Ciudad de México, 10 de mayo (SinEmbargo).– "El señor Salinas considera que el acceso al capital, a la educación y a modernas tecnologías de la información a precios viables es fundamental para incrementar el nivel de vida de la base de la pirámide", dicta el perfil de Ricardo Benjamín Salinas Pliego en la página corporativa de su emporio, Grupo Salinas. La ley de sus negocios son "abonos chiquitos" y "créditos en 24 horas" dirigidos a los sectores más pobres en al menos siete países de América Latina, entre ellos México.
Ricardo Salinas Pliego es el presidente y fundador de Grupo Salinas, que agrupa empresas como Grupo Elektra, Banco Azteca, Seguros Azteca, entre otros servicios financieros, y TV Azteca, la segunda televisora de mayor audiencia en México. De acuerdo con la revista Forbes, él es el cuarto mexicano más rico en 2015 y su fortuna está valuada en 8 mil millones de dólares.
Salinas Pliego tiene 59 años y es hijo del empresario y fundador de las tiendas Elektra, Hugo Salinas Price y de Esther Pliego de Salinas. Es contador público por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) y tiene una Maestría en Negocios por la Universidad de Tulane, en Estados Unidos.
Con su primera esposa, Ninfa Sada Garza, Ricardo Salinas tuvo tres hijos: Ninfa, Benjamín y Hugo Salinas Sada. Luego de divorciarse, el magnate se casó en el 2001 con María Laura Medina, y con ellas tuvo tres hijos más: Ricardo Emilio, Cristóbal Patricio y Mariano Mateo Salinas Medina.
De acuerdo con su descripción en la página de Grupo Salinas, Ricardo es un empresario focalizado "en la creación de negocios de valor agregado, de rápido crecimiento y administrados bajo esquemas eficientes".
El empresario se convirtió en Director General de Elektra en 1987, cuando la empresa sólo contaba con 59 puntos de venta en el país. En 1993, fundó TV Azteca, año en que adquirió, junto con un grupo de inversionistas, dos canales nacionales de televisión (el 7 y el 13). Actualmente la televisora también es dueña de Canal 40.
En 1999 creó la compañía de telefonía celular Unefon. En 2003, compró Grupo Iusacell por una simbólica suma de 10 millones de dólares (mdd) y con esa empresa adquirió también una deuda de cerca de 800 millones de dólares; luego fusionó a ambas empresas y así se mantuvo hasta 2012. Ese año vendió la mitad de la firma de telefonía celular a Grupo Televisa, por mil 600 millones de dólares, efectivo con el cual liquidó los adeudos de Iusacell.
En septiembre de 2014, recompró a Televisa la mitad de la empresa de telefonía por 717 mdd y, finalmente, en enero pasado, vendió la compañía entera a At&t por 2 mil 500 mdd, incluidos 800 millones de adeudos. La revista Forbes estima que Salinas Pliego se embolsó cerca de 835 millones de dólares por la transacción después de impuestos.
Antes de esa operación, Salinas Pliego separó de Grupo Iusacell a Total Play, su empresa de televisión restringida, telefonía e Internet, por lo que podrá continuar en el mercado de las telecomunicaciones.
En enero de 2014, Salinas Pliego compró por 408 millones de pesos la empresa de renta y venta de videojuegos Blockbuster, para ingresar al segmento de consumo de la clase media.
El emporio de Salinas Pliego se extiende también al futbol mexicano, pues el empresario es socio de los equipos Morelia y Atlas de Guadalajara.
ELEKTRA: EL NEGOCIO DE LA DEUDA
Salinas Pliego ha hecho su fortuna a través de un emporio de abonos "chiquitos", pues al tomar el control de las tiendas Elektra reorientó el negocio hacia una línea de productos básicos; es decir, al comercio de línea blanca, electrónica y muebles, y además implementó el sistema de ventas a crédito, que ha llevado al consorcio a ser pionero en concentrarse, como la misma compañía lo explica, a la "base de la pirámide socioeconómica", a las personas con menos recursos de Latinoamérica.
Grupo Elektra tiene sus raíces en un negocio familiar dedicado a la manufactura de muebles, fundado hace más de un siglo, en 1906, por Benjamín Salinas Westrup. Actualmente, el Grupo cuenta con casi 4 mil puntos de venta en México y 637 puntos de venta distribuidos en Guatemala, Honduras, Perú y Panamá.
