El día de hoy se espera una jornada de protestas de colectivos feministas que se organizaron tras el asesinato de Ingrid Escamilla y por la difusión de las fotografías de su cuerpo desollado en los diarios Pásala y La Prensa. A las 6:45 de la mañana arribaron a Palacio Nacional cerca de 50 feministas al grito de “¡Ingrid Escamilla vive!”.
–Con la cobertura de Romina Gándara en las inmediaciones de Palacio Nacional y Daniela Barragán dentro, en la conferencia del Presidente. Agrega información de Associated Press
Ciudad de México, 14 de febrero (SinEmbargo).- A las puertas de Palacio Nacional, esta madrugada hay una manta en el piso en la que se exige justicia y verdad para Diana Velázquez Florencio, asesinada hace dos años en Chimalhuacán, Estado de México. Su madre, Lidia Florencio, que ha recorrido casi todo el país en búsqueda de justicia y denunciando las atrocidades que han rodeado el caso, está plantada ahí también. Hoy exige justicia y atención al Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Este día se espera una jornada de protestas de colectivos feministas que se organizaron tras el feminicidio de Ingrid Escamilla y por la difusión de las fotografías de su cuerpo desollado en los diarios Pásala y La Prensa.
Desde las primeras horas de este viernes, decenas de mujeres se congregaron frente a Palacio Nacional para protestar por el feminicidio de Ingrid mientras se lleva a cabo la conferencia del Presidente Andrés Manuel López Obrador. Como parte de las manifestaciones, un grupo de manifestantes realizaron pintas en las puertas y fachada del inmueble. Pero una vez terminada la protesta se informó que todas las puertas de Palacio Nacional serían cerradas y que “nadie sale hasta nuevo aviso”.
La señora Lidia dice que todo lo que hay en materia de leyes no le salvó la vida a su niña de 24 años. Y estar hoy en Palacio es para exigir al Presidente que se haga responsable de la vida de las mujeres, que en este país está en riesgo. “Él llegó al poder porque iba a estar con los más necesitados y familias de las víctimas. Nos hizo esas promesas y no ha cambiado nada, todo sigue igual y va empeorando: 11 mujeres asesinadas al día y no le interesa”, dijo.
Durante las protestas, algunas de las participantes con el rostro cubierto prendieron fuego a un montón de carteles frente a las puertas del recinto. Pero este caso de Ingrid no es el último, sino el que aglutinó el enojo. El Subsecretario de Gobierno de la Ciudad de México, Arturo Medina, salió a la protesta. Fue abordado por medios mientras caminaba frente a Palacio. Feministas se acercaron, comenzaron a seguirlo. Lo rociaron pintura de laca. Personal de seguridad de inmediato blindó al funcionario. “¡Cobarde, cobarde!”, gritaban las manifestantes. “Así hablas desde tus privilegios”, insistían.
“Todo nuestro respeto para el movimiento feminista. Estamos atendiendo el problema de los feminicidios. Celebramos que las mujeres defiendan su derecho a la seguridad. Me pronuncio en favor las mujeres, en contra del feminicidio. No se van a modificar las leyes para aminorar castigos a delincuentes. Estoy en contra del machismo. Respeto a las mujeres. Todos debemos respetar a las mujeres”, dijo el Presidente esta mañana, a pregunta expresa sobre las movilizaciones. “Todos los días atiendo el problema y no estoy solo preocupado, estoy ocupado, y no es el análisis de la realidad o administrar el conflicto o el sufrimiento de la gente, yo soy un transformador”.
–No es cierto. ¿Que estás haciendo ? ¡Da la cara, cabrón! –respondió una de las feministas, a gritos.
Escuchaban la mañanera en un megáfono puesto en un celular.
–¡No estoy evadiendo mi responsabilidad! –decía el Presidente.
–¡No queremos discurso, queremos que hagas frente a la impunidad!
–Estamos haciendo todo lo que nos corresponde –proseguía el Mandatario.
