El Gobierno de Antonio Gali Fayad anunció que se reunirá con los directivos de la fábrica y los afectados para llegar a un acuerdo y ordenó a la armadora suspender temporalmente este método.
Los campesinos acusan que las bombas antigranizo que lanza Volkswagen han ocasionado que deje de llover en esas zonas y han afectado al menos 2 mil hectáreas desde junio que comenzaron a lanzarlas.
Por Esteban de Jesús López
Puebla/Ciudad de México, 13 de julio (PeriódicoCentral/SinEmbargo).– El conflicto entre pobladores de juntas auxiliares de la capital y de los municipios de Cuautlancingo y Amozoc, Puebla, contra Volkswagen por el uso de bombas antigranizo ha ido en escala, pues los agricultores acusan que han afectado sus cosechas por la “falta de lluvia” y emprendieron una guerra: bloquearon los accesos de la planta armadora y exigen 73 millones de pesos como indemnización.
El gobierno de Puebla anunció que se reunirá con los directivos de la fábrica y los afectados para llegar a un acuerdo, pero hasta en tanto ordenó a la armadora suspender temporalmente este método en lo que llegan a un acuerdo con los agricultores pues de no hacerlo advirtió sanciones.
El conflicto inició en el mes de junio, cuando Volkswagen comenzó a utilizar esta tecnología para evitar que los automóviles que produce se dañen con las lluvias, pero surgió la inconformidad de la población, por lo que a través de un comunicado, anunció la suspensión de las bombas antigranizo, hasta que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) emitiera un dictamen sobre la afectación que genera este tipo de artefactos, sin embargo, los pobladores aseguraron que continúan con esta práctica.
No obstante, tras el llamado del gobierno estatal, la compañía accedió a suspender el uso de cañones antigranizo, según lo publicó El Sol de Puebla.
El pasado 2 de agosto, agricultores las juntas auxiliares de la Resurrección, Canoa, San Miguel Espejo, Xonacatepec, Aparicio, Acajete y Tepatlaxco, se manifestaron afuera de VW, para exigir a los gobiernos estatal y federal que le retiren el permiso a la automotriz.
La denuncia fue porque las bombas antigranizo han ocasionado que deje de llover en esas zonas y han afectado al menos 2 mil hectáreas desde junio que comenzaron a lanzarse estos cañones.
Días después, el titular de la Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial (SDRSOT), Rodrigo Riestra Piña, anunció que la administración estatal ordenó a Volkswagen suspender temporalmente el uso de bombas antigranizo para terminar el conflicto social.
Riestra Piña dijo que la empresa debe presentar un informe de incidencias en las precipitaciones en los últimos días en las zonas supuestamente afectadas. En entrevista para Informativo 102, que la dependencia a su cargo sancionará a la automotriz si continúa utilizando cañones antigranizo, no obstante, la compañía germana accedió al llamado del gobierno estatal.
El Gobernador, Tony Gali prometió que este fin de semana quedará resuelto el conflicto a través del diálogo. En dicho encuentro aseguró que será ordenado y sin ningún “abuso” de ambas partes, incluso abrió la posibilidad de que los campesinos sean compensados por las afectaciones a sus cosechas.
El mandatario estatal informó que Volkswagen entregó a su administración, específicamente a la Secretaría General de Gobierno (SGG) el permiso y autorización para el uso de los cañones antigranizo.
El Sol de Puebla publicó un video en el que se explica el funcionamiento de las bombas que evitan la caída de granizo para proteger los vehículos que se producen en la planta armadora en Cuatlancingo, Puebla.
El Sistema de Protección Anti Granizo (SPAG), es la empresa encargada de llevar a cabo este método cuya finalidad es la de “proteger” la producción en los campos. La idea surgió tras seis años de intensas granizadas en una finca de producción de manzana en Francia.
El SPAG ha colocado 800 cañones en 22 países, incluido México y el método antigranizo funciona con eficacia del 95 por ciento de eliminación.