Ante la Asociación de Criadores de Caballos Cuarto de Milla de Oklahoma, José Treviño y sus socios eran empresarios modelo, informa este día un amplio reportaje de Lorena Figueroa en El Diario de El Paso, Texas. Pagaban siempre sus cuentas y no le quedaban debiendo a veterinarios y a otros proveedores de servicios. Aunque compraban yeguas y sementales a precios exorbitantes, hasta ayer se reveló que José no era un simple constructor, sino el hermano de Miguel Ángel Treviño, uno de los capos del cártel mexicano de “Los Zetas”.
La Procuraduría General de la República descartó ayer formular cargos contra el hermano de Miguel Ángel Treviño Morales, “número dos” del cartel Los Zetas, ya que no existe “ninguna investigación” sobre sus presuntas actividades criminales.
Para capturar a José Treviño y a seis personas más se realizó un operativo nacional que desmanteló una red de “lavado” que operaba mediante caballos de carreras, algunos de ellos que corrieron en el Hipódromo y Casino de Ruidoso Downs, Nuevo México, el cual fue cateado ayer por elementos del Buró Federal de Investigaciones (FBI).
Finalmente José fue detenido junto con su esposa en su rancho de Oklahoma.
La acción policial se dio a raíz de una acusación formal en contra de un total de 14 personas, incluyendo un residente de El Paso, quien fungía como intermediario para la compra de caballos y que se encuentra fugitivo, de acuerdo con documentos oficiales citados por El Diario.
Por la mañana del martes, agentes del FBI ejecutaron una acción policial en el hipódromo y casino de Ruidoso en cumplimiento a una orden de cateo, confirmó el agente Frank Fisher, portavoz de la dependencia federal en Albuquerque.
El operativo en Ruidoso tenía como objeto intervenir a Tremor Enterprises, una criadora de caballos propiedad de Miguel Ángel Treviño, de 38 años, conocido como el Z-40 y segundo mando en importancia del Cártel de los Zetas.
Éste es hermano menor de José Treviño Morales, de 45, fundador y operador también de Tremor Enterprises, de acuerdo con informes del procurador general del Distrito Oeste de Texas, Robert Pitman.
José fue capturado con varios de sus colaboradores en su rancho de Lexington, Oklahoma, donde también las autoridades federales realizaron el operativo, en el que participaron cientos de agentes y se usaron varios helicópteros.
Tremor Enterprises se encuentra enlistada como una empresa localizada en Balch Springs, Texas, y fue formada en el 2009. Oficiales de la Secretaría de Texas no respondieron de inmediato el martes para confirmar lo anterior.
Los hermanos Miguel Ángel, José y Oscar Omar Treviño Morales, de 36 años (este último conocido como el Z-42 dentro del Cártel de Los Zetas) y el resto de sus cómplices enfrentan un cargo de conspiración de “lavado” de dinero, según la acusación formal archivada el 30 de mayo en la Corte Federal de Austin y hecha pública apenas ayer.
Además de José fueron arrestados la esposa de éste, Zulema Treviño, de 38 años, en Lexingon, Oklahoma, así como Fernando Solís García, de 29, en Ruidoso, Nuevo México; además, Carlos Miguel Nayen Borbolla, de 26 años, y Felipe Alejandro Quintero, de 28, en Los Ángeles, California; y Eusevio Maldonado Huitrón, de 48, en Austin, Texas.
Además de Miguel Ángel y Oscar Omar Treviño Morales, otros de los acusados aún no capturados son Raúl Ramírez, de 20 años y de El Paso, así como los mexicanos Francisco Antonio Colorado Cessa, de 51 años; Víctor Manuel López, de 31; Sergio Rogelio Guerrero Rincón, de 40; y Luis Gerardo Aguirre, de 35.
De acuerdo con la acusación formal, en 2008 los hermanos Miguel Ángel y Oscar Treviño Morales comenzaron a enviar dinero a José y su esposa Zulema, aquí en Estados Unidos, para que comprara propiedades y caballos conocidos como “cuarto de milla” (quarter horses) con el objetivo de “lavar” dinero de Los Zetas, una organización que ha ganado auge en México gracias a sus métodos sanguinarios.
