Mario Antonio Rojas empleó al menos cuatro empresas falsas para lavar más de 143 mil 339 dólares a través de cobros con 46 cheques a su nombre.
Tegucigalpa, 14 de febrero (EFE).- El ex presidente de la Federación de Beisbol de Honduras, Mario Antonio Rojas, procesado por el caso del desfalco del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), fue declarado hoy culpable por lavado de dinero, por lo que puede enfrentar hasta 20 años de prisión.
Rojas es culpable de utilizar al menos cuatro empresas falsas para "lavar más de 3.4 millones de lempiras (143 mil 339 dólares)" a través del cobro de 46 cheques a su nombre, indicó el Ministerio Público hondureño en un comunicado.
La resolución condenatoria fue emitida este miércoles por la Sala II del Tribunal de Sentencia con Jurisdicción Nacional, en la que el organismo hondureño demostró mediante "prueba documental, evidencial y pericial" la culpabilidad de Rojas, de 69 años, añadió.
El Ministerio Público indicó que presentó uno de los cheques que "incriminan" a Rojas, lo mismo que "dictámenes de auditoría forense, informes de vinculación y otra documentación clave".
Rojas fue arrestado el 1 de abril de 2016 en el complejo deportivo conocido como Villa Olímpica, en el extremo oriental de la capital hondureña, donde trabajaba para la Federación de Beisbol de Honduras.
Los jueces hondureños enviaron al acusado a la Penitenciaria Nacional, la principal cárcel del país, al norte de Tegucigalpa, y fijaron para el próximo 7 de marzo la audiencia de individualización de pena y sentencia.
Rojas es tío del último director del Seguro Social, Mario Zelaya, quien está detenido en Tegucigalpa con otros exfuncionarios acusados del saqueo, y de la esposa del ex jefe de compras de esa institución, quien en junio de 2017 fue declarada culpable por su implicación en la creación de empresas falsas para lavar dinero del IHSS.
El caso del Seguro Social es uno de los que la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad Honduras (MACCIH), de la Organización de Estados Americanos, investiga y que salpica a los últimos tres gobiernos, a empresarios, políticos, modelos y periodistas, entre otros.