Expertos calculan que, siguiendo la tendencia actual de erosión, para el año 2050 más del 90 por ciento de todos los suelos del planeta podrían estar degradados.
Roma, 15 may (EFE).- La erosión del suelo puede causar pérdidas de hasta el 50 por ciento en el rendimiento de los cultivos, una amenaza que medio millar de expertos y responsables analizan desde hoy en un congreso internacional en Roma.
La directora general adjunta de la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) Maria Helena Semedo detalló en la presentación del simposio, de tres días de duración, que la agricultura intensiva, la labranza, el monocultivo, el pastoreo excesivo, la expansión urbana, la deforestación, la industria y la minería contribuyen a acelerar dicha erosión.
Se calcula que cada cinco segundos se erosiona una superficie de tierra equivalente a un campo de fútbol y que, siguiendo la tendencia actual, más del 90 por ciento de todos los suelos del planeta podrían estar degradados para 2050.
La parte positiva es que “los suelos se pueden recuperar en casi cualquier situación con medidas como la recogida de agua, la protección con cubiertas vegetales o las terrazas”, indicó Semedo, que llamó a agricultores, científicos y políticos a crear programas conjuntos de combate de la erosión.
El ministro de Ganadería de Uruguay, Enzo Benech, puso de ejemplo el plan nacional para el uso y el manejo de suelos, de obligado cumplimiento para cualquier productor en ese país, que “produce comida para diez veces su población”.
“Las nuevas tecnologías nos permiten tener todo el país bajo control”, dijo el responsable, que subrayó que en los últimos 50 años han recogido información de las lluvias y las características del suelo con el fin de garantizar la capacidad de uso de esos recursos en Uruguay.
El subsecretario ejecutivo de la Convención de Naciones Unidas para la Lucha contra la Desertificación, Pradeep Monga, apuntó que en todo el mundo el rendimiento agrícola se ve afectado por la pérdida de nutrientes del suelo y la exposición al agua.
Añadió que la erosión también contribuye a casi el 24 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de la acción sobre la tierra y, para evitarlo, instó a idear soluciones que ayuden conjuntamente a restaurar los suelos, proteger la biodiversidad y luchar contra el cambio climático.
El académico de la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica) Jean Poesen explicó que las hondonadas y la erosión bajo la tierra debido al agua pueden dañar los suelos seriamente, aunque falta estudiar mejor esos fenómenos.
También advirtió de otros factores como las pisadas del ganado o la cosecha de tubérculos, como las patatas y la remolacha azucarera que en la Unión Europea calcula que ocasionan la erosión de casi 15 millones de toneladas anuales de suelo. EFE