Desde que se dio a conocer, la propuesta de López Obrador ha provocado el rechazo de los partidos de oposición, quienes aseguran que el verdadero objetivo es acabar con la autonomía del Instituto Nacional Electoral (INE), sin embargo, Andrés Páez Díaz, asesor legislativo de Morena, aclaró que no es así y que “el INE, Instituto Nacional Electoral se convertirá en el INEC, Instituto Nacional de Elecciones y Consultas”, mismo que tendrá “garantizada su autonomía técnica y de gestión”.
Ciudad de México, 15 de noviembre (SinEmbargo).- El plan B que prepara Morena en caso de que la Reforma Electoral no sea aprobada en el Congreso contempla adecuaciones legales en las que tendría cabida la elección popular de consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) y de magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), previó Andrés Páez Díaz, asesor legislativo y militante de Morena.
Al hablar sobre cuáles serían los puntos de la propuesta de reforma que podrían retomarse en ese plan B, dijo que “lo que planteaban el Presidente, la elección de consejeros y de titulares del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación podría entrar (en una reforma de leyes secundarias), me parece que por ahí podría entrar la reducción de representantes federales”, explicó en entrevista con las periodistas Daniela Barragán y Romina Gándara para el programa Café y Noticias que se transmite por el canal de Youtube SinEmbargo Al Aire.
Aunque también adelantó que “habrá quien diga que ciertas disposiciones (en las leyes secundarias) serían inconstitucionales y habrá quien le dé una interpretación distinta a la constitución en la que diga que no son vías democráticas para intentar llevar a cabo reformas que, nosotros sostenemos, son democratizadoras y que se marcan dentro del cambio de régimen que representa la Cuarta Transformación”.
Este martes, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dio a conocer un Plan B en caso de que la Reforma Electoral no sea aprobada en el Congreso, por lo que dijo que es probable que envíe una iniciativa de reforma a la Ley Electoral que no requiera del visto bueno de las dos terceras partes para la elección de consejeros y magistrados electorales, así como para la reducción de plurinominales.
“Es probable que yo envíe una reforma a la ley que no requiere de dos terceras partes, un plan B. Es posible que, sin violar la Constitución, que se pueda proponer en una reforma a la Ley Electoral para que se elijan a los consejeros y magistrados, que sea posible que no haya plurinominales, que en vez de 500 sean 300”, dijo el mandatario en su rueda de prensa diaria.
El Jefe del Ejecutivo federal consideró que esto es un asunto del Congreso, quien debe tratarlo y resolverlo, aunque sostuvo que es algo que le conviene al país, ya que dijo que “es necesario que haya una auténtica democracia en México, que se aleje de una vez y para siempre cualquier posibilidad de fraude electoral”.
Dicho Plan B había sido anunciado ayer por el Diputado Hamlet García Almaguer, quien ante medios de comunicación aseguró que, si para el 25 de noviembre, no se llega a un dictamen de consenso en materia electoral en comisiones de la Cámara de Diputados, Morena preparará un plan para impulsar modificaciones estructurales al INE.
La nueva propuesta, similar a lo que se hizo cuando la Reforma Eléctrica fue rechazada, sería presentada antes de que concluya el actual periodo ordinario de sesiones de la Cámara de Diputados, es decir, el 15 de diciembre.
Desde que se dio a conocer, la propuesta de López Obrador ha provocado el rechazo de los partidos de oposición, quienes aseguran que el verdadero objetivo de ésta es acabar con la autonomía del Instituto Nacional Electoral , sin embargo, Páez Díaz aclaró que no es así y que “el INE, Instituto Nacional Electoral se convertirá en el INEC, Instituto Nacional de Elecciones y Consultas”.
“Esto quiere decir que hay una sustitución del órgano electoral por otro que tiene igualmente garantizada su autonomía técnica y de gestión, esto quiere decir que el Gobierno federal no va a tener injerencia sobre las decisiones nacionales de quien, por su puesto, debe organizar las elecciones con independencia del Gobierno federal”, explicó.
