Ciudad de México, 24 de agosto (SinEmbargo).- Hubo un tiempo en el que el fracking fue presentado como la gran esperanza para que la humanidad abandonara el consumo de combustibles fósiles. sin embargo, con el paso del tiempo, el remedio resultó muy parecido al mal. Ahora, en la búsqueda desesperada de nuevas fuentes de energía, un nuevo candidato aparece en escena, pero, ¿se tratará también de otra promesa más que en cualquier momento se vendrá abajo?
Para el ingeniero Peter Kearl las microondas son la respuesta a nuestros problemas energéticos. Mientras el mundo debate si fracking de petróleo y gas es un regalo capitalista venido del cielo o una pesadilla ambiental, Kearl piensa que disparar el suelo con microondas podría proporcionar una forma más limpia y verde para conseguir combustible.
"Todavía estamos tratando de convencer a la gente que esto no es algo sacado de Star Wars", dice el experto que trabajara en el Oak Ridge National Laboratory, en Tennessee.
Pero no sólo Kearl está entusiasmado con la idea. También grandes nombres como British Petroleum (BP) y ConocoPhillips están volteando a ver una idea que, sus defensores argumentan, podría proporcionar una nueva fuente barata de petróleo y gas para llenar el vacío que dejarían las energías renovables. Por otra parte, esta nueva propuesta no sólo promete eso, sino que también podría servir para almacenar carbono, detener excavaciones que dañan el paisaje y los ecosistemas existentes e incluso generar agua limpia, publicó New Scientist.
Sin embargo, surge un problema o, mejor dicho, una desconfianza. Y es que la idea suena demasiado buena para ser verdad. Es cierto, no cabe duda, pero ¿es esto motivo suficiente para no apostar por ella? Es aquí donde las comparaciones salen a la luz.
El fracking también una vez fue descrito como un "puente para un futuro verde"; pero como muchos aseguran (y ahora comprueban) cualquier plan para extraer del suelo aún más carbono del que se producen los combustibles fósiles nunca puede ser una buena idea. ¿Será que con los disparos de microondas nos dirigimos hacia el mismo rumbo?
"El Fracking, también, una vez fue descrito como el puente hacia un futuro de carbono neutral", dice Kearl. Sin embargo, quienes defienden los pulsos de microondas argumentan que este nuevo modelo no tiene por que repetir los errores de su predecesor.
Las microondas pueden explotar una característica poco apreciada de algunos hidrocarburos: mientras que estos pueden ser similares al asfalto, sólidos a temperatura ambiente, también pueden convertirse en líquido con un poco de calentamiento. Sin embargo, el problema es conseguir que el calor baje hasta donde se encuentren los tipos de rocas permeables que guardan petróleo y gas.
Hasta ahora no se había encontrado una buena manera de llevar esto a cabo. Por un lado, la roca porosa es un excelente aislante térmico, por lo que los calentadores eléctricos no funcionan. Por otra lado, la inyección de vapor (una técnica a veces se utiliza en pozos convencionales para obtener petróleo crudo pesado y bitumen menos pegajoso) puede calentar una sección de la roca, pero no funcionará si hay obstrucciones. La mejor opción, entonces, podría ser la de utilizar un emisor de alta potencia, de 2.45 gigahercios. En pocas palabras, un horno de microondas sobrealimentado, el cual sería dirigido al suelo.
La idea de que una antena de microondas pueda hacer este tipo de trabajo en realidad ha estado rondando por un tiempo. Sin embargo, el equipo que puede crear, dirigir y estabilizar el rayo resultaba hasta hace poco demasiado voluminoso para caber en un pozo estrecho. Ahora, diseños que pronto harán de esta tecnología algo barato y común están surgiendo desde pequeñas empresas privadas y de la industria mundial de defensa.
MAS ALTERNATIVAS
El método de Kearl no es la única forma en la que las microondas pueden utilizarse, más allá de la industria del petróleo y el gas. John Robinson y sus colegas en la Universidad de Nottingham, Reino Unido, están desarrollando un sistema para desalojar el petróleo atrapado en los recortes de perforación, así como la arena contaminada que queda tras el proceso de perforación en un pozo convencional. Cuando el equipo dispara microondas a la mezcla, el calentamiento de agua mezclado con el petróleo pesado hace que el petróleo se bote, dejando la arena básicamente limpia. BP, por su parte, ha financiado el equipo de Robinson para extraer petróleo de los cortes que dejan sus plataformas oceánicas, haciendo de estos algo seguro para el océano.
El mismo proceso puede sacar el petróleo de las arenas bituminosas (una mezcla de arena, arcilla, agua y bitumen), un lodo crudo pesado que ha resistido todos los esfuerzos para extraerse de las arenas. Hasta ahora, la única manera de hacerlo es mediante la minería a cielo abierto, lo que significa desgarrar el suelo con grandes palas hidráulicas. Esto ha llevado a protestas, sobre todo en puntos en los que ocurre con mayor frecuencia esta situación como Canadá, donde la minería ha arrasado miles de kilómetros cuadrados de bosques boreales.
Al igual que la pizarra, sin embargo, estas arenas de alquitrán "de baja calidad" podrían sucumbir a zapping - gracias a su carga de agua, atrapado en este caso dentro de las estructuras cristalinas de pequeñas partículas llamadas multas de arcilla. Robinson dice que la meta a largo plazo de su grupo, como QMast, es utilizar el calor de microondas para la producción a gran escala de los hidrocarburos.
Sin embargo, estas arenas de alquitrán "de baja calidad" podrían sucumbir a las microondas gracias a su carga de agua, atrapadas en este caso dentro de estructuras cristalinas que la contienen. Robinson dice que la meta a largo plazo de su grupo es utilizar calor de microondas para una producción a gran escala de hidrocarburos.
"Si las tecnologías de microondas pueden eliminar la necesidad de agua y productos químicos en la fracturación hidráulica, eso sería un avance significativo", dice Rob Jackson, científico de sistemas de la Tierra en la Universidad de Stanford en California. Por otro lado, en lugar de consumir grandes cantidades de agua como el fracking lo hace, los disparos de microondas incluso podrían desbloquear suministros de agua dulce.