Sin embargo, la empresa anunció el pasado viernes que inició el proceso de retiro de operaciones de subsidiarias en Brasil, país donde arrancó operaciones en 2008 y durante siete años fue parte del mercado del noreste brasileño.
Además firmó un convenio con Western Union para el envío de remesas de mexicanos en Estados Unidos.
El Grupo ofrece actualmente también servicios financieros a través de Banco Azteca, Seguros Azteca, Afore Azteca, y la recién creada subsidiaria bursátil Punto Casa de Bolsa.
La empresa ofrece sus servicios financieros en México, Panamá, Guatemala, Honduras, El Salvador y Perú; además de en 24 estados norteamericanos, luego de la compra de Advance America, una firma de préstamos a corto plazo dirigidos también a "la base de la pirámide", y que, de acuerdo con la firma en Estados Unidos, era un sector desatendido por la banca tradicional.
En México, el salario mínimo ronda los 69 pesos al día, uno de los más bajos de América Latina, y de acuerdo con el catedrático de Economía de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), Marcos Gutiérrez, en el país unos 19.5 millones de mexicanos recibió en 2014 el salario mínimo.
Incluso la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) situó al país como el único con el salario mínimo inferior al umbral de la pobreza, y un 14 por ciento de los empleados reciben un ingreso aún inferior a éste.
Esta es la base de la pirámide económica de México, en donde Salinas Pliego ha fincado su emporio.
El sistema de crédito ha sido la clave. Para comprar algún producto en cualquier tienda Elektra, bajo el sistema de pagos semanales, se necesita contar con una tarjeta del Banco Azteca [el cual fue constituido en el año 2002] con la que se pueden aprovechar "los abonos semanales, fijos y chiquitos". Para obtener el plástico únicamente es necesario presentar identificación oficial y comprobante de domicilio.
En su defecto, el cliente puede solicitar una línea de crédito con Credimax, expedida también por Banco Azteca, con que se pueden realizar las compras en abonos en la tienda.
El sistema de abonos va, dependiendo del producto, desde los 52 pagos semanales hasta los 102 pagos. Sin embargo, lo difícil no es conseguir la autorización del crédito sino pagar los abonos, pues aunque parecen "chiquitos", a final de cuentas el cliente paga hasta el doble del producto. Por ejemplo, un refrigerador de 14 pies, uno de los más económicos que comercializa la tienda, tiene un precio al contado de 6 mil 999 pesos. Sin embargo, la promoción principal de venta es adquirirlo a pagos de 143 pesos por 78 semanas. Basta una simple operación matemática para saber que al finalizar el crédito el cliente pagará 11 mil 154 pesos por el mismo producto, eso sin contar si hay un atraso en los pagos, lo cual aumentaría a 168 pesos el pago semanal.
Incluso, si el cliente desea comprar en línea también hay facilidades de pago, como la que describe la página web de Elektra:
"Una de nuestras características es ser flexibles y atentos a las necesidades de todos nuestros clientes. Si no cuentas con tarjeta de crédito puedes realizar tu pago en cualquier sucursal de Banco Azteca, depositando en el número de cuenta proporcionado al finalizar el proceso de compra o, si lo deseas, por medio de una transferencia bancaria a la cuenta de elektra.com.mx. Recuerda que solo cuentas con ocho días hábiles para realizar este movimiento".
Pero el crédito que otorga el Banco Azteca, no sólo se limita a darles la oportunidad a los clientes de adquirir producto en la tienda, además les da la opción de préstamos de hasta 70 mil pesos en efectivo, en tan sólo 24 horas.
Como estos créditos se otorgan sin la necesidad de un comprobante de ingresos, unos 6 mil jefes de cobro y crédito de Elektra recorren el país para visitar las casas de los futuros clientes y, de acuerdo con el nivel de vida que aprecien en el domicilio, se decide la capacidad de pago que tiene el futuro deudor.
El director de Banco Azteca, Luis Niño de Rivera, dijo el pasado mes de enero al diario español El País: “El 80 por ciento de nuestros clientes vienen de la economía sumergida. No tienen comprobante de ingresos, por lo que el criterio tradicional no sirve. Disponemos de un sistema de evaluación de riesgo con visita domiciliaria”.