En este sentido, recordó que antes de llegar a conformarse como el INE, este órgano electoral sufrió diversas modificaciones, por lo que también criticó a quienes ahora se oponen la reforma del mandatario federal, que en otros momentos no se pronunciaron ante dichas reformas, lo que consideró es resultado de la “fobia” que tienen contra el Jefe del Ejecutivo Federal.
“El INE, antes IFE antes Comisión Federal Electoral, que estaba adscrita a la Segob, ha sufrido a lo largo de la historia distintas modificaciones jurídicas, distintos proyectos de reforma, la más reciente en el 2014, me parece curioso que gran parte de los actores políticos que en ese momento reformaron al IFE en el INE no hayan dicho que el IFE no se tocaba, más bien el la fobia personal hacia el Presidente López Obrador, lo que los motiva a salir a las calles”, sostuvo el asesor legislativo de Morena.
Por ello, destacó que la Reforma Electoral propuesta por el Presidente cuenta con tres ejes, “El primer eje de la Reforma Electoral tiene que ver con disminuir los costos de la democracia, en América, el voto en México es el más caro que existe, es una cosa verdaderamente tremenda, se habla de que hay que reformar el Instituto Nacional Electoral en el INE para disminuir los costos de la democracia”, dijo.
“La segunda es modificar la creación de congresos, del Congreso federal, de los congresos locales, y de los cabildos, modificar la conformación en el mismo ámbito de ahorrar costos de la representación legislativa que está teniendo que ver, ese el segundo eje de la reforma que se hace mediante diversas disposiciones”, comentó Páez Díaz, quien agregó que “el tercero es el planteamiento de la elección por medio de voto popular de consejeros y de magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación”.
“Yo quiero finalizar diciendo que si las instituciones no se tocaran seguiríamos viviendo en un régimen autocrático, priista, en el que el Presidente era nombrado por el dedazo del predecesor, hoy, afortunadamente, la vida pública es más pública y esa no es una consigna vacía”, expresó el asesor legislativo y militante de Morena.
La Reforma Electoral del Presidente Andrés Manuel López Obrador pretende sustituir al INE por el Instituto Nacional de Elecciones y Consulta (INEC), que reduce de 11 a siete el número de los consejeros que serán electos por voto popular. El proyecto también elimina a los diputados plurinominales y reduce el financiamiento público sólo al periodo de campañas.
Con el propósito de erradicar los fraudes electorales y de fortalecer la democracia, así como de ahorrar 24 mil millones de pesos, la iniciativa de Reforma Electoral que el Ejecutivo enviará a la Cámara de Diputados reduce de 500 a 300 los diputados federales y de 128 a 96 los senadores, incorpora a la Constitución el voto electrónico, y deja fuera de los tiempos en radio y televisión a los organismos electorales.
La iniciativa presidencial, que quiere reformar 18 artículos de la Constitución y siete artículos transitorios, propone desaparecer los 32 Organismos Públicos Locales Electorales (OPLEs), creados en la reforma de 2014, para “acabar con duplicidades”, y también reduce el número de legisladores locales y regidores en los municipios. No obstante, sólo es una de las alrededor de 50 propuestas que hay de Reforma Electoral, ya que también el PAN, PRI y Movimiento Ciudadano han presentado las suyas.
A finales de octubre del año en curso, el Presidente aseguró que la Reforma Electoral, propuesta al Congreso mexicano, no busca desaparecer al Instituto Nacional Electoral y que, por el contrario, es para que ya no exista fraude en las elecciones del país. “Lo que no queremos es que continúe este sistema corrupto, antidemocrático, que está en poder de los conservadores porque son capaces, y no hablo al tanteo, de hacer un fraude como ya lo han hecho. Y eso hay que evitarlo porque sería un retroceso y una cuestión gravísima para el país”.
La reforma fue elaborada por Pablo Gómez y Horacio Duarte, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y el director de Aduanas, respectivamente, especialistas en la materia y ambos diputados federales que han sido cercanos a López Obrador.