opción para los políticos que la sociedad eligió”, dijo.
Durante el evento el Alto Comisionado de Naciones Unidas dijo que son las personas quienes juzgan lo que sucede en México: “No soy yo, ni la ONU, ni las autoridades, sólo las personas víctimas del delito o sus familias son las que tienen la credibilidad”.
Entre las recomendaciones que hizo el funcionario del organismo internacional para superar la crisis de derechos humanos en México está el adoptar las recomendaciones del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la CIDH, el fortalecer las procuraduría estatales y la capacidad de la policía para llevar a cabo sus funciones de seguridad pública, en un marco de respeto de los derechos humanos y sobre el uso de la fuerza, y adoptar un programa de medidas para desmilitarizar las tareas de seguridad pública del país.
“Nosotros creemos que las recomendaciones del GIEI-CIDH deben de ser implementadas completamente”, sostuvo.
Y dijo que ante "las irregularidades con el servicio forense de México, hacen necesario crear un instituto forense de carácter autónomo”
Reid Ra’ad Al Hussein hizo un breve recuento de los casos que en los últimos meses han impactado la opinión publica como los supuestos enfrentamientos en Tlatlaya, Estado de México, y Tanhuato, Michoacán, que dejaron decenas de muertos y sospechas de ejecuciones extrajudiciales que hasta el momento no han quedado claras. Aunque el funcionario hizo énfasis en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, , caso que "resquebrajó" la confianza de la ciudadanía hacia las instituciones.
"El caso de Iguala es un microcosmos de problemas crónicos que subyacen a la implacable ola de violaciones a los derechos humanos que está teniendo lugar a lo largo de México", dijo el alto comisionado, quien destacó que entre diciembre de 2006 y agosto de 2015 más de 151 mil personas han sido asesinadas en el país.
El funcionario se dijo confiado en que el esclarecimiento de "este terrible caso" pueda ser beneficioso para otros casos de violaciones de derechos humanos en México.
Sostuvo además que ruega “porque este gobierno pueda comprometerse a resolver los enormes de derechos humanos que enfrenta”.
El Alto Comisionado de la ONU destacó los avances legislativos que el país ha implementado en la búsqueda por proteger los derechos humanos, sin embargo dijo que su visita a México fue aleccionadora, pues dijo los crímenes continuar sin resolverse.
"La combinación de miedo, ambición e impunidad crónica es potente, millones de personas están sufriendo de este coctel peligroso", alertó
Y agregó: “La desgracia se vuelve doblemente cruel cuando las autoridades realmente se preocupan o no investigan”.
Hizo un llamado para que el gobierno mexicano implemente medidas que garanticen la seguridad de los defensores de los derechos humanos y periodistas. Y se pronunció por que el gobierno tome en cuenta los procesos adecuados de consulta y participación de los pueblos en los procesos de desarrollo de los megaproyectos de empresas en sus comunidades.
PEÑA: ESO PASA EN TODO EL MUNDO
Previamente, Reid Ra’ad Al Hussein se reunió con el presidente Enrique Peña Nieto en la Residencia Oficial de Los Pinos
En el encuentro privado, el presidente aseguró que México está decidido a encarar y superar los desafíos en materia de derechos humanos y reiteró el compromiso de su gobierno con el Estado de derecho y los derechos humanos. Aunque argumentó que lo mismo "ocurre en todo el mundo".
Peña Nieto se comprometió a continuar cooperando con el sistema internacional de protección de los derechos humanos.
Le informó que presentó al Congreso de la Unión iniciativas constitucionales para fortalecer las instituciones de seguridad y justicia en el ámbito local, en las que se incluye las policías únicas estatales para evitar la infiltración del crimen organizado, además del rediseño del sistema de competencias en materia penal.
Según un comunicado, el Alto Comisionado de la ONUnidas afirmó que México “va en la dirección correcta, gracias a los cambios institucionales que se han impulsado” y reiteró el apoyo de su oficina para avanzar más rápido en favor de la justicia.
AMNISTÍA COINCIDE
Amnistía Internacional dijo que para que las recomendaciones emitidas por organismos internacionales tengan un impacto real en los derechos humanos, es necesario que el Gobierno mexicano reconozca la magnitud de las violaciones a los mismos.
"No se podrá hacer frente al problema mientras no se admita que existen diferentes patrones de violaciones a derechos humanos profundamente arraigados y no así un contexto de aislados y extraordinarios casos", comentó Perseo Quiroz, Director Ejecutivo de Amnistía Internacional México.
Al criticar la postura adoptada por la Secretaría de Gobernación frente al informe preliminar emitido el pasado 2 de octubre por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el organismo civil pidió a las autoridades mexicanas reconsiderar su posición e implementar de manera inmediata las recomendaciones hechas.
En su informe, el órgano autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA) constató "la grave crisis de derechos humanos que vive México, caracterizada por una situación extrema de inseguridad y violencia; graves violaciones, en especial desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y tortura; niveles críticos de impunidad y una atención inadecuada e insuficiente a las víctimas y familiares".
En respuesta, el Subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaria de Gobernación, Roberto Campa Cifrán, sostuvo que las observaciones presentadas por la CIDH “no reflejan la situación general del país” y por el contrario, dijo, da cuenta de la situación de sólo 6 de las 32 entidades del país y de algunos casos específicos aislados.
Ayer, diversas organizaciones nacionales e internacional criticaron la respuesta del Gobierno federal y sostuvieron que "lo que extraña del viernes pasado no es la valoración preliminar de la CIDH, sino que el Gobierno federal haya negado la gravedad de la situación actual, incluso caracterizando a víctimas de desaparición forzada como 'casos de 2008, 2009, 2010 y 2011', cuando, además de seguir vigentes los casos de años pasados, han desaparecido casi 12 mil personas de 2013 hasta mediados de 2015 según cifras oficiales".
"En efecto, en este y otros rubros, el Gobierno no citó datos que cuestionaran la información concreta presentada por la CIDH, generalmente derivada no sólo de testimonios y casos sino de estadísticas oficiales", agregaron.
Amnistía Internacional dijo este miércoles que "México debe cambiar la cultura prevaleciente de abusos de derechos humanos e impunidad, demostrar que está preparado para hacer de ésta una verdadera prioridad política y dar pasos firmes para pasar del discurso al desarrollo de planes integrales y medidas concretas para resolver los problemas estructurales en materia de derechos humanos”.
Perseo Quiroz dijo que para que las recomendaciones emitidas por organismos internacionales tengan un impacto real en los derechos humanos, es necesario que el gobierno mexicano reconozca la magnitud de las violaciones a los mismos.