A pesar del arrollador triunfo de Claudia Sheinbaum y Morena en las elecciones del pasado 2 de junio, la virtual Presidenta no tendrá vía libre pues deberá enfrentarse a poderes fácticos como el económico y mediático, dos de los principales críticos del actual mandatario Andrés Manuel López Obrador. ¿Cuáles son los principales riesgos que tendrá el siguiente gobierno? ¿Qué va a pasar con la oposición? Es el tema de hoy en ¬RADICALES.
Ciudad de México, 15 de junio (SinEmbargo).- Claudia Sheinbaum Pardo enfrentará durante su sexenio, que arrancará el 1 de octubre del presente año, muchos contrapesos, riesgos y frenos a su poder. Aunado a esta situación, deberá cumplir con las expectativas de gran parte de la sociedad que votó por ella y que le dio a Morena la mayoría calificada para permitir que la próxima mandataria pueda impulsar las Reformas Constitucionales contenidas en el “Plan C”.
En este episodio de ¬RADICALES, programa que se transmite en el Estudio B de SinEmbargo Al Aire, Alejandro Páez Varela, Álvaro Delgado Gómez, Carlos Pérez Ricart y Héctor Alejandro Quintanar analizaron cuáles serán los principales retos que tendrá el Gobierno de Claudia Sheinbaum, los riesgos que deberá superar y los distintos frentes a los que se enfrentará.
“El principal riesgo, desde mi punto de vista, para el nuevo Gobierno es el no saber cómo utilizar tanto poder. El poder es responsabilidad y al mismo tiempo es también lo que permite modificar las condiciones sociales de la gente, el poder es lo que permite cambiar, el poder es lo que permite transformar, pero el poder desmedido también puede ser riesgoso, uno puede dejar de ver también las expresiones minoritarias y uno puede simplemente quemar las naves y ser irresponsable en el uso del poder. El nuevo gobierno tiene que saber cómo utilizar la mayoría que el mandato popular le da, no tengo la menor duda de que tenemos en Claudia Sheinabum a una mujer que sabe controlar el poder, que lo va a usar y al mismo tiempo que va a dialogar en la medida de lo posible sin dejar de lado, insisto, el mandato popular”, afirmó Carlos Pérez Ricart.
El académico señaló que es falso que Claudia Sheinbaum va a tener todo un poder absoluto de aquí al final de su administración, pues dijo, se va a enfrentar a cuatro grandes contrapesos: Morena, los intereses económicos, los tratados internacionales y los medios de comunicación.
“Para empezar identifico cuatro grandes contrapesos, riesgos o frenos que va a tener. El primero es que desde el movimiento va a haber frenos, Morena no es un ente monolítico, en Morena como partido movimiento de muchas expresiones y va a tener ahí bastante extensiones que resolver no solo en cuanto a las expresiones institucionales en la Cámara de Diputados y Senadores, sino también entre el montón de intereses que va a tener que acoplar, ahí va a tener una primera forma de freno. El segundo son los grandes intereses económicos que hay en este país, las cámaras empresariales, la gente que juega desde la bolsa, que juega desde los mercados bursátiles también a especular. El tercer gran contrapeso que yo veo tiene que ver con los propios tratados internacionales que tiene nuestro país, no solamente el TEMEC, sino los acuerdos de libre comercio que ya se tienen. Y por último y más importante quizás para la realidad mexicana, los medios de comunicación preponderantes, los grandes medios, las grandes empresas estuvieron en contra mayoritariamente del proyecto de López Obrador del 18 al 24 y no veo por qué continúen siendo una oposición importante del 24 al 30”.
Pérez Ricart indicó que a pesar de que la oposición institucional partidista va a ser pequeña en los siguientes tres años, recalcó que Claudia Sheinbaum deberá enfrentar muchos problemas adentro del movimiento, factores económicos, los tratados internacionales y los medios de comunicación que de una u otra manera fungirán como contrapesos al poder que ganó la morenista en el congreso.
Por su parte, Héctor Alejandro Quintanar señaló que cuando cuando alguien gana con tal contundencia, como fue el caso de Claudia Sheinbau, el mayor riesgo que se genera es la propia expectativa que generas.
“Ya tenemos dos antecedentes importantes, el primero de ellos es el gobierno que está terminando de López Obrador, ya vimos de que ha sido capaz con las herramientas que ha tenido a su alcance, cuando tuvo una mayor cantidad de fuerza legislativa se llevó las cosas con mucha prudencia, guardó algunas reformas para la segunda parte del sexenio y eso ralentizó algunas de las cuestiones de su agenda que eran prioritarias, sin embargo, creo que todo eso fue paliado por el hecho de que la expectativa central fue cumplida a rajatabla. Por el bien de todos primero los pobres se convirtió, no en una consigna de campaña, sino en un eje rector de gobierno con resultados concretos, medibles y beneficiosos para un amplio sector de la población”.
Agregó, que el segundo antecedente es que Sheinbaum ya tiene experiencia como gobernante, en específico, de la Ciudad de México, una de las ciudades más complicadas del mundo.
“Lo hizo también una parte con cierto entorno favorable, pero el segundo trienio ya lo tuvo más complicado con diversas alcaldías opositoras al igual que el plano legislativo local. Entonces, con estos dos elementos, podemos suponer que hay ya un aprendizaje y una pericia para saber qué hacer en este tipo de entornos y resulta que tal el entorno no se presentó, Claudia Sheinbaum ya como Presidenta electa y en su primera parte del trienio va a tener un amplio margen de maniobra. Entonces creo que eso matiza un poco esta idea de que hay un riesgo en cuanto a que la expectativa no cumplida puede convertirse en una cuestión que desilusione o que o que haga que no se mantenga ese apoyo que en este momento tiene”.
