Anaya vs. Corral: ¿Quién es quién a 48 horas de su encuentro en las urnas blanquiazules?

14/08/2015 - 12:03 am

Ciudad de México, 14 de agosto (SinEmbargo).– Fuera de los círculos panistas poco se conoce de los dos personajes que  contienden por la presidencia del Partido Acción Nacional (PAN) y que se verán las caras frente a las urnas este domingo 16 de agosto, en su intento por dirigir un partido blanquiazul que en los últimos años se ha caracterizado más por dar tumbos que logros electorales.

Ricardo Anaya Cortés y Javier Corral Jurado son los nombres de los candidatos quienes solo comparten dos cosas en común: ser militantes del PAN y aspirar a la presidencia del Partido.

En los hechos se trata de dos trayectorias completamente diferentes, dos visiones distintas de hacer política, dos personas que, además, representan a distintos grupos de interés que se verán beneficiados con poder al interior del partido, en caso de ganar la elección interna del próximo domingo.

Por un lado Ricardo Anaya Cortés, nacido en Naucalpan, Estado de México, cuyos estudios y carrera florecieron en Querétaro, es un joven político que en muy poco tiempo ha logrado lo que la mayoría de los panistas solo han soñado: desde ser secretario particular de un Gobernador hasta Presidente de la Cámara de Diputados.

Por otro lado, Javier Corral Jurado, nacido en Ciudad Juárez, Chihuahua, es un político experimentado que no tiene empacho en decir lo que piensa ni en denunciar lo que considera injusto, aunque eso le genere enemistades, incluso entre sus correligionarios.

Ambos personajes tuvieron un mes para convencer a los militantes panistas de ser la mejor opción para llevar las riendas del partido. Ya sea en campaña a “ras de piso” o mediante el bombardeo mediático en redes sociales, los candidatos mostraron lo mejor de cada uno, pero no todo está dicho en la elección de este fin de semana.

RICARDO ANAYA CORTÉS

Ricardo Anaya es el candidato en torno al cual se están sumando la mayoría de los liderazgos dentro de Acción Nacional. Foto: Francisco Cañedo, SinEmbargo
Ricardo Anaya Cortés, el candidato que, de acuerdo con encuestas recientes, tiene la ventaja rumbo a la elección del próximo domingo. Foto: Francisco Cañedo, SinEmbargo

Congruencia, disciplina, inteligencia y capacidad son las virtudes que reconocen en Ricardo Anaya las personas que han convivido con él y que trabajan a su lado.

Poseedor de un encanto natural y una frescura que inevitablemente le facilita simpatizar con varias personas, el queretano ha logrado objetivos importantes en su carrera política, con solo 36 años de edad. Ha logrado insertarse en la cúpula dirigente de Acción Nacional, a pesar de que en su familia nadie más que él se dedica a la política.

Su capacidad para moverse dentro de diversos círculos panistas, sin atarse ni enemistarse con alguno de ellos, le ha permitido contar con el apoyo de distintos sectores ya sea al interior del PAN, en el Poder Legislativo o en el sector gubernamental.

Anaya ha navegado con éxito en diversas aguas del mar azul, en medio de verdaderos tiburones políticos. Pasó del círculo cercano del ex Gobernador Francisco Garrido, a formar parte de la burocracia en el sexenio del ex Presidente Felipe Calderón Hinojosa.

También pasó de ser integrante del equipo de campaña presidencial de Josefina Vázquez Mota a ser cobijado por el ex coordinador del PAN en la Cámara de Diputado, Luis Alberto Villarreal.

Y más tarde Gustavo Madero Muñoz lo eligió como su compañero de fórmula en su segundo periodo al frente del PAN

Ricardo Anaya está casado desde hace 10 años con Carolina Martínez Franco y tiene tres hijos: Santiago, Mateo y Carmen.

Ha sido Diputado local, Presidente del Comité Directivo Estatal de Querétaro, Diputado federal, Presidente de la Cámara de Diputados, Coordinador de los diputados del PAN y Presidente del PAN durante 90 días.

El despegue de su carrera política se dio en el 2003 cuando fue nombrado coordinador de campaña y secretario particular de ex Gobernador de Querétaro, Francisco Garrido Patrón.

Sobre su potencial intelectual no hay ninguna duda, Anaya Cortés es licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), tiene una maestría en Derecho Fiscal y doctorado en Ciencias Políticas por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), todas ellas con mención honorífica.

Su capacidad fue reconocida por propios y extraños. Ganó notoriedad y respeto entre la clase política en junio de 2013, cuando en su calidad de vicepresidente de la Comisión Permanente dirigió el discurso de bienvenida al Presidente de China, Xi Jinping, en donde lo invitó a construir una relación “sin condicionamientos unilaterales”.

Gracias a su labor, su grupo parlamentario lo nombró Presidente de Cámara de Diputados. Durante este periodo se le reconoce haber cambiado el modelo de comunicación institucional de la cámara baja, basado en pregonar los “logros” legislativos, mediante el uso de tiempos oficiales en todos los medios de comunicación.

