El estudio concluyó que la infección proporciona un 94 por ciento de protección frente a la reinfección sintomática y un 75 por ciento de inmunidad contra la reinfección asintomática.
Londres, 14 de enero (EFE).- La mayoría de las personas que han superado la COVID-19 tienen un promedio del 83 por ciento de inmunidad frente a la enfermedad durante al menos cinco meses, pero pueden reinfectarse y transmitir el virus, según un estudio liderado por la agencia Public Health England (PHE, por sus siglas en inglés).
Los investigadores reclutaron a unos 21 mil sanitarios de hospitales británicos, divididos en grupos según si habían pasado la infección o nunca se contagiaron, y los sometieron entre junio y noviembre de 2020 a pruebas PCR quincenales y a un test mensual para analizar su nivel de anticuerpos, según la PHE, que depende del Ministerio de Sanidad del Reino Unido y asesora sobre la salud de la población.
Según los resultados, de los 6 mil 614 sanitarios que tenían anticuerpos, sólo 44 desarrollaron una “potencial” infección.
We’ve published the first results of our SIREN study looking at reinfection rates of #COVID19.
We regularly tested over 20,000 healthcare workers for COVID-19 infection & antibodies to see if people who’ve had the virus before are likely to get it again.https://t.co/VMFBV7skwF
— Public Health England (@PHE_uk) January 14, 2021
El estudio concluyó que la infección proporciona un 94 por ciento de protección frente a la reinfección sintomática y un 75 por ciento de inmunidad contra la reinfección asintomática.
Los expertos apuntan que los casos de reinfección detectados en la investigación, dirigida por Susan Hopkins, se consideran “potenciales” a la espera de un análisis genético que certifique la información.
Asimismo, indican que todavía no está confirmado que los resultados se puedan extrapolar a un grupo de población de mayor edad, ya que los participantes en el estudio tenían entre 35 y 54 años y, por lo tanto, sistemas inmunes probablemente más robustos.
La investigación se alargará 12 meses para concretar la duración de la inmunidad, analizar el impacto de la nueva variante de coronavirus detectada en el Reino Unido y monitorizar la protección de los participantes que ya han recibido la vacuna.