El documento oficial identifica millones de dólares en transacciones en Nuevo México, Oklahoma, California y Texas que involucran la compra de estos caballos “cuarto de milla” a través de Tremor y otras compañías a nombre de José y Zulema, así como de las empresas en Estados Unidos y México de varios de los acusados, que fungían como “intermediarias”.
El texto da como ejemplo que Raúl Ramírez, de El Paso, junto con José Treviño, Carlos Nayen y Sergio Rincón, asistieron a una subasta de la compañía de venta de caballos Ruidoso Yearling Sales del 3 al 5 de septiembre de 2010. Ellos compraron 23 caballos con un valor de más de 2.24 millones de dólares.
Ese mismo mes y año, pero en el Día del Trabajo (Labor Day) José Treviño, junto con su colaborador y su socio Ramiro Villarreal, ganaron el primer lugar de la carrera All American Futurity en el hipódromo de Ruidoso, considerada el equivalente del Derby de Kentucky.
Ellos formaron parte de un grupo de hombres ondeando banderas mexicanas y piñatas en miniatura que se presentaron para recoger el premio de un millón de dólares obtenido por el caballo “Mr. Pilot”, de acuerdo con un reportaje de The New York Times, publicado el martes.
El reportaje adelantó el operativo en contra de Tremor Enterprises y la supuesta conexión del Los Zetas, mencionando una investigación de meses y varias fuentes anónimas.
Informó que, en tres años y participando en las más prestigiosas carreras de cuarto de milla en Estados Unidos, los hermanos Treviño lograron amasar premios por 2.5 millones de dólares.
La red de Los Zetas destinaba alrededor de un millón de dólares al mes para comprar caballos de carreras. Los movimientos sospechosos comenzaron cuando en enero de 2010 en un solo día pagaron más de un millón de dólares por dos yeguas para cría.
“Esta investigación revela la variedad de intentos de los cárteles de la droga mexicanos para expandir sus empresas criminales bajo cualquier medio”, dijo el agente especial a cargo del FBI, Armando Fernández.
De acuerdo con la acusación formal, el Gobierno Federal busca la incautación de varios de los caballos “cuarto de milla”, incluidos “Mr. Pilot” y “Tempting Dash”, ganador de Dash for Cash en la carrera Lone Star Park en Gran Prairie, Texas, en octubre 24 del 2009, así como equipo y propiedades en Lexington, Oklahoma y el Condado de Bastrop, en Texas, además de 20 millones de dólares en ganancias obtenidas del “lavado” de dinero.
“Este caso es un claro ejemplo de la habilidad de los cárteles de la droga mexicanos para introducirse en industrias estadounidenses legales y subraya la seria amenaza que causa el lavado de dinero a nuestro sistema financiero”, dijo Richard Weber, jefe de la unidad de Investigaciones Criminales del Servicio de Impuestos Internos (IRS, por sus siglas en inglés).
La directora de la Asociación de Carreras de Caballos de Cuarto de Milla de Oklahoma, Debbie Schauf, dijo a la AP que José Treviño se presentó hace un par de años y rápidamente se ganó la reputación de siempre cubrir sus cuentas y pagar grandes sumas por varios de los mejores caballos del país.
“También eran conocidos por cuidar sus negocios. Pagaban sus cuentas y no causaban ningún problema”, comentó.
Agregó que resultaba común que los compradores foráneos pagasen en efectivo por los caballos, pero que varias transacciones llamaron la atención por su valor.
Mensajes al Hipódromo y Casino Ruidoso Downs no fueron contestados hasta el término de esta edición.
Pero Shaun Hubbard, gerente general del hipódromo y casino, dijo a la Prensa Asociada que los funcionarios del hipódromo saben poco sobre la redada, pero que están cooperando con las autoridades federales.
De ser encontrados culpables, cada uno de los acusados encara hasta 20 años en prisión federal. (Lorena Figueroa/ El Diario de El Paso)