Si bien la nueva variante se ha expandido alrededor del mundo, el director general de la OMS pide mantener las restricciones para evitar contagios y recalca nuevamente en la distribución desigual de vacunas.
Ginebra 14 dic (EFE).- La variante Ómicron del coronavirus causante de la COVID-19 ha sido ya detectada en 77 países, aunque probablemente está ya presente en todo el mundo, y se está expandiendo “a un ritmo que no habíamos visto en ninguna de las cepas anteriores”, alertó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Probablemente ya está en la mayoría de los países, incluso en los que aún no ha sido detectada”, reconoció en rueda de prensa el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien manifestó su preocupación por que gran parte de la sociedad haya bajado la guardia ante esta evolución del virus.
“La gente está considerando que la variante Ómicron está asociada a casos menos graves, pero ya hemos aprendido antes que subestimar este virus es peligroso”, afirmó el experto etíope.
“Incluso si la Ómicron causa menos casos graves, un fuerte aumento de los contagios puede nuevamente colapsar sistemas sanitarios no suficientemente preparados”, alertó el máximo responsable de la organización con sede en Ginebra.
Tedros insistió en que “las vacunas por sí solas no van a sacar a ningún país de esta crisis”, ya que la transmisión del coronavirus debe enfrentarse por otros medios, incluyendo el uso de mascarillas, el evitar lugares concurridos, la buena ventilación o la higiene de manos.
“Practiquen todo ello, consistentemente, y de la forma correcta”, insistió el director general.
VACUNAR A TODOS ANTES QUE DOSIS DE REFUERZO
El director general de la Organización Mundial de la Salud insistió hoy en que es prioritario que las vacunas anti COVID lleguen a poblaciones que aún no han recibido la primera pauta, antes que suministrar dosis de refuerzo en países con altas tasas de inmunización.
“La OMS no está en contra de las dosis de refuerzo, pero sí estamos contra la desigualdad”, señaló en rueda de prensa, ante el creciente número de países que han comenzado a dar estas dosis a toda su población adulta en respuesta al aumento de casos y a la alarma por la nueva variante Ómicron, más contagiosa que las anteriores.
“There remains a vast gap in rates of #COVID19 vaccination between countries:
-41 countries still haven’t been able to vaccinate 10% of their populations
-98 countries have not reached 40%
We also see significant inequities between population groups in the same country”-@DrTedros— World Health Organization (WHO) (@WHO) December 14, 2021
Tedros advirtió de que estas campañas se están lanzando “incluso aunque no hay todavía evidencias sobre la efectividad de las dosis de refuerzo contra la nueva variante” y subrayó que estas medidas pueden repetir los problemas de acumulación excesiva de vacunas en determinados países mientras en otros no llegan estos fármacos.
El experto admitió que las vacunas de refuerzo (hacia las que la OMS ha pedido una moratoria hasta finales de año) “pueden desempeñar un papel importante para personas en riesgo de contraer formas graves o letales de COVID-19”, pero subrayó que la principal preocupación de su agencia ahora es “salvar vidas en todo el mundo”.
“Administrar vacunas de refuerzo a grupos que no corren riesgo de contraer una COVID-19 grave pone en peligro las vidas de aquellos en peligro que aún esperan su primera dosis”, afirmó.
Tedros recordó que cerca de un centenar de países en el planeta aún no han alcanzado el 40 por ciento de su población vacunada contra la COVID-19, un porcentaje que la OMS esperaba alcanzar antes de finales de año en todos los territorios, para lograr el 70 por ciento a mediados de 2022.