El Senador suplente y exgobernador de Veracruz le dio una entrevista al diario El País, donde afirmó que no hubo negociación com Morena ni con Adán Augusto López, que seguirán en el PAN a pesar de haber sido expulsados por su voto para avalar la Reforma Judicial y cuestionó al magnate por intentar poner “estrellitas de demócrata”.
Ciudad de México, 14 de septiembre (SinEmbargo).– Miguel Ángel Yunes Lunares, exgobernador de Veracruz, rompió el silencio en una entrevista con el diario El País: habló por primera vez en detalle sobre el polémico voto de su hijo, el Senador Miguel Ángel Yunes Márquez, sobre el voto para avalar la Reforma Judicial –el único de la oposición en hacerlo– y, además, el rechazo a que hayan habido negociaciones con Morena. También cuestionó al magnate Claudio X. González Guajardo, orquestador de la alianza PAN-PRI-PRD.
Cuestionado por la periodista Elia Castillo Jiménez, de El País, Yunes Márquez reveló que González Guajardo lo “buscó días antes para ofrecerme una estrellita como demócrata”. “Ni siquiera le tomé la llamada, si quisiera asumir una responsabilidad, en lugar de estar poniendo estrellitas hubiera pedido a la alianza ser candidato a sSenador, hubiera ido al Senado a defender la posición de su grupo y ya. ¿Quién es para orientar el voto de un Senador?”, señaló al diario español.
Claudio X. reclamó el voto de Yunes Márquez, el hijo del exgobernador, a favor de la reforma al Poder Judicial, que acabó siendo aprobada en el Congreso y que en las próximas horas firmará y publicará el Presidente Andrés Manuel López Obrador, para que entre en vigor. El magnate, líder opositor en el último sexenio, calificó a los Yunes de “traidores”.
“Ni Miguel [Yunes Márquez], ni yo cambiamos de opinión”, afirmó el también expriista y panista desde hace dos décadas a El País. “Se hizo un estudio a partir de que llegó el dictamen al Senado. Lo revisamos conjuntamente durante cinco o seis días y llegamos a la conclusión de que era positivo para el país y para el Poder Judicial, por eso decidió dar su voto a favor”, argumentó.
Además, rechazó haberse reunido con Adán Augusto López, el coordinador de los senadores morenistas, para negociar el voto de Yunes Márquez a cambio de supuesta “impunidad” por las acusaciones de corrupción en su contra y de su familia en Veracruz. “El viernes comí a las 4.30 de la tarde en el restaurante Arturo’s de Polanco, en Ciudad de México, con una persona de mi familia. Acostumbro a llevar mi agenda, toda la mañana estuve en casa trabajando. Cuando llegué a Arturo’s, estuve como hora y media y regresé a mi casa. Miguel tuvo actividades similares. No sé de dónde sacan esas cosas”, respondió el exgobernador de Veracruz a la reportera Castillo Jiménez.
Esta semana, la Comisión Permanente del Partido Acción Nacional (PAN) concluyó el procedimiento de expulsión del Senador Miguel Ángel Yunes Márquez y de su padre Miguel Ángel Yunes Linares, luego de que el primero concretara el voto con el que el oficialismo consiguió la mayoría calificada para aprobar la Reforma Judicial.
Los dos panistas fueron expulsados del partido que los cobijó por muchos años luego de que, durante casi dos días, Yunes Márquez desapareciera de la escena política dejando en vilo su posicionamiento ante la Reforma Judicial, fuera momentáneamente relevado por su padre entre acusaciones de “traidor” y, luego, ya durante la discusión de la iniciativa, el también expresidente municipal de Boca del Río, Veracruz, reapareciera en la tribuna del Senado para dar el voto que inclinó la balanza en favor de la Reforma al Poder Judicial.
“Si algo yo no he tenido en mi vida es victimizarme”, dijo Yunes Linares a El País. “Lo que ha habido es un linchamiento sin sentido, lleno de calificativos, de ofensas que no contribuyen de ninguna manera al avance del país. ‘¡Eres un judas!, ¡Eres un traidor!’, dicen sin dar un argumento. Yo soy muy serio, tengo carácter y me sé defender. No me voy a victimizar”, agregó.
Ya esta semana, López Obrador rechazó que el Gobierno federal negociara un intercambio de favores con Miguel Ángel Yunes Márquez y su padre, Yunes Linares, a cambio del valioso voto que permitió la mayoría calificada a la alianza de izquierdas. “Tengo diferencias con él [Yunes Linares], son públicas, notorias, como tengo diferencias con muchos otros; pero siempre en la política hay que optar entre inconvenientes, y es buscar el equilibrio entre la eficacia y los principios -contestó el político tabasqueño”, dijo en su conferencia matutina.
El voto decisivo que el panista Miguel Ángel Yunes Márquez emitió en el Senado para aprobar la reforma al Poder Judicial de la Federación no borra la biografía corrupta del jefe del clan, Miguel Ángel Yunes Linares, dueño de una multimillonaria fortuna acumulada sin otra actividad profesional que la política y bajo investigación de la Fiscalía General de la República (FGR), salvo que se archive.
Cuando Felipe Calderón lo designó director general del ISSSTE, en 2006, Yunes Linares no tenía ni casa propia, aseguró en sus declaración patrimonial, y cuatro años después, cuando dejó esa institución para ser el candidato del PAN a Gobernador de Veracruz ante su anterior partido, el PRI, su riqueza inmobiliaria comenzó a emerger con propiedades en Veracruz, la Ciudad de México y en el extranjero.
En efecto, al mismo tiempo que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) acreditaba el saqueo del ISSSTE en el periodo de Yunes Linares, que fue de 2 mil 479 millones 590 mil pesos sólo en los ejercicios 2009 y 2010, él y su familia ya había acumulado decenas de casas, terrenos y departamentos en colonias como Polanco, y en Estados Unidos, como Miami.