La decisión fue unánime y expande la definición de consumo médico de mariguana de su forma seca a cualquier tipo de forma.

La máxima instancia del poder judicial determinó que restringir el consumo médico de mariguana a sólo fumarla “viola los derechos de libertad y seguridad de una manera arbitraria y no va de acuerdo con los principios de justicia fundamental”.

La decisión de la Suprema Corte secundó la determinación en agosto pasado de la Corte de Apelaciones de Columbia Británica, en la costa oeste de Canadá, que declaró “inconstitucional” la decisión del gobierno federal de restringir el consumo médico de mariguana sólo a fumar la hierba seca.

Existe un considerable número de pacientes que requieren consumir mariguana como tratamiento médico pero que no desean o pueden fumarla, por lo que el canadiense Owen Smith comenzó a preparar galletas de mariguana como un consumo alternativo.

Smith fue acusado en 2009 de traficar mariguana por preparar galletas con este ingrediente, así como cremas de cannabis para un grupo de personas de Victoria (capital de Columbia Británica) que dependen de esta planta para su tratamiento médico.

En Victoria, el Club de Compradores de Cannabis, en el cual Smith prepara las galletas e infusiones de esta hierba, abastece de productos hechos con mariguana a los pacientes registrados.

Smith fue absuelto por un juez de Columbia Británica, que le dio al gobierno federal un año para cambiar las leyes en torno a este asunto.

Con la decisión de la Suprema Corte, desde este día se podrá consumir en Canadá la mariguana para tratamiento médico en forma de cigarrillos, galletas, barras de chocolate, brownies, resinas y tés.

Por tanto, quedan anuladas las secciones 4 y 5 del Decreto de Control de Drogas y Substancias que sólo aceptaba su consumo médico mediante cigarrillos.