Ciudad de México, 5 de junio (SinEmbargo).- Los problemas de carga eléctrica de las baterías de la gran mayoría de gadgets y la escasa duración de la misma representan un gran problema a futuro, así como uno de los principales obstáculos para poder desarrollar mejor tecnología portátil. Sin embargo, un grupo de científicos de la Universidad de Washington (UW, por sus siglas en inglés) ahora trata de que la carga de smartphones y aparatos similares venga de una fuente universal y bastante conocida por todos: el Wi-Fi.
El Wi-Fi es un mecanismo de conexión de dispositivos electrónicos de forma inalámbrica, cuyo principal uso es el de emplearlo para conectarnos a internet mediante la transmisión de datos vía aérea. pero, ¿qué pasaría si pudiera ser utilizado para alimentar nuestros dispositivos de la misma forma?
"PoWiFi", como se le conoce a la propuesta hecha por el Sensor Systems Laboratory de la UW, engaña a los routers para que envíen una señal de salida constante que es capturada y convertida en corriente continua por una "cosechadora" de energía. No se trata de algo inverosímil, el Wi_Fi ya transmite una pequeña cantidad de energía al transportar datos, hasta un watt, en comparación con la salida cinco vatios de un cargador típico de Android o iPhone. Así que esta tecnología capta ese poder que ya está siendo enviado y lo pone a trabajar, publicó Popular Science.
"Tenemos una enorme infraestructura Wi-Fi ya colocada", dijo Vamsi Talla, estudiante de doctorado en la Universidad de Washington y uno de los investigadores que trabajó en el proyecto. "Si podemos reutilizar la infraestructura para el suministro de energía existente, entonces así podemos realmente permitir la entrega de energía inalámbrica en hogares y oficinas."
Mediante el uso del Pow-Fi, los investigadores serán capaces de cargar un súper capacitor conectado a una cámara pequeña, ubicada a cinco metros del router. De esta manera, cada 35 minutos, el súper capacitor recogería suficiente energía del Wi-Fi, permitiendo que la cámara se mantenga funcionando. De igual manera, esta tecnología también sería capaz de cargar un dispositivo pequeño como un monitor de pasos utilizado para hacer ejercicio, por ejemplo, al 41 por ciento de su capacidad en apenas dos horas y media.
Por otro lado, la salida de baja potencia de un watt de un router limita lo que se puede ejecutar con PoWiFi, por lo que es inadecuado para los teléfonos celulares, dice el doctor Mehdi Kiani, profesor asistente de ingeniería eléctrica en la Universidad Estatal de Pennsylvania. No obstante, agrega que la tecnología tiene aplicaciones interesantes para la alimentación de otros dispositivos de bajo consumo.
Ya antes, compañías como Energus habían traído al mercado productos similares que enviaban energía, basados en señales de Wi-Fi e incluso argumentaban que eran capaces de cargar teléfono. Sin embargo, en el caso del Pow-Fi, la novedad radica en la habilidad de aprovechar la energía con el hardware existente, y el equipo de la UW afirma que sus routers son capaces de transmitir tanto energía como datos en la misma señal.
Por su parte, para probar los efectos potenciales sobre la velocidad de Internet, los investigadores equiparon seis casas en Seattle con los routers PoWiFi activos y se les pidió a los usuarios que navegaran por la red como normalmente lo hacen. Al final, cuatro de seis usuarios no encontraron ninguna diferencia y uno de ellos incluso manifestó que su internet realmente había mejorado.
OPCIÓN A LA MEXICANA
El perfeccionamiento de esta y otras tecnologías similares permitirá que en el futuro se pueda prescindir de los estorbosos cargadores y baterías de emergencia que a diario tienen que cargar los usuarios de smartphones y otro tipo de dispositivos móviles. Se trata de un asunto de practicidad y además se ajustaría perfectamente a el uso que millones de usuarios de internet le dan a las conexiones inalámbricas.
Tan sólo en México, en la red de sitios públicos conformada principalmente por escuelas, hospitales, restaurantes y plazas públicas, se realizan mensualmente más de 4.9 millones de conexiones, y una transferencia de datos superior a los 210 mil gigabytes, dio a conocer hace apenas unos días Telmex en un comunicado.
De igual manera, la empresa mexicana de telefonía agregó que el mayor número de accesos se da a través de smartphones con sistema Android, seguido por aquellos que utilizan sistema iOS. Por otro lado, las tabletas ocupan el tercer lugar, siendo su sistema operativo indistinto.
Sin embargo, antes que nada, hay problemas mucho más urgente que solucionar a nivel nacional en lo que a internet se refiere, y estos son la accesibilidad y la calidad de los servicios de conectividad, los cual se ve reflejado en el hecho de que apenas existen 59.2 millones de internautas en el país, los cuales representan al 49.2 por ciento del total de la población mexicana, publicó El Economista.
Por otra parte, la misma conectividad Wi-Fi puede representar una salida a este panorama estancado. De acuerdo con el "Estudio de Usos y Hábitos de Internet 2015", de la Asociación Mexicana de Internet (Amipci), 53.9 millones de mexicanos cuentan con acceso a la red primordialmente desde dispositivos móviles, computadoras portátiles y smartphones. sin duda, impulsar la red de servicio público contribuirá al aumento de cibernautas.