El Gobierno del Presidente Joe Biden también ha enviado una advertencia a Israel: debe aumentar la cantidad de ayuda humanitaria que permite entrar en Gaza en los próximos 30 días o podría arriesgarse a perder el acceso a la financiación estadounidense para armamento.
Por Kareem Chehayeb y Bassem Mroue
Aito, Líbano (AP) — Un día después de un mortífero ataque aéreo israelí en el norte de Líbano —lejos de la principal zona de influencia de Hezbollah en el sur y el este—, el líder en funciones del grupo miliciano afirmó que apuntaría cohetes contra más zonas de Israel.
Naim Kassem afirmó que Hezbollah está resuelto a «herir al enemigo», y dio a entender que intensificaría sus ataques más al sur de Israel, mencionando las ciudades de Tel Aviv y Haifa, que ya han sido blanco de atentados.
Hizo estos comentarios en un discurso televisado pregrabado pronunciado el mismo día en que Estados Unidos comunicó que había enviado un pequeño equipo de tropas a Israel para apoyar un sistema de defensa antimisiles de fabricación estadounidense.
El Gobierno del Presidente Joe Biden también ha enviado una advertencia a Israel: debe aumentar la cantidad de ayuda humanitaria que permite entrar en Gaza en los próximos 30 días o podría arriesgarse a perder el acceso a la financiación estadounidense para armamento.
Se calcula que Hezbollah ha disparado 13 mil cohetes contra Israel en el último año en apoyo de la guerra de Hamás contra Israel en Gaza. Decenas de miles de israelíes del norte se han visto desplazados de sus hogares por esos ataques, e Israel ha dicho que su guerra contra Hezbollah tiene como objetivo detener esos cohetes para que las familias puedan regresar a sus hogares.
El lunes, un ataque aéreo israelí contra un edificio de apartamentos en el norte de Líbano mató al menos a 22 personas. Israel declaró que «había atacado un objetivo perteneciente a la organización terrorista Hezbollah», pero Naciones Unidas pidió el martes una investigación independiente.
«Tenemos verdaderas preocupaciones con respecto a las leyes de la guerra», dijo Jeremy Laurence, vocero de la oficina de derechos humanos de la ONU, un día después del ataque, mientras los rescatistas que buscaban entre los escombros hallaban más cuerpos y miembros humanos. Laurence dijo que la ONU había recibido informes creíbles de que, entre los fallecidos, había una docena de mujeres y niños.
En el pequeño pueblo de Aito, los equipos de rescate que buscaban entre los escombros encontraron el martes más cadáveres y restos.
Aito se encuentra en el centro de la comunidad cristiana del país y lejos de las principales áreas de influencia de Hezbollah, en el sur y el este de Líbano. El ataque sobresaltó a los residentes y exacerbó los temores de que Israel pudiera expandir su ofensiva hacia el interior de Líbano.
«Oí un fuerte ruido, como una explosión», dijo Dany Alwan, que vive al lado. «Corrimos afuera, vi el polvo, el humo y los escombros. Había un cuerpo ahí, y otro allá. Era una escena realmente horrible y dolorosa».
El edificio de tres niveles había sido alquilado a la familia Hijazi, que huyó de su vivienda en el poblado de Aitaroun, en el sur del país, de acuerdo con Elie Alwan, hermano de Dany Alwan y propietario del edificio. Cerca de 1,2 millones de personas han huido del sur y el este de Líbano, donde se han concentrado las batallas entre Israel y Hezbollah.
El martes, mientras los rescatistas exploraban los escombros, encontraron el cuerpo de un niño, y más tarde, una pequeña pierna y otros miembros que juntaron en una bolsa blanca. El ejército libanés observaba mientras una excavadora retiraba montones de acero retorcido, árboles de olivo destruidos y rocas aplastadas.
Hezbollah comenzó a atacar Israel con cohetes el 8 de octubre de 2023, un día después del ataque de Hamás contra Israel que dejó mil 200 muertos y 250 rehenes en Gaza.
La posterior guerra de Israel contra Hamás ha dejado más de 42 mil muertos en Gaza, según los funcionarios locales de salud. No distinguen entre combatientes y civiles, pero han dicho que algo más de la mitad de los muertos son mujeres y niños.
Hezbollah ha insistido en que seguirá atacando a Israel hasta que se alcance un alto el fuego en Gaza.
«No podemos separar el Líbano de Palestina, ni Palestina del mundo», declaró Kassem, que dirige Hezbollah desde el 27 de septiembre, cuando su antiguo líder, Hassan Nasrallah, fue asesinado en un ataque aéreo israelí.
En el último año, dos mil 350 personas han muerto en Líbano en ataques aéreos israelíes, según el Ministerio de Salud del país, que afirma que aproximadamente el 25 por ciento han sido mujeres y niños.