Ciudad de México, 28 de enero (SinEmbargo).– "Si puta es ser libre y dueña de mi cuerpo soy puta… y qué?". Es el texto de una polémica campaña contra el feminicidio que se lee en cuatro espectaculares colocados en la capital ecuatoriana de Quito. El mensaje ha sido criticado por especialistas y los usuarios de las redes sociales de ese país al señalar que es ofensivo.
La campaña fue emprendida por la concejal municipal Carla Cevallos Romo. Además de los cuatro espectaculares, se colocaron cruces rosadas en otras partes de la ciudad de Quito, como símbolo de las mujeres asesinadas por cuestiones de género.
Cevallos Romo ha defendido su proyecto diciendo que cuestiona la visión machista que permite el maltrato a la mujer con el uso de la palabra “puta” en la vida cotidiana. “Utilizamos esa frase porque nuestra realidad es así, a la mujer la catalogan por actuar con libertad, por vestirse como desea vestirse, por hablar como quiere hablar”, dijo la concejal en declaraciones consignadas por la prensa de Ecuador.
La presidenta de la organización Red Vida y Familia de Ecuador, Amparo Medina, denunció por medio de un comunicado de prensa que la campaña tiene un contenido “tan mal intencionado y tan mal estructurado, que termina siendo una ofensa para la mujer, violenta y agrede a la dignidad de todas nosotras como madres, esposas e hijas”.
El especialista Daniel Granda, sociólogo y docente universitario, dijo al diario El Comercio que utilizar esa frase en las vallas es una idea reduccionista de los conceptos de mujer y de sus derechos. Consideró que sería saludable cambiarla.
Sin embargo, Francisca Morejón, secretaria ejecutiva nacional de la Red de Mujeres Políticas, dijo al medio que si bien puede no compartir los términos de la frase en las vallas, prefiere reconocer que el proyecto de la concejal es sumamente interesante, pues trata de evitar el feminicidio en el país.
En una encuesta realizada por El Comercio en su página web se pidió opinar a la gente sobre la campaña en contra del feminicidio en Quito. El 38.4 por ciento (mil 417 personas) consideró la campaña creativa, mientras que el 61.6 por ciento (2 mil 270 personas) dijo que la campaña es ofensiva.
En las redes sociales también se cuestionó el uso de la frase. “No puedo creer que estas vallas publicitarias las haya colocado el municipio. Qué barbaridad el contenido del mensaje. Si es verdad esto, quienes critican la libertad de expresión y la publicidad del sector oficial deberían estar a la fila para los reclamos pertinentes”, escribió el usuario de Facebook Fernando Salme Arroyo. En la misma red, la usuaria Mirian Amagua escribió: "Qué grosería más grande… Pensar y poner algo así".
