El director general de la OMS adelantó que para participar en ese mecanismo de depósito habrá un acuerdo voluntario y que la OMS facilitará la transferencia y uso del material patógeno almacenado en función de los criterios que se acuerden.
Ginebra, 13 de noviembre (EFE).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció hoy su plan de abrir un depósito en Suiza para guardar material patógeno recolectado en distintas partes del mundo y que estará al servicio de la humanidad en caso de amenazas sanitarias como la que pesa sobre el mundo con la pandemia de coronavirus.
“La pandemia ha mostrado que hay una necesidad urgente de contar con un sistema global para compartir material patógeno y muestras clínicas”, dijo hoy el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Ese material es indispensable para iniciar toda la investigación necesaria en torno a nuevos patógenos, como el del coronavirus SARS-CoV-2, y buscar pistas sobre la manera de diagnosticarlos, tratarlos y desarrollar vacunas.
Tedros dijo que un sistema para recolectar el material patógeno “no puede depender de negociaciones entre países” porque éstas “pueden tomar años” y lo que se necesita es actuar con la mayor rapidez posible cuando surgen nuevas amenazas a la salud pública mundial.
El director general de la OMS adelantó que para participar en ese mecanismo de depósito habrá un acuerdo voluntario y que la OMS facilitará la transferencia y uso del material patógeno almacenado en función de los criterios que se acuerden.
El Gobierno suizo ha ofrecido a la OMS las instalaciones de un laboratorio de alta seguridad para resguardar ese delicado material.
Esta iniciativa fue expuesta por los responsables de la OMS a los gobiernos durante la asamblea anual de la Organización que se celebró esta semana de forma virtual y que Tedros clausuró hoy con este anuncio.
En la misma intervención, el director general reconoció que la noticia de que una candidata a vacuna contra la COVID-19 ha mostrado un nivel de eficacia del 90 por ciento es esperanzador y que, si resulta cierto, será la vacuna que se habrá desarrollado más rápidamente en la historia.
Sin embargo, pidió “no poner todos los huevos en la misma canasta” y olvidar las medidas que se han desarrollado para frenar la pandemia.
“El virus no ha cambiado, sabemos lo que funciona. Primero conocer bien la situación epidemiológica y luego encontrar, diagnosticar, aislar y cuidar a los infectados, poner en cuarentena a sus contactos y, finalmente, empoderar a las comunidades para que se protejan con la distancia física, el uso de mascarillas, la higiene de manos y la ventilación”, recordó.
Lamentó que haya tenido que llegar una pandemia para poner en evidencia el enorme déficit de inversión en los sistemas nacionales de salud pública, una situación que ha dado lugar a una aguda crisis social y económica que está afectando a buena parte de la población mundial.