René Bolio Hollarán, presidente de la Comisión Mexicana de Derechos Humanos, es uno de los personajes que encabezó las protestas en la Embajada de Cuba en México.
Ciudad de México, 14 de julio (SinEmbargo).– “¡No me toques, maricón, no me toques! ¡Estás muerto, maricón!”, sentenció René Bolio Hollarán, presidente de la Comisión Mexicana de Derechos Humanos, a un guardia de la Embajada de Cuba que lo contuvo en la más reciente protesta contra el gobierno de la isla encabezada por este personaje que como senador del PAN, en 2012, fue acusado de orquestar un operativo para introducir a ese país propaganda anticastrista durante la visita del Papa Benedicto XVI.
Bolio Hollarán, quien tras renunciar al PAN quiso formar un partido político Solidaridad –presuntamente apoyado por empresarios como Lorenzo Servitje y Patricio Slim–, fue identificado por el gobieno cubano como el orquestador de un operativo para entregar propaganda anticastrista a ocho jóvenes mexicanos que ingresaron a Cuba para asistir a la visita del Papa.
Funcionario de los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, Bolio fue Senador suplente de Cecilia Romero y, aunque renunció al PAN, se coordina en las protestas contra el gobierno cubano con Mariana Gómez del Campo, secretaria de Asuntos Internacionales de la dirigencia del PAN, Diputada federal suplente de su prima Margarita Zavala.
Amigo de José Luis Luege y de Manuel Espino, Bolio Hollarán preside desde marzo la Comisión Mexicano de Derechos Humanos, una organismo civil a través del cual opera la organización ultraderechista El Yunque –de amplia presencia en el PAN– y que mantiene un activismo contra los gobiernos de Cuba, Venezuela y Bolivia.
Según el periódico Granma, órgano del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), Bolio envió a Cuba a ocho jóvenes mexicanos que, a su vez, fueron “pagados, entrenados e instruidos por Orlando Gutiérrez Boronat”, dirigente del Directorio Democrático Cubano, la organización anticastrista con sede en Miami.
Las autoridades de Cuba detuvieron a cuatro de los ocho jóvenes que entraron a ese país como turistas y señalaron expresamente a Bolio Hollarán como fue el jefe en México de ese operativo, coordinado con Gutiérrez Baronat.
Integrantes de la Embajada Cubana intentaron reprimir los mensajes de solidaridad por parte de la ciudadanía mexicana #SOSCuba 🇨🇺🇲🇽 pic.twitter.com/Q93vixvu1Y
— Comisión Mexicana de Derechos Humanos (@Comexdh) July 13, 2021
En la protesta de ayer martes 13 en la Embajada de Cuba en México, Gómez del Campo y Bolio impartieron una conferencia de prensa en la banqueta, que fue inaudible por la música a alto volumen que programó la representación dimplomática y posteriormente se produjo un choque entre personal de ésta y los manifestantes, por lo que intervino la policía.
Como parte de zafarrancho, Bolio enfrentó a un presunto guardia de seguridad de la Embajada que trató de calmarlo, le exigió no tocarlo y lo sentenció a muerte: “¡No me toques, maricón, no me toques! ¡Estás muerto maricón!”
Y luego, en entrevista, el expanista se quejó del trato: “El guardia negro que estaba ahí me empujó en territorio mexicano”.
La comunidad de #CUBANOS en México sabotea, con música a todo volumen, la rueda de prensa Rene Bolio, presidente de la Comisión Mexicana de los Derechos Humanos, que se llevaba a cabo esta mañana frente la embajada de cuba. pic.twitter.com/ZmhIW9iSYc
— Cta. de Extrabajadores de Monitor (@ExMonitores) July 13, 2021
En 2008, el entonces Instituto Federal Electoral (IFE) frustró la aventura de viejos sinarquistas y de un sector de panistas de extrema derecha de constituir su propio partido político, denominado Solidaridad, debido a que se acreditaron prácticas indebidas en varias de las asambleas estatales.
De acuerdo con el dictamen de la Comisión de Prerrogativas del IFE, en asambleas estatales se acreditaron irregularidades como ofrecimiento de dinero, engaños y acarreos, que derivó en la anulación de tres de ellas, con lo que incumplió con los requisitos necesarios para obtener el registro como partido político nacional.
El embrión del nuevo partido fue la agrupación política nacional Unión Nacional Sinarquista que dio lugar al Movimiento de Participación Solidaria –erróneamente identificado por algunos medios como “partido humanista”, denominación que jamás tuvo– y se pretendía llamar Partido Solidaridad, que temporalmente tuvo hasta su propia página de Internet.
El proyecto fue animado, públicamente, por Fernando Rivera Barroso, secretario de Educación de Vicente Fox en Guanajuato y militante de la ultraderechista Organización Nacional del Yunque; René Bolio Halloran, operador de José Luis Luege, actual director de la Comisión Nacional del Agua, y Enrique Pérez Lujan, presidente de la Unión Nacional Sinarquista Inicialmente se presumió que el fundador del Grupo Bimbo, Lorenzo Servitje Sendra, financió este proyecto político, pero él lo desmintió públicamente, lo que no hizo Patricio Slim Domit, otro de sus presuntos impulsores.