Desde el 30 de julio, la Administración de Joe Biden retomó el envío vía aérea de migrantes deportados a sus países de origen en Centroamérica.
Tapachula (México), 12 ago (EFE).- Unos 240 migrantes guatemaltecos deportados de Estados Unidos, procedentes de la ciudad de McAllen (Texas), arribaron este jueves al Aeropuerto Internacional de Tapachula, ciudad del estado mexicano de Chiapas, para después ser trasladados a la frontera México-Guatemala.
Los migrantes fueron expulsados del territorio mexicano por la frontera de El Carmen San Marcos, Guatemala.
Alrededor de las 18:00 horas la nave que trasladaba a los migrantes aterrizó en Tapachula y fue recibida por agentes de la Guardia Nacional y del Instituto Nacional de Migración (INM).
En un primer momento, las autoridades migratorias instalaron dos autobuses de pasajeros para que los extranjeros los abordaran para ser deportados por la frontera México-Guatemala, ubicado a unos 30 minutos de la terminal aérea de Tapachula.
Posteriormente, instalaron otros vehículos para el traslado de los migrantes y también evitar que los medios observaran la logística y la forma que eran subidos a las unidades, en medio de un discreto operativo de los agentes.
Según pudo apreciar Efe, los migrantes, mujeres y hombres que venían en el vuelo, descendieron con sana distancia y respetando los protocolos sanitarios que exige la pandemia de la COVID-19.
En los autobuses, estacionados a un costado del avión, se observaron adultos, jóvenes y niños.
Este es el cuarto vuelo en esta semana procedente de McAllen que traslada a migrantes expulsados de EU.
Dos hora más tardes, los cuatro autobuses, custodiados por la Guardia Nacional, arribaron a la frontera de Talismán en El Carmen, departamento de San Marcos, Guatemala.
A pesar de una fuerte lluvia, la deportación de las familias migrantes no se detuvo y llegó hasta la franja fronteriza entre México y Guatemala.
Tras pasar la aduana mexicana, los migrantes guatemaltecos permanecieron debajo de una carpa habilitada por el Ministerio de Salud hasta que pasara la lluvia y minutos después tomaron camino hacia sus comunidades.
El 30 de julio, la Administración del Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, retomó de forma oficial las remociones rápidas al enviar vía aérea a personas sin documentos deportadas a sus países de origen en Centroamérica.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó en un comunicado que “reanudó los vuelos de expulsión acelerada para ciertas familias que llegaron recientemente a la frontera sur”, las cuales fueron enviadas a Guatemala, El Salvador y Honduras.
El martes, delegaciones de México y Estados Unidos concretaron una reunión de alto nivel en la sede de la Cancillería mexicana en la que abordaron temas de migración en la región, además de seguridad en la frontera común y desarrollo económico.