El fraude, detectado principalmente en Ciudad de México, Estado de México, Quintana Roo y Tijuana, consiste en la venta de vacunas apócrifas contra la COVID-19 a través de redes sociales y páginas de Internet ilegales.
Por Cristina Sánchez Reyes
México, 14 ene (EFE).– El crimen organizado se ha aprovechado con campañas falsas de vacunación y la venta de vacunas ilegales en México que ponen en riesgo la salud de la población y muestran hasta donde llega su capacidad de organizar negocios fraudulentos.
“Se dio con la vacuna de la influenza, con las pruebas COVID y ahora con la vacuna de Pfizer, lo que pone en serio riesgo la salud de la población”, señaló a EFE Raúl Sapién Santos, presidente del Consejo Nacional de Seguridad Privada (CNSP) de México.
El fraude, detectado principalmente en Ciudad de México, Estado de México, Quintana Roo y Tijuana, consiste en la venta de vacunas apócrifas contra la COVID-19 a través de redes sociales y páginas de Internet ilegales.
Pfizer ya alertó el pasado 6 de enero en su cuenta oficial de Twitter que “la vacuna de Pfizer/BioNTech para la COVID-19 no está a la venta en ningún canal privado por el momento”.
Confirmó que se han detectado algunos sitios y números telefónicos que no pertenecen a Pfizer “donde terceros ofrecen a la venta la vacuna. Esta información es falsa”.
La Secretaría de Salud Federal no ha respondido por ahora a preguntas sobre la venta fraudulenta de la vacuna.
PRÁCTICA RECURRENTE
Sapién Santos destacó que, lamentablemente, la compra de medicamentos e insumos de forma ilegal no es algo nuevo en México.
“Más de ocho millones de personas en el país consumen medicamentos robados, lo que provoca pérdidas de unos mil millones de pesos (50.3 millones de dólares) anuales”, señaló.
Explicó que si bien esta problemática se veía desde mucho antes de la COVID-19, con la llegada de la pandemia se ha recrudecido por la desesperación de las personas por saber si están contagiados, hallar un tratamiento o encontrar una cura.
“Se han detectado más de 400 páginas apócrifas que ofrecen la vacuna, o que ofrecen desde mascarillas, pruebas rápidas, hasta oxígeno muchos a través de sitios web que son falsos”, afirmó.
Lamentó que la comercialización de todas estas vacunas y pruebas falsas podría enmascarar aún más los indicadores que actualmente presenta la Secretaría de Salud y disparar de manera exponencial la cifra negra en el número de contagios y defunciones por la COVID-19.
Indicó que la situación ha llevado al punto de que ya no se debe analizar cómo se falsificará la vacuna, sino la rapidez con la que reaccionarán los grupos delictivos para promocionarla.
“Por eso es importante saber las medidas que deben tomar tanto el Gobierno federal como la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para desarticular a los criminales”, manifestó.
Para el experto en seguridad Juan Carlos Montero no es raro que el crimen organizado irrumpa en este rubro ya que “todo producto que pueda generar un mercado negro, puede generar una organización criminal”, apuntó.
Señaló que las personas no suelen ver esto como un delito debido a que se justifica “diciendo que es injusto que solo por no tener acceso a un producto como la vacuna, se pueda comercializar ilegalmente”.
Agregó que es probable que con el tiempo aumente el número de grupos que ofrezcan las vacunas de forma ilegal y se incrementen los fraudes relacionados con la pandemia.
POBLACIÓN DEBE ESTAR ALERTA
Sapién Santos hizo un llamado a la población a estar alerta para no caer en este tipo de estafas pero, sobre todo, para no poner en riesgo su salud.
“Los mexicanos no sólo están en riesgo de morir por COVID-19, sino de hacerlo por la aplicación de vacunas apócrifas que no contienen una solución real para combatir al virus”, apuntó.
Para especialistas, el riesgo de que las personas accedan a vacunas apócrifas es alto.
“Lo que les pueden ofrecer es agua o alguna otra sustancia que puedan causar efectos adversos e interactuar con y, posiblemente interferir con, medicamentos esenciales”, dijo el doctor Rodrigo Romero, coordinador académico de la Asociación Mexicana de Vacunología.
En ese sentido, el alergólogo e inmunólogo David Mendoza destacó que especialmente la vacuna contra la COVID-19 requiere de una preparación logística específica, por lo que si se comercializa de forma ilegal puede provocar cambios en la efectividad y seguridad del biológico.
“Lo que puede pasar es que al aplicarse la vacuna no tenga la efectividad necesaria o que si se maneja mal y hay una bacteria, pueda causar efectos a la salud”, afirmó. Además, advirtió que en algunas ocasiones estos podrían hasta mortales.
Ambos especialistas recordaron que hasta hoy la vacuna contra la COVID-19 sólo está disponible a través del Gobierno, por lo que pidieron estar pendientes de las alertas de la Cofepris y, en caso de tener dudas, consultar a instituciones como la Asociación Mexicana de Vacunología.
Finalmente, Sapién Santos indicó que el trabajo contra este tipo de delitos debe ser del Gobierno pero que la población debe estar alerta.
“Es un problema que se debe ver de manera integral y para ello también es necesario que la gente tenga una cultura de denuncia”, señaló.
México suma hasta ahora más de 1.5 millones de casos y 136 mil 917 muertes y ha sido uno de los primeros países en iniciar la vacunación contra el coronavirus SARS-CoV-2, aunque por ahora sólo se ha inmunizado al personal de salud.
Participan mil brigadas en esta operación en las 32 entidades federativas. Hasta este día suman 192,567 personas vacunadas. 2/3 pic.twitter.com/Zpcu0q1boy
— Hugo López-Gatell Ramírez (@HLGatell) January 14, 2021