Ciudad de México, 1 de abril (SinEmbargo).– Las expectativas de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) real para 2015 y 2016 disminuyeron una vez más, en relación a los pronósticos de febrero, informó hoy el Banco de México (Banxico) con resultados de la encuesta de marzo sobre las expectativas de los especialistas en economía del sector privado.
La encuesta, que recabó el Banco de México entre 35 grupos de análisis y consultoría económica del sector privado nacional y extranjero, indica que el pronóstico del PIB para 2015 bajó de una media de 3.08 a 2.95. El cálculo para 2016 también se ajustó a la baja: de 3.63 a 3.51.
Los analistas consultados por el banco central dijeron que los factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico de México son, en orden de importancia:
1 Los problemas de inseguridad pública (22 por ciento de las respuestas y el de mayor frecuencia por décimo sexto mes consecutivo).
2 La plataforma de producción petrolera (11 por ciento de las respuestas).
3 La debilidad en el mercado interno (10 por ciento de las respuestas).
4 La inestabilidad financiera internacional (10 por ciento de las respuestas).
5 El precio de exportación del petróleo (9 por ciento de las respuestas).
6 La política fiscal que se está instrumentando (9 por ciento de las respuestas).
Con respecto a las expectativas de inflación general para el cierre de 2015, para los próximos 12 meses y para el cierre de 2016 se mantuvieron en niveles similares a los de la encuesta de febrero con un 3.11 por ciento para este año, mismo que el previsto el mes anterior.
Para 2016, los especialistas mantuvieron en marzo el mismo pronóstico para la inflación general al situarla en 3.46 por ciento; sólo se realizó un ajuste a la alza para los niveles de 2017 al pasar de un 3.12 por ciento en febrero a un 3.19 por ciento en marzo.
"La probabilidad asignada por los analistas a que la inflación general se ubique dentro del intervalo de variabilidad de más o menos un punto porcentual en torno al objetivo de 3 por ciento se mantuvo en niveles similares a los reportados en la encuesta de febrero para los cierres de 2015 y 2016", explicó el Banco Central.
En cuanto al tipo de cambio, las perspectivas de los analistas para los cierres de 2015 y 2016 se revisaron al alza con respecto a la encuesta del mes previo. El precio del dólar que se prevé para este año pasó de 14.54 pesos en febrero a 14.79 pesos.
Para 2016 la cotización de la divisa norteamericana se ajustó de 14.31 pesos que previeron los analistas en la encuesta pasada a un precio de 14.69 pesos.
Sobre la percepción respecto al entorno económico actual, la proporción de analistas que considera que el clima de negocios mejorará en los próximos 6 meses disminuyó de 76 a 47 con respecto a la encuesta del mes anterior, aunque siguió siendo la preponderante.
Por su parte, la fracción de especialistas que piensa que el clima de negocios permanecerá igual aumentó de 21 a 44. También lo hizo de quienes piensas que empeorará, la cual pasó de 3 a 9.
La fracción de analistas que considera que la economía está mejor que hace un año disminuyó en relación al mes previo de 82 a 74.
En tanto, el porcentaje de analistas que considera que es un buen momento para invertir disminuyó de 58 a 48 con respecto a la encuesta del mes previo, aunque continuó siendo el preponderante, al tiempo que la fracción de especialistas que no están seguros sobre la coyuntura actual aumentó de 36 a 42.
Además, los analistas prevén que el Banco de México mantenga la tasa de fondeo interbancario en niveles cercanos al objetivo actual de 3.0 por ciento hasta el segundo trimestre de 2015, cuando estará en 3.36 por ciento.
Mientras que del tercer trimestre de 2015 al primero de 2017, los especialistas anticipan en promedio una tasa objetivo mayor a la actual, que iría de 3.62 por ciento al 4.69 por ciento.
"A partir del cuarto trimestre de ese mismo año [2015], prácticamente todos los analistas anticipan una tasa de fondeo interbancario por encima de la tasa objetivo actual", precisó.
Dio a conocer también, que los analistas previeron en cuanto al número de trabajadores asegurados por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), tanto los permanentes como los eventuales, para los cierres de 2015 y 2016, se mantuvieron a niveles similares a los reportados en la cuesta pasada.