Sin embargo, Salinas Pliego ha expandido sus servicios financieros al mercado de las afores y seguros, y recientemente al bursátil, con la creación de Punto Casa de Bolsa, subsidiaria bursátil de Grupo Elektra, la cual busca promover la inversión entre pequeños y medianos empresarios como a personas físicas.
Punto Casa de Bolsa, en alianza con Samsung, lanzó la aplicación “Punto Trader”, a través de la cual, según la descripción de la misma empresa, cualquier persona puede ser un inversionista con un capital mínimo de mil pesos.
Al primer trimestre de 2015, Grupo Elektra registró un aumento de 31 por ciento en sus utilidades de operación a 2 mil 565 millones de pesos, según datos de la propia empresa.
TV AZTECA
TV Azteca es otro de los grandes negocios del emporio Salinas Pliego. De acuerdo con la descripción de la firma, es una de las principales productoras de contenido para televisión en habla hispana, y es propietaria además de Azteca América, la cadena de televisión de mayor crecimiento en los Estados Unidos; Monarcas Morelia y Atlas, equipos de primera división de la Federación Mexicana de Fútbol y opera Azteca Internet, portal de Internet y mercado virtual para usuarios de habla hispana en América del Norte.
TV Azteca y Televisa son dueñas del 94 por ciento del mercado de la televisión abierta en México. La empresa de Ricardo Salinas ha sido señalada como actor preponderante. Esta televisora ha consolidado que la televisión en México sin importar la calidad de los contenidos, es una herramienta para hacer política que beneficia además los negocios que Grupo Salinas tiene a la par.
La televisora de Salinas Pliego, como la de Emilio Azcárraga Jean, se ha visto beneficiada por el Gobierno federal no sólo por las legislaciones "a modo" que les han permitido continuar con este monopolio, como lo es la llamada Ley Televisa; además han recibido concesiones con montos millonarios para explotar el espectro electromagnético del país.
Sin embargo, durante 2014 la utilidad neta de TV Azteca cayó 76 por ciento durante 2014, luego de que esta fuera de 280 millones de pesos (mdp) el año pasado, una cifra menor a los mil 158 mdp que reportó durante 2013. Lo anterior, según la compañía, debido al crecimiento en costos que se derivó de derechos de exhibición y costos de producción relacionados con la transmisión de juegos de la Copa Mundial en Brasil, así como de las consolidaciones de Azteca Comunicaciones Colombia y del equipo de futbol Atlas.
SALINAS Y EL MERCADO ENERGÉTICO
El magnate de los "abonos chiquitos" ha incursionado también en el mercado energético, el 11 de febrero de 2014, Grupo Salinas informó que había invertido más de mil 400 millones de pesos en el Parque Eólico Los Altos, ubicado en el estado de Jalisco, para producir energía eléctrica para abastecer algunas zonas del estado.
En el evento estuvo presente el Secretario de Energía Pedro Joaquín Coldwell.
En esa ocasión, Ricardo Salinas, presidente del Grupo, habló con entusiasmo de la Reforma Energética, la cual se aprobó meses después, el 6 de agosto de 2014, y en la cual el empresario confió habría más apertura para la inversión privada.
“La Reforma Energética potencia la inversión del sector privado y lo que queremos es tener reglas claras. Vamos por muy buen camino”, declaró el empresario quien ya mostraba su interés por el sector energético.
El Parque Eólico Los Altos tiene 28 aerogeneradores que producen energía eléctrica renovable, genera hasta 326 kilowatts hora al año y, aseguran, evitará la emisión de más de 79 mil toneladas de bióxido de carbono al año.
El apellido Salinas también incluso salió a relucir durante la discusión de la Ley de Hidrocarburos, cuando la Senadora del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) e hija Ricardo Salinas, Ninfa Salinas Sada fue cuestionada y se le pidió que aclarara en tribuna si ella o su familia tenían negocios en la industria energética. La Senadora por el Partido del Trabajo, Layda Sansores San Román fue más allá. Le recordó que es un deber ético y legal excusarse de participar en la discusión o aprobación de leyes que favorezcan intereses personales.
Ninfa Salinas subió a tribuna, pero no respondió a los cuestionamientos de la legisladora. En su intervención sólo se refirió a la Ley de Hidrocarburos como garante del medio ambiente.
Actualmente, Ninfa Salinas sigue siendo parte de la Comisión de Energía del Senado de la República.