Ciudad de México, 13 may (SinEmbargo).- La infancia y la adolescencia del actor Tobey Maguire (Santa Mónica, California, 27 de junio de 1975) estuvieron marcadas por la pobreza, el exceso de alcohol y el uso de drogas. Sin embargo, impulsado por la necesidad de ganar dinero, se hizo estrella de cine a sabiendas de que iba a tener éxito.
Así lo ha dejado saber el coprotagonista de la esperada The Great Gatsby, junto a Leonardo DiCaprio, dirigida por el australiano Baz Luhrmann, en una extensa entrevista realizada por el periódico inglés The Guardian, donde entre otras cosas se mostró relajado frente al desafío que impone una nueva versión cinematográfica de la clásica novela de F.Scott Fitzgerald.
“Es como Shakespeare, haz lo que quieras, una versión cubista, una mirada fiel al libro, puedes romper la novela, deconstruirla, puedes no hacer nada. De cualquier manera es arte”, enfatizó el otrora Hombre Araña.
Nick Carraway, hijo de una familia distinguida y acomodada, juega en la novela de Fitzgerald el papel de testigo en la historia de amor imposible entre el fascinante y enigmático Gatsby y Daisy Buchanan.
En medio, el marido de Daisy, Tom Buchanan, personaje que en la nueva versión quedó en manos del actor australiano Joel Edgerton.
“No he sentido ninguna presión extraordinaria por encarnar a Nick Carraway en la que mucha gente considera la mejor novela de la historia literaria estadounidense”, dijo el actor.
UN ROL HECHO A SU MEDIDA
La afabilidad y la timidez de Maguire resultan ideales para un personaje ecuánime y sin duda la única persona buena de la historia, en un rol que el propio actor considera difícil.
“Nick es un observador nato, por lo cual se vuelve dificultoso mostrarlo activo en su rol de testigo y narrador”, dijo Tobey.
Si en la novela y en consecuencia Carraway reflexiona sobre la amistad con Gatsby, no es poca cosa saber que entre Maguire y el protagonista Leonardo DiCaprio hay una profunda amistad que viene desde la década de los ’90, pese a lo cual Maguire precisa que “nuestras vidas son diferentes”.
Mientras Tobey, por ejemplo, es un hombre felizmente casado con la diseñadora de joyas Jennifer Meyer, con quien ha procreado a Ruby y a Otis, Leo se mantiene soltero, quizás tratando de alcanzar el récord de George Clooney, otro que huye del matrimonio como de las altas temperaturas.
“Ambos somos personas competitivas y creo que tenemos mucha confianza en nuestros propios caminos individuales. Podemos bromear entre nosotros acerca de la competencia, sin perder la amistad”, declaró Maguire a The Guardian.
Un pasado lleno de carencias otorga a Maguire una profunda mirada crítica sobre el tan mentado sueño americano, al estar convencido de que el sistema de clases es en los Estados Unidos inflexible.
“Es falsa la idea de que la igualdad de oportunidades y la movilidad social en este país son tan fáciles. Es muy difícil en estos momentos, para mucha gente de la clase baja, soñar con un futuro próspero y diferente”, asegura.
“Si tienes la mente ocupada en pensar cómo vas a comer hoy o cómo harás para pagar la renta, se vuelve casi imposible soñar con un futuro mejor. Una vez que no tienes que preocuparte por eso, entonces se abre un espacio en tu cerebro para pensar en otras cosas”, dice.
“Cuando era niño, yo era muy pobre. Quiero decir, todo es relativo, pero a menudo obtenía alimentos de los vecinos, dormía en los sofás de familiares o pasaba con mis padres la noche en un refugio. Comíamos con cupones de alimentos y dependíamos de la salud pública. Yo quería salir de eso. Mi única ambición inicial fue la de tener dinero”, confiesa Tobey.
De joven comenzó a tomar clases de arte dramático y a trabajar en comerciales y programas de televisión, convencido de que al fin y al cabo la vida es fruto de nuestra imaginación.
En el filo de la madurez, Spider Man fue para una decisión acertada, al convertirse en la quinta película de mayor recaudación de todos los tiempos en los Estados Unidos, generando una franquicia que para el actor terminó cuando el director Sam Raimi y el elenco fueron despedidos.
Hoy, Tobey Maguire es vegano, no bebe ni toma drogas, acaso comete de vez en cuando excesos con el azúcar y las harinas blancas, un hábito que trata de superar a diario, con tenacidad.