En el caso de la oposición, dijo, deberá enfocarse en dejar de lado los berrinches y pataleos para empezar a comportarse como una oposición real y evitar seguir debilitando su presencia en el Congreso.
“Yo quiero ser generoso con esta oposición y suponer que a pesar de los pataleos y berrinches que están haciendo algunas figuras prominentes en este momento, en el Congreso en los espacios y en los enclaves importantes a ver si por fin aprendieron la lección y aprenden a medir sus limitaciones, saber en qué pequeño espacio están, tratar de negociar, tratar de comportarse como una oposición leal, no leal al gobierno, leal al mandato democrático. Si no entienden que el mensaje de las urnas al proyecto social mayoritario, que queremos que proceda, pues el hecho de que ellos se encasillen en una nueva moratoria legislativa, los va a hacer todavía más pequeños”.
En tanto, Álvaro Delgado coincidió con sus compañeros en que Claudia Sheinbaum tendrá que enfrentarse a grandes intereses económicos fundamentalmente que ahí también la virtual presidente electa va a tener que enfrentar. Quiénes son los que mueven esto, los oligarcas, los oligarcas de nuestro país y los oligarcas globales, bueno, con esos bueyes, hay que seguir arando.
“La oposición va más allá de los partidos políticos hoy tan desprestigiados, hay intereses, grandes intereses políticos, económicos, criminales, locales y globales hay intereses, grandes intereses políticos, económicos, criminales, locales y globales, en ese sentido, es donde va a venir fundamentalmente la resistencias al mandato de cambio que la sociedad mexicana le ha dado a Claudia Sheinbaum y a la coalición gobernante”.
El periodista pidió no exagerar el discurso de que Sheinbaum contará con poder absoluto, pues dijo, esto nunca ha sido así. Mencionó que después de la elección, la oposición deberá negociar con las fuerzas mayoritarias para no quedar aislada.
“No exageremos tampoco el discurso de todo el poder porque nunca es tal y mucho menos en un país con las complejidades que tiene México sí, es que cuando hablamos de oposición, la oposición no es solamente partidaria, que en el caso de los partidos políticos en México pues es una oposición reducida ya a dos partidos políticos absolutamente obsoletos, con un peso constitucional, es decir, con una representación en el Congreso marginal, porque por si solos no son capaces de aprobar una ley, va a depender de la inclusión que hagan las fuerzas mayoritarias, el nivel de influencia que tengan el PAN y el PRI de manera particular”.
En su intervención, Alejandro Páez recordó que históricamente, al inicio de cada sexenio, se genera cierta incertidumbre en torno al nuevo gobierno, pero señaló que en el caso de Claudia Sheinbaum estas dudas deben de disiparse, pues ganó gracias al respaldo de 36 millones de personas que le han dado su confianza.
“Todos los gobiernos absolutamente causan ampollas cuando empiezan, tienes que aflojar los zapatos, tienes que ir aflojando y entendiendo, todos los gobiernos, aún alguien que vota por López Obrador se pudo sentir sorprendido cuando empezó a hacer los cambios, si no estaba 100 por ciento enterado de lo que venía. Ahora, creo yo que el gobierno de Claudia Sheinbaum tiene un mandato tan claro de los mexicanos, pero demás hay tanto trabajado desde Lópezobradorismo y desde el presidente López Obrador, que nadie debería estar asustado si se plantean reformas de fondo, para que fueron 36 millones de votos, porque al presidente le escatimaron los votos los mexicanos por prudencia a lo mejor, por desinformación a la mejor, no hubo los votos suficientes para realizar reformas constitucionales por su cuenta y el mexicano se dio cuenta, se enteró en el transcurso de los siguientes años de gobierno que fue un error haberle amarrado las manos al Presidente. Bueno, pues ahora no, ahora se entregó exactamente. Va a causar algún callo en alguna parte el zapato, sí, pero de eso se tratan los zapatos nuevos, los zapatos nuevos se andan y simplemente hay que ir acomodándose en el futuro”.
Páez Varela detalló, que pese a la victoria, gran parte de la población continúa informándose a través de medios de comunicación como TV Azteca y Televisa, televisoras que durante este sexenio fueron abiertamente opositores al Presidente Andrés Manuel López Obrador.
“TV Azteca y Televisa se siguen escuchando mucho en muchos sectores, es lo que se oye lo que se ve y ese poder quedó intocado. Yo creo es un poder de riesgo, también está el poder económico, una parte de los empresarios, no todos, una parte de los empresarios son empresarios abusivos que han tenido el poder mucho tiempo, lo quieren conservar y quieren seguir influyendo en la política, son los que están en dentro de los núcleos como los de Claudio X. González y demás”.
El periodista señaló que el Poder Judicial, es otro de los sectores que no deberá descuidarse y que el nuevo Gobierno deberá enfrentar para terminar con sus privilegios y evitar que siga haciendo política en favor de un grupo.
“Otro poder que se va a desactivar y yo creo que va a prender la contención, va a ser el Poder Judicial, se le tiene que contener, Norma Piña hace política, por qué no se le habría de contener, ella se mete en sus terrenos son profundamente corruptos son profundamente opacos por qué vamos a seguir pagando si les pagamos de nuestra bolsa para que sean corruptos grillos antipáticos, además de todo opacos, no tienen que cambiar punto y ahí está el mandato, pero sí están esos poderes que se tienen que enfrentar”.