El inesperado repunte de la inflación de este año refleja los precios mucho más altos de los alimentos y la energía, pero también de los automóviles nuevos y usados, las habitaciones de hotel, la ropa y los muebles, entre otros bienes y servicios.
Por Christopher Rugaber
WASHINGTON (AP) — Los precios al consumidor en Estados Unidos subieron 0.4 por ciento en septiembre, un poco más que el aumento de agosto, haciendo que la tasa de inflación anual registrara su incremento más alto en 13 años.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) subió a 5.4 por ciento en septiembre respecto del año anterior, informó el miércoles el Departamento de Trabajo, ligeramente por encima del alza de 5.3 por ciento de agosto e igualando los aumentos en junio y julio, que fueron los más altos desde 2008.
Si se excluyen las categorías volátiles de alimentos y energía, la inflación subyacente aumentó 0.2 por ciento en septiembre y 4 por ciento en comparación con el año anterior. Los precios de los bienes y servicios básicos alcanzaron un máximo de tres décadas del 4.5 por ciento en junio.
Los precios de la energía subieron en septiembre un 24.8 por ciento y los de los alimentos subieron un 4.6 por ciento, según el informe del Gobierno. Los precios que pagan los consumidores por la gasolina aumentaron un 1.2 por ciento el mes pasado y han subido un 42.1 por ciento en un año.
Inflación en EUA por componente. La energía ha subido 24.8% respecto a septiembre 2020, con la gasolina subiendo 42% y el gas 20.6%. Los carros usados han subido 24.4%. pic.twitter.com/ZMgHnGjCc9
— Gabriela Siller Pagaza (@GabySillerP) October 13, 2021
La pandemia de COVID-19 cerró fábricas en Asia y desaceleró las operaciones portuarias de Estados Unidos, dejando a los buques portacontenedores anclados en el mar y a los compradores y empresas pagando más por los bienes que no llegan durante meses.
Las alzas de precios también están superando los incrementos salariales que muchos trabajadores pueden obtener de las empresas, que tienen que pagar más para atraer empleados. Los salarios medios por hora aumentaron un 4.6 por ciento en septiembre con respecto al año anterior, un alza saludable, pero no lo suficiente para mantener el ritmo de la inflación.