–Si quieres hablar, aquí estamos. ¡Ven a dialogar, tenemos más que decir que tú! ¡No vienes porque no somos empresarias, ¿verdad?! ¿Porque no podemos comprar 500 cachitos [de Lotería Nacional]? –gritaban otras.
–¡Tiene miedo, tiene miedo, tiene! –exclamaron.
De pronto, convocaron a quitar la transmisión.
–Ya quiten eso. Da más coraje escucharlo –espetaron.
Las puertas de Palacio Nacional fueron custodiadas por mujeres policías. “Mujer policía, que lástima me das, teniendo tú las armas, no sales a luchar. Nosotras venimos a protestar por ustedes”, reprochan manifestantes. Frente a ellas se colocó una fila de feministas que sostiene una pancarta de justicia para Diana Velázquez Florencio, asesinada en Estado de México. “¡Pedir justicia no es provocación! ¡Las paredes no son sus cuerpos, morras!”.
“Debería hacernos caso porque sí nos están matando. Queremos recordarle que han asesinado a nuestras hijas y queremos justicia”, agregó. A las 6:45 de la mañana arribaron a Palacio Nacional, cerca de 50 feministas al grito de “Ingrid Escamilla vive”. Luego de diversas consignas siguieron gritando los nombres de mujeres víctimas de feminicidio.
Fotos: Romina Gándara
MOVILIZADAS POR INGRID
¿Qué logra un medio de comunicación al publicar imágenes explícitas de una mujer brutalmente asesinada por su marido? ¿Es información? ¿Es morbo? La pregunta ha generado desconcierto por días y, sobre todo, furia entre miles de mexicanos que el lunes se enteraron de un feminicidio ocurrido en la capital del país: Erick Francisco, de 46 años, confesó haber matado la madrugada del domingo a su esposa Ingrid Escamilla, de 25, antes de desollarla, descuartizarla y deshacerse de sus órganos.
A la indignación por el crimen en un país donde en promedio se asesina a 10 mujeres al día, se sumó la irritación por la filtración a la prensa de las fotografías del cadáver de Ingrid. Aunque se informó que la Fiscalía investiga a seis agentes que trabajaron en la escena del crimen, usuarios en redes sociales decidieron hacer algo por su cuenta para contrarrestar las imágenes grotescas de la joven.
Una flor. Una pintura posimpresionista. Un gatito. La sabana africana. El mar.
#IngridEscamilla #IngridFotos #IngridEscamillaVargas #IngridFeminicidio y #NiUnaMenos fueron algunos de los hashtags que el jueves circulaban en redes como Twitter –donde hubo casi 10 mil posteos durante el día– e Instagram.
“Porque espero que si un día me pasa algo y buscan mi nombre, vean fotos así. Enamorada de esta campaña”, tuiteó una joven llamada Dayana Salgado (@dayanas0612) acompañando su mensaje de cuatro fotos que mostraban el cielo en diferentes tonalidades.
“Ingrid Escamilla, te dedico todas las flores del mundo, descansa en paz”, escribió a su vez una usuario identificada como Alicia Arias (@_arias_alicia), sobre una imagen con ramos de pequeñas flores rojas, rosas, blancas y amarillas.
En México son frecuentes las protestas que a gritos rechazan la violencia contra la mujer y la incapacidad de las autoridades para resolver el problema.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador y funcionarios aliados se han comprometido a convertir en una prioridad el combate a los feminicidios y otros delitos de género. En noviembre, la Alcaldesa de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, declaró una alerta de violencia de género en la capital y ya suman 20 entidades federativas que lo han hecho en el país.
Sin embargo, las autoridades siguen despertando el enojo social.
En los últimos días, el Fiscal general, Alejandro Gertz Manero, se volvió objeto de polémica cuando propuso que se elimine el delito de feminicidio del código penal debido a que, según él, es complicado determinar jurídicamente cuando una mujer es asesinada por cuestiones de género. Ante las críticas, después aclaró que no pretende desaparecerlo sino cambiar su tipificación para perseguir los crímenes con mayor facilidad y proteger a las mujeres.
–Con información de Associated Press