Ciudad de México, 29 de junio (SinEmbargo).– Chiapas es un bastión para el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) no sólo porque en el 2012 se convirtió en la primera entidad gobernada por esta fuerza política, sino porque en solo tres años logró establecer una estructura política, electoral y social piramidal, cuya cúspide es el propio Gobernador Manuel Velasco Coello, sostuvo la oposición en la entidad.
Según los resultados del cómputo distrital del pasado proceso electoral federal, el Partido Verde no supera el 10 por ciento del promedio de votos nacionales en 24 estados de la República, mientras que Chiapas tiene más del 45 por ciento de la votación total registrada el 7 de junio. La oposición consideró que estos resultados fueron fruto de una estrategia de captación de votantes por medio de la manipulación de programas sociales y de la afiliación colectiva al PVEM en ese estado, con la complicidad del gobierno federal y el estatal.
“Manuel Velasco está controlando todo el proceso. Es verdaderamente vergonzoso como el descaro ha llegado a los límites máximos en los que el candidato oficial que está en coalición del PRI [Partido Revolucionario Institucional]-PVEM-Panal [Partido Nueva Alianza] prácticamente es uno sólo con el gobierno del estado”, explicó a SinEmbargo, Víctor Manuel Ancheyta Bringas, candidato del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) a la Presidencia Municipal de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
Por su parte, de gira por la entidad el presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Carlos Navarrete Ruiz, reiteró que “en Chiapas se ha construido un sistema de control político y social abrumador, claramente ilegal”. En Chiapas, aproximadamente nueve de cada diez electores emitieron un voto a la coalición electoral de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Verde Ecologista de México (PVEM).
La coalición tuvo carro completo en los 12 distritos electorales. Seis de ellos para el Verde y los otros seis para el PRI. En una representación del porcentaje de votos por entidad federativa, Chiapas entregó más del 45 por ciento de los votos a nivel nacional, muy lejos del 7 por ciento de la votación media nacional.
Como ejemplo, en el Distrito VI con cabecera en Tuxtla Gutiérrez, el Partido Verde recibió 50 mil 648 votos, el PRI 31 mil 717, mientras que el tercer lugar, el Partido Acción Nacional (PAN) apenas acumuló un total de cuatro mil 438 votos. “Realizaron todo de una forma descarada, cínica. La compra del voto estaba al lado de las casillas entregando los recursos a los que iban votando de la forma más burda que he visto en toda mi vida”, recordó Víctor Ancheyta, actual candidato de Morena a la Alcaldía de Tuxtla Gutiérrez.
Víctor Ancheyta, detalló que las mismas trampas del Verde realizadas en la elección federal se realizan durante el proceso electoral extraordinario, rumbo a los comicios del próximo 19 de julio en la entidad. “Realizó compra masiva de votos, de una manera indiscriminada usando recursos públicos y privados para poder coaccionar y comprar voluntades de los electores”, agregó. Según testimonios, otra irregularidad que bien pudiera convertirse en una ilegalidad: Chiapas fue la entidad con el mayor número de observadores electorales, algunas de ellas vinculados a la organización Fuerza Ciudadana Comprometida, cuyo acrónimo FCC coincide con Fernando Castellanos Cal y Mayor, candidato del PRI-Verde a la presidencia municipal de Tuxtla
LAS MAPACHERÍAS
Las estrategias de captación de voto en Chiapas no son diferentes a las que se realizan en los Estados autoritarios y poco democráticos del mundo, según los entrevistados: acarreo de votantes de forma masiva y compra del voto a partir de programas sociales, entre otras. En casillas de los municipios de Ocosingo, Ocozocoautla, San Cristóbal y Comitán de Domínguez, se registraron las llamadas “casillas zapato”, es decir, casillas con votación casi exclusiva para el PRI y el PVEM.
Sin embargo, la oposición sostuvo que se registraron muchos casos más en otros municipios, estrategia que contribuyó a inflar la votación para la coalición de los partidos antes citados. El tamaño del escándalo llegó a la Cámara de Diputados, en donde legisladores federales del PRD presentaron un punto de acuerdo ante la Comisión Permanente para pedir al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que anule estas casillas atípicas denominadas “casillas zapato”.