Anaya consiguió que los spots de la Cámara de Diputados abordaran temáticas de interés general como es evitar la muerte súbita del lactante, en lugar de bombardear con mensajes para ensalzar la labor del Poder Legislativo, una institución que cuenta con los niveles más bajos de aprobación entre la población mexicana.

Del 30 de septiembre de 2014 a enero del 2015, Ricardo Naya fungió como presidente del PAN, debido a que Gustavo Madero dejó la presidencia para buscar una curul plurinominal.

Fue precisamente en esa época cuando Anaya entendió que podía explotar su imagen con buenos resultados. El entonces presidente del PAN protagonizó una exitosa campaña publicitaria para promover el voto a favor del albiazul.

La campaña inmediatamente rindió frutos y destacó la imagen de Anaya como un dirigente cercano a la ciudadanía joven, con encanto y con propuestas, reforzado con la frase “Sí podemos. ¿A poco no?”.

Durante esta campaña interna, Anaya mantuvo la estrategia del candidato puntero, aquella que evita pronunciarse sobre temas polémicos, lo aísla de los medios de comunicación incómodos y se concentra solamente en los potenciales electores.

El queretano preparó una serie de spots de 30 segundos donde promovió una imagen fresca, cercana a los militantes, enfocada a los jóvenes, cuyo lema fue un voto por Anaya es un voto por la #Regeneración PAN.

JAVIER CORRAL JURADO

Javier Corral Jurado,  Foto: Adolfo Vladimir, Cuaroscuro
Javier Corral Jurado, el panista reconocido por su congruencia y amplia experiencia política. Foto: Adolfo Vladimir, Cuaroscuro

Javier Corral Jurado es Senador con licencia por el PAN. El político chihuahuense es ampliamente reconocido por su congruencia política, su crítica constructiva, incluso entre los propios círculos panistas y su facilidad para la oratoria.

Asimismo, Corral es un panista que se ha destacado de entre el común de los panistas, por su interés y defensa de las causas sociales, su crítica a las políticas públicas fallidas, aunque vengan de gobernantes emanados de su propio partido.

Con 49 años de edad de los cuales 33 ha vivido dentro del PAN, Corral Jurado disputa la presidencia nacional panista con el propósito de “rescatar al PAN de la mano del Presidente Enrique Peña Nieto, para volver a ponerlo al servicio de la ciudadanía.

Bajo los colores panistas, el político chihuahuense ha sido representante de casilla, representante de órganos municipales y distritales; ha pintado bardas, repartido volantes, cerrado calles y puentes para defender el voto; ha sido miembro del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), del consejo nacional, Diputado local y federal, y Senador de la República.

Es reconocida, también, su lucha por la democracia en su natal estado de Chihuahua, en donde actualmente ha emprendido una cruzada contra el presunto enriquecimiento ilícito del Gobernador de Chihuahua mediante el financiamiento de un banco privado con dinero público y el endeudamiento de 233 por ciento de la economía estatal.

Corral nació en agosto de 1966 en Ciudad Juárez. Desde muy joven salió a relucir su vocación periodística la cual floreció con su participación como reportero y columnista del diario El Fronterizo, así como coordinador editorial y subdirector del Norte de Ciudad Juárez.

Razón por la cual ha dedicado gran parte de su tiempo a la democratización de los medios de comunicación y la lucha contra los monopolios, principalmente contra Televisa.

De hecho, su cruzada antimonopolios desde que Corral era Diputado federal en el periodo 1997-2000, cuando presidía la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía de San Lázaro le valió un veto mediático impuesto por Televisa.

La restricción de la televisora a transmitir cualquier mensaje o imagen de Corral se avivó con la oposición del chihuahuense a la llamada Ley Televisa, reforma a la Ley Federal de Radio y Televisión que fue aprobada en 2006, en medio de una gran polémica por su carácter monopólica y de beneficios a la televisora de Chapultepec.

Hay quienes mencionan, no sin dolo, que el veto de Televisa responde más a un adeudo de Corral con la televisora que a las críticas que el panista ha realizado al gigante de las telecomunicaciones.

Javier Corral está casado con Cinthia Aidée Chavira, periodista y licenciada en Economía por la Universidad Autónoma de Chihuahua.

Es miembro fundador de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (AMEDI) y de la Asociación Civil “Convergencia Digital”.

Corral hizo una campaña clásica dirigida principalmente a los militantes panistas inconformes con los traspiés políticos de los últimos años. El chihuahuense se autodefinió como el dirigente que devolvería al blanquiazul su carácter de oposición franca al Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Ha criticado lo mismo a la dirigencia nacional como a la Comisión encargada de organizar el proceso de renovación interno.

Su estrategia de comunicación fue la visita a diversos estados de la República. También promovió spots de alrededor de tres minutos de duración en donde se enfocó en invitar a los militantes a sumarse a la “rebelión de las bases”.

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