De acuerdo con los archivos a los que tuvo acceso el Proyecto sobre Organización, Desarrollo, Educación e Investigación (PODER) , se puede constatar “el estado deplorable y de abandono en el que se encontraba la planta de Agronitrogenados de Coatzacoalcos en Veracruz, adquirida como si estuviera en funcionamiento”.
En las fotografías, se observan tuberías oxidadas, cables corroídos por el tiempo, pasos de concreto enmohecidos y una torre que se caía a pedazos: ese es el escenario de lo que las autoridades de Pemex adquirieron como una: “Planta en funcionamiento”.
Ciudad de México, 13 de junio (SinEmbargo).– El Proyecto sobre Organización, Desarrollo, Educación e Investigación (PODER) reveló esta mañana las primeras imágenes sobre las condiciones en las que se encontraba la planta de Agronitrogenados de Coatzacoalcos, Veracruz, cuando Altos Hornos de México (AHMSA) se la vendió a Petróleos Mexicanos (Pemex) en 2014, bajo la dirección general de Emilio Lozoya Austin, a un sobreprecio de 475 millones de dólares.
De acuerdo con los archivos a los que tuvo acceso la Organización No Gubernamental (ONG), se puede constatar “el estado deplorable y de abandono en el que se encontraba la planta de Agronitrogenados de Coatzacoalcos en Veracruz, adquirida como si estuviera en funcionamiento”.
En las fotografías, se observan tuberías oxidadas, cables corroídos por el tiempo, pasos de concreto enmohecidos y una torre que se caía a pedazos: ese es el escenario de lo que las autoridades de Pemex adquirieron como una: “Planta en funcionamiento”.
“La Auditoría Superior de la Federación (ASF) calificó la compra-venta de fraude. Esta operación se enmarca dentro del caso Odebrecht, que afecta a varios países de la región, y es la razón por la cual Alonso Ancira Elizondo, presidente del consejo de administración de Altos Hornos de México (AHMSA) está preso y Emilio Lozoya Austin reclamado por la justicia”, recordó PODER.
En un documento, obtenido por PODER, se estipulan las diferentes acciones necesarias para poner en funcionamiento la planta y en él se califica de “Estado crítico” a partes cruciales del complejo.
“El detalle de esta información y las fotografías no se han revelado hasta ahora debido a que el Estado Mexicano los considera información confidencial”, subrayó en un comunicado.
Según la vista de las imágenes, la Planta de Urea I en la sección de la torre está completamente dañada y necesita ser restaurada en puntos clave de la estructura. Asimismo, el interior de la torre también presenta importantes muestras de deterioro.
“Recordemos que según la ASF el 60 por ciento del equipo tuvo que ser reemplazado o renovado”, precisó la ONG.
En otra fotografía se muestran unos condensadores y un sistema tuberías, donde prácticamente todo el material visible está prácticamente corroído, “el óxido es tan evidente que incluso por las paredes escurre la tinta roja rastro del tiempo que pasó sin ser utilizado”. Algunas paredes de lámina cubren un almacén interno, también envejecidas y oxidadas.
Además, se confirma que las bombas de alta presión que son utilizadas actualmente para alimentación de amoníaco y amonio están conectadas a una especie de motor.
“Los aparatos están visiblemente en desuso puesto que el motor al que deberían conectarse se encuentra en el piso y la base de sostén para la primer bomba también se cae a pedazos”, señaló.
Mientras que las líneas de vapor son la zona más dañada. Existen orificios visibles y tubería destrozada. Finalmente, en cuanto a la Planta de Urea II Sección, igual a lo ocurrido en la Planta de Urea I y el resto del escenario, la corrosión en todo el entorno es severa.
“Las torres y escaleras que se desmoronan son casi tan evidentes como lo dicho por la ASF, que la planta era inoperable. En diciembre de 2013, y con las instalaciones en este estado, Pro Agroindustria, S.A. de C.V., filial de Petróleos Mexicanos (Pemex), adquirió la planta de fertilizantes como si estuviera funcionando. En el proyecto se estimaba que la planta de Urea iniciaría operaciones en noviembre de 2015 y la otra en abril de 2016. A la fecha de cierre de la auditoría (enero de 2017), la planta aún no había entrado en operación”, subrayó PODER.
En días pasados, SinEmbargo publicó un texto de Univisión que revela que la compra de Grupo Fertinal, una empresa en quiebra, fue justificada en tiempos de Lozoya citando un informe de la firma PricewaterhouseCoopers (PWC) que contenía información alejada de la realidad en cuanto al valor de la empresa y que fue elaborado a la medida de quienes presionaban por la aprobación del contrato.
Según documentos y testimonios obtenidos en exclusiva por Univisión, el informe de PWC sí advierte que en los últimos años Fertinal había operado con pérdidas, que su valor era mucho menor a otras compañías de tamaño similar y que tenía deudas millonarias.
En una denuncia presentada por Pemex a la Fiscalía mexicana en marzo de este año Pemex aseguró que según el criterio de expertos consultados, Fertinal, comprada en diciembre de 2015, “se encontraba técnicamente en quiebra desde su adquisición”.
El proceso de aprobación del polémico contrato estuvo además rodeado de presiones e incluso amenazas, según una persona del consejo de Administración de Pemex que se oponía a la compra de la empresa.
“Lo peor que me ha sucedido en la vida ha sido formar parte del Consejo de Administración de Pemex. Hubo un acoso constante a los consejeros. Recibíamos mensajes, nos tenían intervenidos los teléfonos, nos investigaron a todos”, dijo la persona que integró el Consejo mientras Lozoya era el director general.