En el estado de Chiapas se observó una situación “totalmente inequitativa” con el afán de que el gobierno pudiera imponer el triunfo de sus candidatos. “Utilizaron todos los recursos de los que disponían para llevarse el triunfo. Fue descarado. Se vieron casas de seguridad por todos lados”, explicó Víctor Ancheyta.
Las casas de seguridad a las que se refirió son casas utilizadas por los operadores del Verde para coordinar las acciones de compra del voto en donde se resguardaron despensas, se alimentó y entrenó a los observadores electorales y se planeó la movilización masiva de electores. El pasado jueves 25 de junio, Andrés Manuel López Obrador de gira por Tapachula, Chiapas, aseguró que el Partido Verde “cometió un monstruoso fraude electoral mediante la entrega de dádivas y la compra de miles de votos con dinero del presupuesto público”.
Indicó que en la zona urbana votó el 35 por ciento del padrón, mientras que en las comunidades rurales lo hizo el 52 por ciento de los electores. Dijo que esta situación es atípica porque en 2003, las comunidades rurales tuvieron una participación de 34 por ciento de los empadronados; en el 2009, lo hizo el 35 por ciento; y en 2015 la cifra creció al 52 por ciento.
“Del medio rural donde hay más pobreza, el PRI-PVEM obtuvo el 76 por ciento de todos sus votos”, dijo el líder de Morena.
El perredista Carlos Navarrete también recordó que el Partido Verde utilizó todos los recursos del gobierno del estado: los medios estatales, la entrega de despensas, recursos de los programas sociales, condicionamiento del voto y control político de los presidentes municipales.
CAMPAÑA DE CAZA-MAPACHES
La oposición advirtió que defenderán el voto de los comicios del próximo 19 de julio. “Nos estamos preparando para la cacería de mapaches desde un día anterior”, advirtió Víctor Ancheyta, candidato a la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez.
“Vamos a tener un pequeño ejército electoral para hostigar a esas casas de seguridad o casas de reclutamiento que son las casas de las personas que coordinan el reclutamiento doy que desde un día antes”, recalcó.
El candidato de Morena explicó que ya se tienen detectadas las casas de operación electoral del Verde y están reclutando gente para que el día de la elección e incluso un día antes, vayan a evidenciar las operaciones ilícitas que allí se realicen. Aseguró que su intención no es generar situaciones de violencia, sin embargo, reconoció que estas podrían generarse por lo tenso de la situación en Chiapas y por el propio hartazgo ciudadano.
Por su parte, Andrés Manuel López Obrador aseguró que existe una especie de despertar ciudadano, porque todas las mapacherías dejaron un hartazgo tremendo en un importante sector de la sociedad. En su gira por los municipios de Suchiate, Frontera Hidalgo y Tapachula, López Obrador dejó un solo mensaje: “Ayudemos todos a erradicar esta práctica perversa, indigna e inmoral de la compra del voto”.
SUSPENDEN PROMOCIONALES DEL VERDE
La Comisión de Quejas y Denuncias del Instituto Nacional Electoral (INE) ordenó el pasado 25 de junio la suspensión de los promocionales “Yo sí le entro”, “Yo sí le entro2”, “Por Tuxtla” y “Fonda FC”, pautados por el Partido Verde en radio y televisión para ser transmitidos en la contienda electoral local en el estado de Chiapas.
Los consejeros electorales detectaron que en los spots porque no se hace referencia a que Fernando Castellanos Cal y Mayor, candidato a presidente municipal de Tuxtla Gutiérrez solo se promociona como abanderado del Verde, a pesar de que es candidato de la coalición integrada también por el PRI, Nueva Alianza y el partido local Chiapas Unido. Esto “infringe la ley electoral y puede confundir al electorado”, concluyeron los consejeros electorales de Comisión de Quejas y Denuncias del INE.
