En medio de la llamada “nueva normalidad”, Andrés Manuel López Obrador realizó su segundo Grito de Independencia. Fue una noche atípica, sin gente que abarrotara el Zócalo capitalino. Fue otra noche de la pandemia de COVID-19.
Ciudad de México, 15 de septiembre (AP/EFE/SinEmbargo).– En un escenario atípico, con una epidemia aún activa en las 32 entidades mexicanas y la plancha del Zócalo vacía, el Presidente Andrés Manuel López Obrador se asomó al balcón principal de Palacio Nacional para realizar su segundo Grito de Independencia.
“Mexicanas, mexicanos, ¡viva la Independencia! ¡Viva Miguel Hidalgo y Costilla! ¡Viva José María Morelos y Pavón! ¡Viva Josefa Ortiz de Dominguez! ¡Viva Ignacio Allende! ¡Viva Leona Vicario! ¡Viva el Heroico Pueblo de México!”, gritó López Obrador.
“¡Vivan las comunidades indígenas! ¡Viva la grandeza cultural de México! ¡Viva la libertad! ¡Viva la justicia! ¡Viva la democracia! ¡Viva la igualdad! ¡Viva nuestra soberanía! ¡Viva la fraternidad universal!”, agregó el mandatario. Junto a él estaba Beatriz Gutiérrez Müller, su esposa.
El silencio de las calles vacías del Centro Histórico se percibió durante la ceremonia. Las campañas sonaron justo cuando el Presidente emitió sus últimas frases: “¡Viva el amor al prójimo! ¡Viva la esperanza en el porvenir! ¡Viva México! ¡Viva México! ¡Viva México!”.
Los mexicanos se aprestaron a celebrar su Día de la Independencia sin grandes ceremonias por primera vez en 153 años debido a las restricciones actuales a las reuniones públicas, aplicadas a fin de evitar el contagio del coronavirus.
Cada año, el Presidente toca por la noche una campana que se alza en el Palacio Nacional a fin de recordar el llamado a las armas que hizo Miguel Hidalgo para iniciar la lucha de 1810-1821 y lograr su independencia de España, cerrando con el grito “¡Viva México!”.
El escenario de este Grito, por primera vez en años, ha sido una plaza vacía sólo iluminada por las luces que delinearon un mapa de México, y por una antorcha encendida denominada “la Llama de la Esperanza”.
La ceremonia fue transmitida por televisión e internet para que los millones de mexicanos la siguieran desde sus hogares, desde donde escucharon las campanadas de la Catedral y contemplaron los fuegos pirotécnicos por espacio de media hora.
Todo ello aderezado por un mosaico musical con temas mexicanos como “México, lindo y querido”, de Jorge Negrete; “Mi ciudad”, de Guadalupe Trigo; “Serenata Huasteca”, de José Alfredo Jiménez, y el “Huapango” de José Pablo Moncayo, entre muchas otras.
El Día de la Independencia es formalmente el 16 de septiembre, pero durante más de un siglo el presidente da el “grito” la noche anterior, frente a una atestada plaza principal de la Ciudad de México, el Zócalo. Sin embargo, la ceremonia programada para este año se celebró sin la acostumbrada multitud de unos 100 mil asistentes.
El evento no ha sido cancelado desde 1847, año en que las tropas estadounidenses ocuparon la Ciudad de México durante la Guerra México-Estados Unidos.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador realizó el “grito” el martes por la noche, pero frente a un número selecto de invitados.
No solo México celebra el aniversario de su independencia esta mes, ya que septiembre está marcado por otras celebraciones en América Latina. Brasil festejó el pasado 7 de septiembre su 198 aniversario y hoy lo hacen también Honduras, El Salvador, Guatemala, Costa Rica y Nicaragua.
–Con información de EFE y AP.